La científica que ha desarrollado la vacuna de AstraZeneca es madre de trillizos y sus hijos han participado en el ensayo

Sarah Gilbert (top left), chief investigator of the Oxford coronavirus vaccine trial, speaks with Prince William (bottom right).
Sarah Gilbert (top left), chief investigator of the Oxford coronavirus vaccine trial, speaks with Prince William (bottom right).AstraZeneca/Reuters
  • AstraZeneca y la Universidad de Oxford anunciaron el lunes que su vacuna COVID-19  tiene una eficacia media de un 70%.
  • La creadora de la vacuna, Sarah Gilbert, tenía fe en su eficacia desde el principio: sus trillizos participaron en el ensayo del Reino Unido.
  • "Esta vacuna debería hacer lo que siempre quisimos que hiciera", ha asegurado Gilbert. "Queríamos una vacuna para el mundo, no solo para los países de altos ingresos".
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La compañía farmacéutica AstraZeneca acaba de anunciar que la vacuna contra el coronavirus de la compañía, desarrollada en asociación con la Universidad de Oxford, tiene una eficacia media del 70%, según los datos preliminares de las últimas etapas de los ensayos clínicos con más de 20.000 voluntarios en el Reino Unido y Brasil.

Los resultados variaron dependiendo de la dosis. 

Cerca de 9.000 voluntarios recibieron dos dosis completas con al menos un mes de diferencia, un régimen que solo fue un 62% efectivo. Pero alrededor de 2.700 voluntarios recibieron media dosis para la primera, seguida de una dosis completa para la segunda. Bajo ese régimen, la efectividad de la vacuna se elevó al 90%. 

El ensayo en el Reino Unido incluyó tres participantes notables: los trillizos de la creadora de la vacuna, Sarah Gilbert.

Como jóvenes adultos de 20 años, los hijos de Gilbert encajan en el perfil típico de un voluntario del ensayo de la vacuna. Para participar en los ensayos de AstraZeneca, los voluntarios deben tener al menos 18 años. También deben estar sanos o tener una condición médica subyacente estable.

Gilbert le dijo a Bloombergen julio que no le preocupaba que sus hijos se unieran al ensayo.

"No lo discutimos realmente, ya que no estaba mucho en casa en ese momento", dijo, y añadió: "Conocemos el perfil de efectos adversos y sabemos la dosis a usar porque hemos hecho esto muchas veces antes".

Las ventajas de la vacuna de AstraZeneca: cuenta con datos preliminares sobre la eficacia en asintomáticos y está más preparada para los desafíos de la distribución

El ascenso de Gilbert a la relevancia

Gilbert es una veterana investigadora de vacunas. Se incorporó a la Universidad de Oxford como investigadora postdoctoral senior en 1994. Cinco años más tarde, se convirtió en profesora universitaria, solo un año después de dar a luz a trillizos prematuros.

Su marido, el científico Rob Blundell, se convirtió en el principal cuidador de la familia. Gilbert, mientras tanto, destacó en Oxford, donde recibió fondos para dirigir su propio grupo de investigación sobre el desarrollo de la vacuna contra la gripe en 2007.

"Los honorarios de la guardería habrían costado más que todos mis ingresos como científica postdoctoral, por lo que mi compañero ha tenido que sacrificar su propia carrera para cuidar de nuestros hijos", escribe Gilbert en su biografía universitaria.

Sus tres hijos estudian ahora bioquímica. Las hijas de Gilbert, Caitlin y Susannah, asisten a Oxford, mientras que su hijo, Freddie, va a la Universidad de Bath.

Oxford University coronavirus vaccine test
STEVE PARSONS/POOL/AFP via Getty Images

Desde el comienzo de la pandemia, Gilbert ha surgido como una voz científica de confianza y como la cara pública del ensayo de AstraZeneca. Ha sido perfilada varias veces este año, entrevistada en televisión, e incluso nombrada una de las 100 mujeres inspiradoras e influyentes del 2020 de la BBC

"Yo, por mi parte, confío al 100% en la señora que inyectó a sus propios hijos", escribe en Twitter Merve Emre, profesora adjunta de inglés en Oxford. 

Los datos de Pfizer y Moderna no ofrecen información sobre su eficacia en los asintomáticos, un grupo clave para frenar la pandemia

Una rápida búsqueda para desarrollar una vacuna

Antes de que el nuevo coronavirus, SARS-CoV-2, existiera, Gilbert estaba estudiando un coronavirus humano similar: MERS-CoV. El virus causa el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), una enfermedad que ha infectado a solo 2.500 personas en todo el mundo, pero que es mucho más mortal que el COVID-19. 

La vacuna MERS de Gilbert avanzó a una fase de prueba clínica en diciembre de 2019, justo cuando el nuevo coronavirus comenzaba a propagarse en China. 

Su vacuna COVID-19 ahora utiliza una tecnología similar: Ambas inyecciones se basan en un virus chimpancé llamado ChAdOx1 para desencadenar una respuesta inmunológica en los humanos.

Este tipo de inyección, conocida como vacuna de vector viral, es relativamente fácil de desarrollar en comparación con las vacunas tradicionales. El equipo de Gilbert diseñó su vacuna a los pocos días de tener en sus manos el genoma del SARS-CoV-2. Para abril, Gilbert predijo que su vacuna podría estar disponible en seis meses.

"Tengo un alto grado de confianza en esta vacuna porque es una tecnología que hemos usado antes", dijo a la BBC.

Durante un tiempo, parecía que AstraZeneca alcanzaría ese hito, pero la compañía parilizó brevemente sus ensayos en septiembre después de una "enfermedad inexplicable" en un participante del Reino Unido.

Un voluntario recibe una vacuna del coronavirus en Reino Unido.
Un voluntario recibe una vacuna del coronavirus en Reino Unido.Kirsty O'Connor/PA via Getty Images

El ensayo en el Reino Unido se reanudó menos de una semana después, después de que los reguladores locales determinaron que era seguro hacerlo. En un comunicado de prensa, Oxford dijo que "no se han identificado eventos de seguridad graves relacionados con la vacuna".

Sin embargo, el ensayo de la compañía en Estados Unidos no recibió el visto bueno de la Administración de Alimentos y Medicamentos para reanudarse hasta octubre. Eso significa que sus resultados se han retrasado ligeramente, aunque los expertos creen que aún podrían ser lanzados este invierno.

La carrera por la vacuna del coronavirus está lejos de tener un ganador claro pese a los primeros resultados: estas son las opciones de AstraZeneca y Johnson & Johnson

El ensayo estadounidense está probando dos dosis completas de la vacuna, lo que sugiere que los resultados podrían ser menos impresionantes que los publicados a principios de este mes por Pfizer y Moderna. La vacuna de Pfizer demostró un 95% de efectividad en la prevención de COVID-19, mientras que la de Moderna tendría un 94.5% de efectividad. Pero, a diferencia de estas vacunas, las de AstraZeneca no necesitan ser almacenadas a temperaturas bajo cero, lo que facilita su distribución en todo el mundo.

El lunes, un portavoz de AstraZeneca dijo a STAT que la compañía está considerando añadir el régimen de media dosis a sus ensayos clínicos en curso.

"Esta vacuna debería hacer lo que siempre quisimos que hiciera", ha asegurado Gilbert. "Queríamos una vacuna para el mundo, no solo para los países de altos ingresos".

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