La otra cara del millonario acuerdo de Hertz con Tesla: tendrá que esperar para recibir los 100.000 vehículos que he encargado a la empresa de Elon Musk

Hace una semana, el millonario acuerdo entre la empresa de alquiler de vehículos Hertz para comprar 100.000 Model 3 a Tesla generó un impacto inmediato: la compañía superó el billón de dólares de capitalización bursátil por primera vez en su historia y la fortuna de Elon Musk se elevó en 36.000 millones de dólares (31.000 millones de euros).

Entre el impacto del acuerdo, tasado en 4.200 millones de dólares (3.620 millones de euros), que contaba además con un padrino de excepción como el 7 veces campeón de la Súper Bowl de fútbol americano Tom Brady, y un informe favorable a Tesla por parte del servicio de análisis del banco Lehman Brothers, las acciones de la marca californiana subieron como la espuma.

Sin embargo, poco se habló entonces de la cara B del acuerdo: las dificultades que la crisis de semiconductores y los problemas de la cadena de suministro estaban generando a todos los fabricantes de automóviles, incluido Tesla, que hasta ahora los ha sorteado con habilidad, lo que le permitió entregar 241.391 vehículos entre julio y septiembre.

Esta es la única condición que tiene que cumplirse para que Tesla se dispare un 50% en bolsa hasta los 1,5 billones de dólares de capitalización bursátil, según un analista de Wedbush

El comunicado de Hertz indicaba que recibirían esos 100.000 vehículos a finales de 2022, pero su texto no incluía ninguna aportación por parte de algún portavoz de Tesla.

Esta respuesta llegó, por parte de Elon Musk y en su medio favorito: Twitter. "Me gustaría enfatizar que no se ha firmado ningún contrato hasta el momento", tuiteó el martes 2. 

"Tesla tiene mucha más demanda que producción, así que venderemos los coches a Hertz al mismo margen que a los consumidores", añadió Musk.

Fuentes del fabricante de vehículos californiano aseguran al Wall Street Journal la rapidez con la que Hertz comunicó el acuerdo y calculan que, como máximo, esperaban entregarle 10.000 vehículos al año. Esto supondría cumplir con el contrato entero no en 2022, sino en 2032.

Dos días después del primer anuncio, Hertz anunció que de los 100.000 Teslas, 50.000 estarían disponibles para conductores de Uber. En ese segundo comunicado hablaba de "una orden inicial de 100.000 Teslas para finales de 2022".

Fuentes cercanas a la negociación entre Hertz y Tesla aseguran al WSJque el fundador de la compañía no estaba directamente implicado en las negociaciones, y desde la compañía admiten que después del anuncio de Hertz se produjo cierta preocupación por si el mercado podría ver como una señal de que había incrementado su capacidad de producción.

Mientras tanto, los compradores particulares de Tesla siguen afrontando esperas de más de 6 meses para recibir sus vehículos. Según el rotativo estadounidense, actualmente los nuevos encargos del Model 3 tienen una fecha esperada de entrega para junio.