¿Está en peligro el futuro de las criptomonedas? El colapso de FTX agudiza el 'criptoinvierno'

Varias criptomonedas en una caja.

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  • El fiasco de FTX, sumado a la crisis que las criptomonedas arrastran desde hace meses, enfrían aún más el 'criptoinvierno' que amenaza con acabar con la industria. 
  • Las diferencias entre la crisis de las criptomonedas de 2022 y la de 2018 son notables y no invitan al optimismo. 

Por si quedaba alguna duda, la bancarrota de FTX exchange ha confirmado que la actual crisis de las criptomonedas no se parece en nada a las anteriores. Este 'criptoinvierno', que cada día es más frío, tiene una serie de características que lo hacen excepcional. Tanto como para empezar a poner en duda la pervivencia de una industria que nunca había despertado tantos recelos.

La explosión definitiva del sector ha llegado con el colapso del intercambio de Sam Bankman-Fried, pero son ya muchos meses en crisis, que han dejado una larga lista de empresas por el camino. 

La caída de las criptomonedas: nada que ver con el 'criptoinvierno' de 2018

La periodista especializada en criptomonedas Olga Kharif hace un interesante análisis en Bloomberg acerca de qué está pasando en la industria y por qué son muchas las dudas que tienen los que están pensando en empezar a invertir en criptomonedas (e incluso los que llevan mucho tiempo haciéndolo). 

Después de que muchas criptomonedas, entre ellas bitcoin o ethereum, alcanzaran su precio máximo en noviembre de 2021, la capitalización de mercado de las divisas digitales cayó un 73%. Es inferior al desplome en la crisis de 2018 (que fue del 88%), sin embargo, el valor eliminado es mucho mayor: 2 billones de dólares 

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La principal diferencia entre crisis, señala Kharif, es que la anterior estaba provocada por problemas dentro de la propia industria, y la actual bebe de otros motivos, por ejemplo, el aumento de los tipos de interés. 

En Business Insider España ya se comentó que había muchas diferencias entre ambos periodos de caída: entre ellos, además del comentado, el hecho de que en la actual el apalancamiento que forzó la gran venta en el segundo trimestre de 2022 se le había proporcionado, sobre todo, a criptofondos e instituciones de crédito

Además, también afecta que hay una clara tendencia en el bitcoin y el resto de criptomonedas a comportarse cada vez más como los activos tradicionales de riesgo.

¿Qué desencadenó la actual crisis de las criptomonedas?

Aunque la crisis se estaba cocinando, todo comenzó cuando explotó el protocolo Terra. En solo unos días, la criptomoneda Luna perdió un 99,99% de su valor. Es el token de participación nativo del protocolo Terra, que utiliza a la stablecoin algorítmica UST para mantenerse estable. 

El sistema empleado era el siguiente: si UST subía por encima de un dólar, el algoritmo usaba Luna para generar más UST y reducía el precio. Si el precio bajara por alguna otra razón, cambiaba de UST a Luna para subirlo nuevamente. 

De repente, hubo una salida del ecosistema valorada en unos 1.500 millones de euros: "Eso es una manipulación clara del mercado, es un ataque coordinado de una ballena institucional", manifestó a este medio Alberto Mazaira, CEO de Depasify.

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Terra Luna, recuerda Kharif, arrastró a otras empresas como Three Arrows Capital o Voyager Digital. Después llegaron más: Celsius o Vauld

Y llegó la bancarrota de FTX, que, por si fuera poco, está trufada de sospechas de corrupción, con un nuevo CEO, John Ray, que ha arremetido duramente contra su predecesor en el cargo, Sam Bankman-Fried, y ha asegurado que en 40 años socorriendo a empresas en crisis nunca había visto nada igual. 

¿Qué futuro le espera a la industria de las criptomonedas tras el colapso de FTX?

Bancarrotas, inversores que pierden su dinero, empresas que se arruinan, trabajadores que se van a la calle... Demasiada presión para una industria que, en mayor o menor medida, siempre ha estado en entredicho. Ahora mucho más. 

Señala Kharif que se ha llegado a comparar a Terra y otras empresas de DeFi con nuevas variedades del esquema Ponzi. Y que la debacle de FTX demuestra que empresas teóricamente sólidas también pueden hundirse (aunque leyendo las últimas noticias sobre el exchange de Sam Bankman-Fried hay que poner muy en duda esa solidez). 

 

La ola, cada vez más beligerante, de la crisis de las criptomonedas, estima Kharif, sitúa a la industria ante un escrutinio mayor y, muy probablemente, retraerá a muchas personas que están planteándose comprar criptomonedas e invertir en el sector. 

La esperanza podría estar en una regulación más estricta que, sin embargo, iría en contra de la descentralización y la libertad que siempre han vendido los fanáticos de las criptomonedas

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