Facebook probó a limitar al mínimo el contenido político, pero tuvo que dar marcha atrás al descubrir que la medida tenía un "coste elevado e ineficiente"

Durante años, Facebook ha tenido una relación conflictiva con la política, ya que hay pocos temas que hagan que los usuarios compartan tanto como el sensacionalismo político.

Aunque en un discurso en la Universidad de Georgetown en 2019, Mark Zuckerberg, CEO de Meta, matriz de Facebook, dijese que "la gente debería poder utilizar nuestros servicios para debatir sobre temas que les preocupan, desde la religión y la inmigración hasta la política exterior y la delincuencia", la tensión en las redes sociales siguió aumentando.

El culmen fueron los disturbios en el asalto al Capitolio de Estados Unidos en enero de 2021, lo que llevó a Facebook a tomar la decisión de reducir el contenido político que se compartía en su red social. 

En un primer momento, la plataforma bajo el paraguas de Meta pensó en un enfoque radical: eliminar de su algoritmo las recomendaciones de contenido político. Sin embargo, su esfuerzo por desvincularse de ser una de las fuentes de conflicto político está siendo más gradual y complicada de lo que esperado. 

Según los documentos internos a los que ha tenido acceso The Wall Street Journal, se reconocen las dificultades en este último año y medio para dejar la política a un lado y con ella, otros temas conflictivos. 

Las encuestas realizadas por Facebook acerca de este tipo de información, mostraban que los usuarios estaban cansados de las discusiones y del mal clima social que generaban. 

De esta manera, Facebook dejó de favorecer los contenidos políticos y se centró en intensificar publicaciones que los usuarios pudiesen percibir como entretenimiento, lejos de la irritación social, según publica TWSJ. 

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Sin embargo, estos cambios iban a afectar a los modelos de negocio de las publicaciones de noticias digitales que obtienen gran parte de su audiencia y tráfico de usuarios a través de Facebook, especialmente para aquellos que se dedican a temas políticos y sociales, ya que la compañía sigue siendo una de las plataformas de distribución de información más potentes del mundo. 

Según un análisis interno, Facebook podría alcanzar algunos de sus objetivos si se enfoca en perjudicar los contenidos cívicos, con contenidos políticos y sociales en el newsfeed, aunque eso implicaría un "coste elevado e ineficiente". 

La empresa intentó predecir las consecuencias probando los cambios de algoritmo en una pequeña muestra de usuarios estadounidenses de Facebook. Las pruebas mostraron que, para muchos medios de comunicación, los efectos iban a ser graves: el tráfico previsto caería entre un 40% y un 60%. 

Las medidas adoptadas hicieron caer las visualizaciones de lo que Facebook considera "publicaciones de noticias de alta calidad", como Fox News o la CNN, medios de comunicación que los propios usuarios consideraban fiables, con el resultado de nuevas críticas, según el TWSJ.

A finales de junio del año pasado, se evidenció que no se podía suprimir radicalmente el contenido político por la fuerza, así que Facebook ha recurrido, en cambio, a cambios graduales en el algoritmo que promueve lo que la empresa considera "temas sensibles". 

"Como dijo Mark hace casi 2 años, la gente quería ver menos política en Facebook en general, pero al mismo tiempo poder seguir participando del debate político si lo deseaban, y eso mismo es lo que estamos haciendo", afirmaba Dani Lever, portavoz de la compañía, al medio estadounidense. 

"A lo largo de los últimos años, hemos probado varios enfoques y, en última instancia, hemos introducido cambios que reducen la política, al tiempo que ofrecen a la gente las experiencias que desean".

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Pero los esfuerzos de Meta por alejarse por completo de los asuntos relacionados con la política van mucho más allá. Según publicaba Fortune, Facebook ha actualizado sus "expectativas de compromiso con la comunidad" en las comunicaciones internas de la empresa, con nuevas normas que prohibían a sus trabajadores hablar sobre el aborto, la eficacia de las vacunas o el derecho a portar armas. 

Meta estima ahora que los contenidos políticos representan menos del 3% de las visitas totales de los contenidos del newsfeed de los usuarios, según los documentos vistos por The Wall Street Journal.