El Pixel 4a llega para competir en la gama media con una cámara y una fluidez difíciles de superar

Google acaba de presentar el Pixel 4a, un móvil que viene a competir en un sector muy reñido: la gama media.

Los dispositivos de la línea 'a' se estrenaron con la tercera generación de los Pixel, y vienen a ser la versión 'para todos los públicos' de sus flagship. Estos se caracterizan por contar con características más comedidas que los mismos, pero a cambio ofrecen precios mucho más atractivos y un software limpio, sin capas de personalización de otros fabricantes.

Concretamente, el modelo de este año, el Pixel 4a, destaca, principalmente, por contar sobre el papel con una cámara moderada pero decente gracias a su posprocesado —especializada en la astrofotografía y con un modo retrato envidiable—. Además, como principal novedad, viene con una pantalla que incorpora una perforación lateral (donde se oculta el sensor de selfies), lo que permitirá al usuario tener un dispositivo muy adecuado para ver cualquier contenido que desee. De esta forma, elimina así el polémico y controvertido notch que no terminaba de encajar en los gustos de muchos usuarios.

Por si fuera poco, te ofrecerá un rendimiento espectacular gracias al Qualcomm Snapdragon 730G, así como una capa de seguridad extra a tu información personal gracias al chip Titan, fabricado por la propia compañía.

A esto se le une que es un equipo muy compacto y ergonómico, algo que he podido comprobar en estas primeras impresiones.

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Pero, ¿es oro todo lo que reluce? Sigue leyendo para saber qué debes saber del nuevo Google Pixel 4a:

Un diseño económico, pero agradable al tacto y con toda la esencia de los 'Pixel'

Como he comentado anteriormente, el Google Pixel 4a es un smartphone que viene a competir en la gama media. Por ello, rebaja alguna de las características más 'premium' de su hermano mayor, el Google Pixel 4XL.

Entre ellas se encuentran los materiales de fabricación. Mientras que la versión más 'pro' cuenta con unos acabados en cristal mate realmente originales, este dispositivo tiene unos terminados en plástico —también mate— que, si bien son agradables, dan una sensación un poco más low-cost.

Eso sí, resulta bastante ergonómico (puedes llegar a todos los lados de la pantalla sin problema con una sola mano) y cuenta con uno de los detalles más típicos de la compañía: un botón en un llamativo verde menta que encandilarán al público más joven.

Además, en la parte trasera podrás encontrar el sensor de huellas digitales, que aportará un extra de seguridad al dispositivo.

Como 'plus' adicional he de decir que Google ha diseñado una serie de fundas eco-friendly que se pueden lavar a máquina, algo que no es de extrañar porque es una de las compañías más preocupadas por el medio ambiente de la actualidad y siempre intenta reducir su huella ecológica en todos sus proyectos.

Una pantalla con perforación en la que podrás ver todo lo que quieras a una calidad más que aceptable

En este Google Pixel 4a, la multinacional ha decidido apostar por una perforación en el lado superior izquierdo de la pantalla en vez de un notch. Esto te permitirá ver todos los contenidos que desees de forma menos intrusiva, ya que dará la sensación de tener un panel 'infinito' mucho más grande. De hecho, personalmente, prefiero esta decisión a cualquier otra —pero, como todo, es cuestión de gustos—.

Concretamente, incluye una pantalla OLED de 5,81 pulgadas con una relación de aspecto 19.5:9 a una resolución FullHD+. Esto supone un incremento en resolución hasta los 2340×1080 píxeles con respecto a su antecesor, lo que sin duda es una buena noticia.

La tecnología que utiliza es especialmente buena, ya que ofrece unos negros más puros y unos colores alegres y vibrantes. Las primeras sensaciones son buenas, pero habrá que ver cómo se comporta cada día los próximos días.

Como punto extra, cuenta con una función que ya vi en su hermano mayor que me parece muy útil y que se denomina 'pantalla siempre activa'. Esto implica que puedes ver la hora y otros datos en su panel esté apagada.

Un rendimiento notable con un extra de seguridad

El Pixel 4a monta un Snapdragon 730G, el chip de gama media de Qualcomm por excelencia, al que le acompañan 6 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento interno. Con esta configuración se prevé que el dispositivo rinda al máximo y que no dé problemas en lo que se refiere a ejecutar varias apps a la vez o exigirle algún potente.

Además, contará con el chip de seguridad Titan M de Google, que aportará un extra de protección en este apartado. Concretamente, se encarga de proteger los datos más sensibles almacenados en el dispositivo, añadiendo una capa de adicional extra a la pantalla de bloqueo, y reforzando el cifrado del disco.

