Sanidad forzará la vacunación si no logra que al menos un 60% de la población lo haya hecho en primavera

La población española comenzará a vacunarse dentro de 3 semanas. El éxito de este proceso mantiene en alerta al Gobierno, puesto que, según ha podido saber Economía Digital, Sanidad solo se conformará con que al menos un 60% de la población se haya vacunado en primavera.

De lo contrario, el Gobierno lo considerará un fiasco y activará medidas para forzar a los ciudadanos a inmunizarse. El Ministerio de Sanidad es consciente de que la vacuna despierta recelos y, por eso, ya maneja la idea de intensificar las campañas informativas para desmentir bulos y convencer a la población de la seguridad de la inyección.

Es decir, contra el escepticismo, más marketing e información. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a pesar de las dudas de la población respecto a la vacuna, está convencido de que entre 15 y 20 millones de españoles estarán inmunizados entre mayo y junio.

No lo hacen prever así las encuestas, sin embargo, ya que, a falta de 3 semanas de que llegue la vacuna a nuestro país, solo un 39% de los ciudadanos están dispuestos a recibir una inyección del antígeno.  

El Instituto de Salud Carlos III publicó recientemente la tercera ronda de su encuesta 'Cosmo Spain' sobre el comportamiento de la población con respecto al COVID-19.

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El informe de noviembre reveló que apenas el 39% de los encuestados está dispuesto a recibir una dosis de la vacuna si estuviera disponible mañana mismo. Son 4 puntos menos, de hecho, que el resultado del sondeo realizado en el mes de septiembre, que alcanzó un apoyo del 43%. 

Por ello, el Gobierno ya contempla la necesidad de aumentar el bombardeo informativo en los 13.000 centros de atención primaria y, en paralelo, orquestar una campaña mediática en todo el territorio nacional. 

Aviso de los expertos

El Ejecutivo también tendrá que tener en cuenta el consejo de los expertos: hay que generar confianza y manejar las expectativas irreales. 

El investigador del King’s College de Londres José M. Jiménez, en un artículo publicado en The Conversation a principios de octubre invitaba a ser "realistas" y no esperar un "milagro" de la vacuna. 

"Crear la falsa esperanza de que vamos a contar en breve con una vacuna o tratamiento efectivo contra el COVID-19 puede ser un alma de doble filo que podría causar una gran decepción si las expectativas no se cumplen", advirtió este experto. 

La vacuna todavía tiene que afrontar numerosos retos; el primero, su autorización por la Agencia Europea del Medicamento. Pero, entre los que más preocupan, también se encuentra el de demostrar su eficacia en condiciones de uso real y concienciar a la ciudadanía para que no relaje las medidas restrictivas impuestas por los gobiernos. 

Las medidas de protección social, como el uso de las mascarillas, seguirán hasta que haya un nivel significativo de población vacunada, desveló el ministro de Sanidad, Salvador Illa. 

Formación a sanitarios

Las personas mayores de las residencias y los profesionales sociosanitarios serán los primeros colectivos en recibirla y, según ha podido saber Economía Digital, Sanidad ya piensa en ofrecer formación a los sanitarios para que ellos mismos se encarguen de tranquilizar y ofrecer formación a la ciudadanía. 

"Probablemente, al final de verano estará vacunado un 70 % de la población. Y esto ya será mucho, aunque no será el fin de la pandemia porque esto se producirá cuando hayamos inmunizado a un alto porcentaje de la población mundial, y esto nos llevará todo el año 2021 y parte del 2022, según los expertos", informó este lunes el ministro de Sanidad, Salvador Illa. 

"Hay mucho que no sabemos aún sobre la inmunidad de las vacunas y aquí tenemos que aplicar el principio de precaución. Será cuando nos recomienden los expertos que se pueden ir levantando las restricciones, aunque yo soy partidario de no precipitarnos porque todos hemos visto el año que llevamos", destacó Illa. 

Silencio ante el despliegue logístico 

El Gobierno sigue sin explicar en qué consistirá la primera campaña informativa que planea lanzar para animar a la población a que se vacune y no es lo único sin definir por el momento.  

Illa ha insistido en que habrá una estrategia común para todo el país y confirmó que ya tienen listo un registro de farmacovigilancia.

"Permitirá tener dosis registradas, lotes y tipos de vacunas e identificar a todos los pacientes que se vacunen. Este sistema se trabaja coordinado con el resto de países europeos. El objetivo del plan es identificar posibles efectos adversos y garantizar el uso seguro de la vacuna", explicó.

Pero el Gobierno sigue sin concretar el despliegue logístico y de distribución de la campaña de vacunación. Sanitarios consultados por ED y distintos centros de la Comunidad de Madrid niegan haber recibido ningún tipo de información sobre el procedimiento logístico de la vacuna, ni sobre la campaña de vacunación. "Por el momento no nos han dicho nada", señalan desde el Hospital de La Paz. 

Artículo original de Economía Digital