He dejado mi trabajo en Twitter antes de que Elon Musk se convierta en mi jefe: por qué creo que será un problema para la red social

Elon Musk, CEO y fundador del fabricante automovilístico Tesla.
Elon Musk, CEO y fundador del fabricante automovilístico Tesla.

REUTERS/Adrees Latif

(Este artículo se basa en una conversación mantenida con un antiguo empleado de Twitter que se marchó de la empresa durante el proceso de compra liderado por Elon Musk. Aunque ha preferido mantenerse en el anonimato, su identidad es conocida por Business Insider. Su testimonio solo ha sido editado por motivos de extensión y claridad)

Trabajé en Twitter desde principios de 2021 hasta principios de este año en el equipo de moderación de contenidos. Este cambió de la noche al día después de que la empresa anunciara por primera vez la oferta de Elon Musk para comprar la empresa por 44.000 millones de dólares en abril.

Parecía que todo se había detenido. La empresa dejó de cubrir vacantes y limitó las contrataciones, lo que añadió una gran presión a los equipos. Hubo gente que se marchó tras el movimiento de Musk por el ambiente que se creó. Fue muy estresante.

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Muchos ejecutivos de Twitter dijeron entonces que los cambios no se debían solo a Musk y que la empresa ya tenía problemas financieros antes. Esta puede ser la razón por la que se aceptó finalmente el acuerdo.

Incluso se pudieron ver retrocesos en la clase de beneficios relacionados con las condiciones laborales con que las grandes empresas tecnológicas atraen talento. 

La comida dejó de ser tan buena como antes o, como poco, no había ya una gama tan amplia de alimentos como antaño. Se trató de una degradación muy extraña. Creo que eliminar aquellas ventajas fue un intento de filtrar a la gente que pensaban que para muchos era ya hora de irse.

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Todo esto afectó a los patrones de trabajo de muchos equipos. A la gente del mío le preocupaba tener que demostrar todo el tiempo que su trabajo era valioso para salvar su empleo. Nuestro gerente nos dijo entonces que ese desgaste era precisamente lo que buscaba la empresa. 

[Nota del editor: Twitter ha preferido no hacer comentarios a Business Insider].

Muchos tuvieron problemas de salud mental durante este tiempo. No fue solo una cuestión de que trabajar para Twitter fuese difícil o que, como ocurre en todas las grandes empresas tecnológicas, hubiese que hacerlo en un entorno de alta presión. Es que simplemente resultaba muy desagradable abordar la carga de trabajo que había que abordar en unas circunstancias tan inciertas.

La empresa canceló rápidamente proyectos y racionalizó todo. Hubo que empezar a cuantificar el impacto del trabajo muy claramente. Incluso entre los que apoyaban que Musk se hiciera cargo de la empresa el efecto que tuvo todo aquello se hizo pronto evidente.

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No hubo un gran cambio en lo referido a las políticas de la empresa en previsión de que Elon Musk se haría cargo de ello. Muchos en Twitter todavía está a favor de la moderación de contenidos, justo aquello a lo que Musk se opone.

Por tanto, existe la preocupación de que la moderación de contenidos pueda desaparecer muy pronto. 

Eso genera una incertidumbre que tampoco resulta motivadora. La gente necesita saber que su trabajo seguirá teniendo sentido pasado cierto tiempo, y que pese sobre uno un gran signo de interrogación no ayuda en nada.

Me fui a mitad de camino de la adquisición, meses después de que Musk anunciara que quería hacerse cargo

La adquisición parecía inevitable, y no confiaba en Parag como líder ni en las decisiones que estaba tomando. El hecho de que fuera la figura más importante de la junta directiva en este proceso no me daba la sensación de que hubiera un futuro.

Me uní a Twitter para aprender y mejorar sus procesos para manejar la información engañosa y la moderación, y sentí que eso no sería una prioridad bajo la dirección de Musk.

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Leí lo que fue diciendo a sus amigos durante el pasado fin de semana. Parece que habrá cambios muy rápidos que son fundamentales para la empresa. Creo que quiere comprar el nombre de Twitter y luego destriparlo completamente y cambiarlo.

También está el ángulo político de todo esto. Si su postura va a ser la protección de la libertad de expresión y eso significa que no se puede moderar nada o que nadie va a ser bloqueado, entonces parece que al menos durante un tiempo irá a la contra de muchos de los proyectos de ley de seguridad y moderación online que están surgiendo en todo el mundo.

Estuve hablando con algunos antiguos colegas y creen que el acuerdo seguirá adelante

Siempre pensé que lo culminaría. Es bastante curioso: me alegré de que tratara de echarse atrás, pero me pareció algo inevitable que la junta directiva lo empujara a respetar el trato. 

Presionaron desde el principio para que lo hiciera. Elon Musk puede intentar comprar todas las empresas que quiera o retirarse de todos los acuerdos que pueda, pero al final fue la junta directiva quien permitió que todo esto saliera adelante. Esto tampoco resultaba nada alentador.

Hablando con algunos excompañeros, la sensación general es que nadie se siente seguro en su trabajo. Por otra parte, no entiendo cómo va a funcionar ahora la empresa. Parece que habrá un loco intento de reestructurar algunos departamentos para darle a Twitter un lavado de cara. A mí me parece el momento perfecto para intentar salir o prepararse para todo lo que va a ocurrir.

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