Los fabricantes de memorias ya sufren por la caída de ventas de dispositivos: tras la escasez de semiconductores llega el exceso de 'stock'

Chip expuesto en el Taiwan Semiconductor Research Institute (TSRI).
Chip expuesto en el Taiwan Semiconductor Research Institute (TSRI).

Reuters

  • Los productores de memorias RAM y de almacenamientos para dispositivos viven un momento complicado por el descenso global de ventas de dispositivos electrónicos.
  • Después de aumentar su capacidad por la escasez de semiconductores, ahora tienen exceso de inventario y sus resultados se resienten.

La industria lleva desde 2020 deseando que termine la escasez de semiconductores, pero pocos imaginaban que el fin de esta crisis significaría el inicio de otra —quién sabe si peor—.

La situación ha dado un vuelco y en la actualidad los fabricantes de semiconductores se enfrentan a un exceso de stock de componentes como las unidades de memoria y los almacenamientos, como ha alertado Bloomberg.

La nueva modalidad de crisis de semiconductores está afectando a marcas líderes en el sector como Micron Technology y SK Hynix, que han rebajado notablemente sus ingresos en la segunda mitad del pasado año 2022.

La surcoreana Samsung es la primera marca en cuota de mercado hoy en día. Ya sufrió por sus memorias RAM y almacenamientos en el tercer trimestre —su unidad de componentes y memorias bajó un 14% sus ingresos— y que se espera que se resienta de nuevo cuando presente esta semana los resultados económicos del último trimestre de 2022.

En general, se espera que los fabricantes de memorias y almacenamientos tengan unas pérdidas operativas de 5.000 millones de dólares durante este año 2023.

Carsten Olesen, presidente de Consumo de Harman, cree que la industria de audio habría vendido un 15% más de dispositivos sin la escasez de semiconductores

Gran parte de estas pérdidas se debe al inventario de estos componentes. Con la escasez de años anteriores, las marcas han aumentado de forma notable su capacidad de producción, ya que no eran capaces de satisfacer una demanda creciente por las necesidades del teletrabajo durante la pandemia.

Las fuentes de Bloomberg estiman que la producción llegó a triplicarse en 2022 con respecto al año anterior, llegando a sus cifras más altas históricas. 

Ahora, las ventas de dispositivos como smartphones y ordenadores han bajado de forma notable, con descensos interanuales del 17% en los móviles y del 16% en el PC, según los datos más recientes del analista Canalys. La inflación, la subida de tipos y la guerra de Ucrania están entre las causas del desplome.

Esta realidad ha hecho que los fabricantes de dispositivos encarguen muchas menos unidades de estos componentes y que los productores se encuentren con el suministro de 3 o 4 meses atascado en sus almacenes y sin comprador.

Esto supone un contratiempo importante en un sector que lleva un tiempo intentando sobreponerse a un problema crónico: la fuerte inestabilidad en la demanda de componentes y la dificultad de ajustar el suministro.

Aunque los productores esperaban poder predecir sus ingresos de forma más precisa gracias a una gestión de la demanda más organizada y la llegada de nuevos mercados para sus productos, como el 5G y la nube, la realidad actual ha echado por tierra sus planes.

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