Con los 34 millones de Facebook, la Hacienda española ha cobrado más de 85 millones de las grandes tecnológicas de EEUU en los últimos 5 años

Ricos y tecnológicos
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  • Las grandes tecnológicas estadounidenses han pagado más de 85 millones de euros a la Hacienda española en los últimos cinco años tras varias regularizaciones fiscales.
  • Los más de 34 millones de euros que ha pagado Facebook al fisco español para regularizar sus impuestos son solo el último ejemplo: antes Microsoft pagó 26 y Apple 16.
  • La tributación de las grandes multinacionales de Internet sigue en entredicho, mientras España se prepara para aplicar la tasa Google en 2021, de la que Hacienda calcula recibir 950 millones el próximo año, pese a la resistencia de las compañías.
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Los más de 34 millones de euros pagados por Facebook a la Hacienda española en concepto de regularización de impuestos, el mayor pago de una gran tecnológica en España, suponen que, en conjunto, las cinco grandes compañías de internet han abonado más de 85 millones al fisco español en el último lustro según los cálculos de La Información, a apenas unas semanas de que entre en vigor la Tasa Google, que gravará el 3% de varias áreas de negocio de estas compañías, las de publicidad online, servicios de intermediación y venta de información generada por el usuario.

Facebook ha sido la última de las cinco grandes en llegar a un acuerdo con la Agencia Tributaria, pero el suyo es el pago más oneroso, ya que regulariza los impuestos de sociedades del año 2013 al 2018, en un primer plazo de 14,4 millones a principios de este año y otro de 20 millones a finales de este 2020. 

En segunda posición se ubica Microsoft, que tuvo que abonar más de 14 millones de euros tras perder un pleito con Hacienda por los impuestos de sociedades y de la renta para no residentes de 2004 y 2005, que llegó hasta el Tribunal Supremo con resultado contrario a la multinacional de Redmond. Aún está pendiente otro pleito de unos 18 millones, para los que la empresa del sistema operativo Windows buscaba una salida "amistosa" a principios de año, según El País. Además, hace un año, Microsoft pagó otros 12 millones por otra inspección correspondiente al impuesto de sociedades de 2012 a 2014 y otra al IVA del 2013 al 2015. En total, más de 26 millones de euros.

Por su parte, Apple también ha tenido que ajustar cuentas con el fisco español. En 2017 tuvo que pagar más de 16 millones de euros, intereses incluidos, por varias inspecciones fiscales correspondientes a los ejercicios entre 2009 y 2012. También pagó otros 2,2 millones por su filial de marketing en el mercado ibérico, según La Información.

El caso de Google, precisamente la compañía que da nombre oficioso a la nueva normativa para gravar los ingresos de las grandes tecnológicas, es de menor cuantía: a principios de 2019 tuvo que pagar más de 3 millones después de que una inspección revelara atrasos e impagos del impuesto de sociedades por varios ejercicios entre 2011 y 2015, además del IVA de 2012 a 2014, incluyendo los recargos.

Hasta donde se conoce actualmente, Amazon no ha sufrido por el momento grandes multas por parte del fisco español, solo 2,2 millones de euros en 2016, ya que en España cuenta con cinco filiales de diferentes servicios, todas dependientes de su sociedad principal en Luxemburgo.

Del 'doble irlandés' a la tasa Google

La mayoría de estas compañías operan de una forma similar: utilizan filiales en España que facturan por servicios de marketing, publicidad o promoción, mientras el conjunto del negocio lo facturan en su matriz, habitualmente radicada en países con menor tributación, como Irlanda, Países Bajos o Luxemburgo.

Esta práctica de establecer un comisionista en el país donde se hace negocio que reporta a la matriz en un lugar con fiscalidad más ventajosa, toma nombres como el 'sándwich holandés', si la empresa esté radicada en Holanda, o 'doble irlandés' si se encuentra en Irlanda. El 47% de las ganancias declaradas en Europa por multinacionales estadounidenses en 2018 se declararon en Irlanda, unos 83.000 millones de euros.

Para atacar los ingresos de los negocios digitales se puso en marcha el Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales, más conocido como tasa Google, aprobada este octubre y que gravará al 3% apenas tres servicios muy concretos (prestación de servicios de publicidad online, servicios de intermediación en línea y venta de datos generados a partir de información proporcionada por el usuario) solo a empresas que ingresen más de 750 millones de euros al año a nivel global y más de 3 millones en España.

Las grandes tecnológicas pedirán a Hacienda no pagar la tasa Google durante el primer trimestre de 2021, y maniobran a menos de un mes de que entre en vigor

Hacienda cuenta con recaudar 950 millones de euros en 2021 con este impuesto, que según las patronales tecnológicas podría impactar en el bolsillo del consumidor español en más de 665 millones por la actualización de las tarifas de los servicios. Las asociaciones empresariales ya están pidiendo retrasar el pago mientras preparan sus estructuras para contabilizar si generan ingresos suficientes en España como para estar obligados a abonar el tributo.

Por el momento, solo España y Francia, que tiene lo que se conoce como tasa GAFA desde 2019, pero aún no se ha aplicado, tienen normativas similares, mientras la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) no ha logrado alcanzar un acuerdo para generar un gravamen común en más de 135 países, un debate aplazado hasta mediados de 2021.

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