He hecho prácticas en JP Morgan y Microsoft como ingeniera de software: este es mi secreto para conseguir ofertas

Este artículo está basado en una entrevista con Ume Habiba, una estudiante universitaria de 22 años de la Universidad de Maryland. La conversación se ha editado por motivos de extensión y claridad.

Conseguí prácticas de ingeniería de software en JP Morgan, Cisco Meraki, Estée Lauder y Microsoft, todas antes de mi último año de universidad. Pero no fueron los éxitos académicos ni las proezas técnicas los que me consiguieron esas prácticas.

Creé una marca auténtica que muestra a los reclutadores quién soy.

Empecé como voluntaria enseñando programación básica en el instituto

En el instituto, sabía que quería dedicarme a la tecnología, así que asistí a un campamento de desarrollo web de dos semanas en Kode With Klossy, un campamento de programación gratuito para chicas adolescentes. Me enamoré de su propósito de hacer la tecnología más inclusiva para las comunidades subrepresentadas y supe que quería trasladar esa labor a mi carrera. Al año siguiente me convertí en instructora ayudante, enseñando a cientos de mujeres jóvenes los conceptos básicos de HTML, CSS y JavaScript.

Al entrar en la Universidad de Maryland, seguí trabajando como voluntaria en Kode with Klossy mientras estudiaba Ciencias de la Información con una especialización en Informática.

Mis prácticas en JP Morgan llegaron de forma totalmente inesperada

Durante mi primer año, me centré en mis estudios, pero en el segundo decidí asistir a la feria virtual de empleo de mi universidad. No pensaba hacer prácticas ese verano, pero quería conocer el panorama laboral. Inesperadamente, congenié con un representante de JP Morgan que compartía mi pasión por la inclusión.

Aunque no era un reclutador, me dijo que encajaría muy bien en sus prácticas de verano de ingeniería de software y me pasó un enlace para que presentara mi candidatura. Y eso hice. Cada vez que terminaba un paso del proceso de solicitud, le enviaba un mensaje a través de LinkedIn y él abogaba por mí ante los responsables de contratación.

Tras un rápido proceso de entrevistas, gracias a mi conexión interna, recibí una oferta para trabajar en la oficina de Wilmington, Delaware, el verano siguiente a mi segundo año. No era necesariamente el destino ideal que esperaba, pero era una oportunidad que no podía dejar pasar.

Hice otras prácticas en Estée Lauder, en el departamento de ingeniería de software, gracias a Kode With Klossy. Pasé la primera mitad del verano en JP Morgan y la segunda en Estée Lauder, con solo una semana de caótico solapamiento entre ambas.

Empecé a construir mi marca en LinkedIn

Ese verano estaba haciendo muchas cosas, así que compartí mis actividades de voluntariado, prácticas y actualizaciones profesionales en LinkedIn. Vi la plataforma como un espacio de desarrollo profesional infrautilizado y utilicé su algoritmo de reacción en cadena para llamar la atención como una fuerza en el campo de la tecnología y la educación y la formación.

Publicaba tres veces a la semana, incluyendo los logros de las prácticas, las visitas a los campamentos de Kode With Klossy y los puntos clave de la serie de conferencias de cada semana de Kode With Klossy. Me centré menos en hacer publicaciones impactantes o bonitas y más en mantener a mi red al día de mis logros.

A medida que más gente llegaba a mi perfil, quería que mi marca fuera inconfundible. Añadí 'DE&I' al titular de mi carrera, me hice una foto profesional para mi perfil y escribí una extensa biografía que contaba quién era y qué iniciativas me interesaban. Me asustaba que mi compromiso con LinkedIn diera vergüenza ajena, pero la recompensa casi inmediata hizo que mereciera la pena.

Diferencias entre un contrato de prácticas y un contrato de formación

LinkedIn me consiguió mis siguientes prácticas

A las pocas semanas de crear mi perfil en LinkedIn, reclutadores de empresas notables como Oracle, HubSpot y Cisco Meraki comenzaron a llenar mi bandeja de entrada con ofertas de trabajo. Me puse en contacto con todos los reclutadores, independientemente de mi interés en trabajar con ellos, para establecer contactos en el sector.

Un reclutador de Cisco Meraki me pidió que solicitara un puesto de ingeniero de software a tiempo completo. Les dije que aún estaba en la universidad, pero que estaría interesada en cualquier oportunidad de prácticas. Al cabo de un mes, conseguí unas prácticas para el verano siguiente a mi tercer año de carrera.

Seguí publicando en LinkedIn durante ese año, aceptando más entrevistas con reclutadores y ampliando mi red de contactos.

Adapté mi currículum a la IA

Me presenté cuatro veces al programa de prácticas de Microsoft antes de conseguirlo este verano. Estoy segura de que mi presencia en LinkedIn y mi creciente número de experiencias profesionales favorecieron mis posibilidades. Aun así, no creo que hubiera conseguido el trabajo sin cambiar drásticamente mi currículum.

En la actualidad, las empresas analizan los currículums con programas de inteligencia artificial antes de llegar a manos de un reclutador, así que optimicé mi currículum para la IA eliminando los colores y reduciéndolo a una página.

También eliminé la sección 'Acerca de mí' y solo incluía mi nota media académica si me lo pedían. Utilicé el espacio sobrante para añadir más datos cuantitativos sobre mi impacto tangible en una empresa determinada. En mi experiencia, las cifras siempre han resultado más atractivas para los responsables de contratación que una gran cantidad de texto.

Y lo que es más importante, hice con mi currículum exactamente lo mismo que con mi LinkedIn: plasmé una marca y conté una historia. Mi currículum no es solo un resumen de mis logros más destacados: muestra experiencias significativas que representan mi misión de inclusión en el sector tecnológico.

Utilicé GitHub para preparar mi entrevista con Microsoft

No supe nada de Microsoft durante meses después de solicitar las prácticas, hasta que me encontré con un correo electrónico inesperado en el que me decían que había pasado a la ronda final de entrevistas. Inmediatamente, me mostré escéptica sobre su legitimidad, ya que ni siquiera había realizado una selección telefónica o una evaluación en línea. Después de hacer lo que haría cualquier persona normal —consultar Reddit en busca de consejo—, acepté vacilante una entrevista programada para unas semanas más tarde.

Me dijeron que me preparara para dos entrevistas de 45 minutos, una de ellas conductual y la otra una prueba de codificación. A mucha gente le gusta usar LeetCode para prepararse, pero yo utilicé el repositorio de GitHub, que tiene todos los ejercicios específicos de Microsoft desglosados en vídeos explicativos. Prefiero tener un desglose paso a paso de cómo abordó un problema alguien en concreto.

También me aseguré de ir a la entrevista sabiendo exactamente lo que quería. Les hablé con confianza de mi pasión por la I+D+i y pedí trabajar en ingeniería de back-end. De hecho, les dije que si solo tenían una oferta para el front-end, que no me contrataran. A la semana siguiente, me hicieron una oferta de prácticas.

Mi marca es mi mayor fortaleza

Todos mis éxitos se deben a mi compromiso con mi marca. Todo, desde mi perfil de LinkedIn hasta mi currículum, cuentan una historia sobre mi carrera y mis aspiraciones personales. Incluso en mi entrevista con Microsoft, mi seguridad en mí misma y en mis aspiraciones personales brillaron y me convirtieron en una candidata única.

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Etiquetas: Consejos, Microsoft, Nuevo empleo