Por otro lado, gracias a este, se mantiene la integridad del dispositivo en el arranque. De esta forma, al iniciar el teléfono se comprueba que la versión de Android que se está usando es la correcta, y en caso de ataque, se evita que se pueda ejecutar una versión antigua no protegida ante posibles vulnerabilidades.

Promete hasta 24 de autonomía, pero eso habrá que verlo...

Una de las debilidades de los Google Pixel 4XL era su batería. Por ello, la compañía ha prometido solucionar este apartado otorgando al 4a un total de 3.140 mAh. Según la empresa, esta cifra asegura un día de autonomía, pero eso habrá que verlo en su análisis.

Si eres de los que exprime al máximo su tiempo con el teléfono, que sepas que cuenta con un sistema de carga rápida de 18W que te permitirá llenar de energía tu dispositivo al 50% en apenas 30 minutos.

Pero si hay algo que te sorprenderá es su cámara: hace más con mucho menos

Si hay algo por lo que destacan los Google Pixel es por su cámara, y este 4a no iba a ser menos. El dispositivo, aunque monta una comedida configuración, es capaz de hacer mucho más que otros que tienen un apartado fotográfico, sobre el papel, más avanzado (ya sea con más lentes o con más megapíxeles). Y es que, como digo muchas veces, no todo en el sector de la tecnología móvil son las especificaciones, también hay que tener en cuenta el software y el posprocesado de las imágenes —algo en lo que la compañía de Mountain View es la reina indiscutible—. Eso sí, no todo es perfecto en esta cámara, ya que echo en falta un par de detalles.

Concretamente, el apartado fotográfico del Google Pixel 4a consta de:

• Un sensor principal de 12,2 megapíxeles con tecnología dual pixel, estabilización óptica de imagen y con capacidad para grabar vídeo a 4K a 30fps. Este será capaz de captar la máxima luz posible para ofrecerte unas instantáneas casi idénticas a lo que podrías ver con tu ojo.
• Un objetivo para selfies de 8 megapíxeles con un ángulo de visión de 84º, que será más que aceptable para autorretratos.

En cuanto al software, incluye las funciones de su hermano mayor: HDR+ en tiempo real, controles de exposición dual, mejor toma, visión nocturna con astrofotografía, modo retrato y zoom alta resolución.

Entonces, ¿qué echo de menos? A priori, un gran angular y un zoom de más calidad. Aunque las pocas fotos que he podido hacer con el Pixel 4a me han sorprendido —especialmente las de retrato, las de detalle y las nocturas—, he de decir que me hubiera gustado una lenta que captara mejor los paisajes, así como un zoom más preciso.

Pero para hablar de ello con precisión, habrá que esperar a su análisis.

¡Mantiene el jack para auriculares!

En el apartado de conectividad, quizás podrías exigirle algo más por ese precio, pero cuenta con lo esencial... no necesitarás más: Tipo C, NFC, bluetooth 5.0 y WiFi a/b/g/n/ac. Eso sí, no viene con 5G —aunque tampoco es que sea imprescindible hoy en día—.

Además, una buena noticia que encantará a los amantes del sonido y los más nostálgicos: mantiene el jack para auriculares...¡Bien por Google!

Un software limpio, fluido y sin ataduras

Una de las cosas que más me gustan de los Pixel es su software. ¿La razón? Al no contar con ninguna capa de personalización, la experiencia es más rápida y fluida.

Además, la compañía se ha comprometido a asegurarle 3 años de actualizaciones, lo que es un 'plus' en el apartado de seguridad y obsolescencia. También viene, como extra, con las últimas versiones de todas sus apps —como el nuevo Google Assistant—, así como 3 meses de prueba de Google Play Pass, Google One y YouTube Premium.

Un precio irresistible para los amantes del software puro

Si estás harto de capas de personalización, apps preinstaladas y lo que quieres es fluidez en un dispositivo, el Google Pixel 4a es para ti.

A priori, puedo decir sin temor a equivocarme que te ofrecerá no solo una experiencia de usuario limpia y rápida, sino que también tendrás una cámara que, por ese precio, muy pocos móviles —o ninguno— cuentan, especialmente si te gusta la astrofotografía y el efecto bokeh.

Eso sí, si lo tuyo son las pantallas enormes, deberás optar por su versión 'XL', ya que sus dimensiones te podrían resultar un poco pequeñas.

Aunque habrá que esperar a su análisis para conocer a fondo este dispositivo, si ya te has animado a apostar por él, que sepas que estará disponible para reserva a partir del 10 de septiembre por 389 euros. Eso sí, no te llegará a casa hasta el próximo 1 de octubre.