Esto es lo que provoca el hipo en los bebés y así puedes evitarlo

Son frágiles. Dependientes al máximo. Cada sonido, movimiento o gesto extraño dispara una oleada de lucubraciones en madres y padres. Esto sucede, por ejemplo, cuando los bebés tienen hipo por primera vez. 

Con el paso de los días se comprueba que es algo, relativamente, habitual. Pero... ¿Por qué los pequeños hipan tanto?, y, sobre todo, cómo se puede favorecer su desaparición. 

En primer lugar, hay que dejar claro un aspecto en el que coinciden todas las publicaciones especializadas que se han consultado: el hipo es algo habitual en los bebés. El 80% de los bebés lo padecen durante los primeros meses de vida, asegura Antonio M. Romero (del Hospital Vithas Medimar Internacional –Alicante–) en serPadres. 

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No debe causar preocupación, de hecho, según la Asociación Española de Atención Primaria, es un fenómeno natural “que se produce con frecuencia y no conlleva ningún riesgo para el bebé. Además, no les causa dolor ni molestia”. 

Es más, como señalan en Pediatría Integral, la web de Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria, mediante ultrasonidos se ha demostrado que ya el feto puede tener hipo a partir de las 8 semanas desde el comienzo de la gestación. Se ha comprobado, concretan, que “el feto hipa durante el último trimestre de la gestación, a razón de 6 veces por minuto”. 

¿Por qué tienen hipo los bebés?

En otra publicación especializada, como Tua Saúde, la pediatra Beatriz Beltrame explica que el hipo se produce debido a las contracciones del diafragma y de los músculos respiratorios, “ya que estos todavía están muy inmaduros” y se estimulan e irritan con mucha facilidad. 

En el caso del hipo de los bebés, los expertos de los artículos antedichos dejan claro que los motivos pueden ser desconocidos, aunque todos y todas coinciden en señalar algunas circunstancias como posibles causantes:

• Por tragar aire durante el momento de la alimentación. 
• Por haber comido mucho y tener el estómago demasiado lleno. 
• Por comer demasiado rápido. 
• Si ha regurgitado. 
• Si se le somete a un cambio de temperatura brusco.

¿Cómo prevenir o evitar el hipo en los bebés?

Se pueden tomar medidas para tratar de hacer desaparecer el hipo en el recién nacido, sin embargo (en la línea de demostrar que es algo absolutamente normal), el pediatra asociado del Hospital San Joan de Déu de Barcelona Santiago García-Tornel, apunta en este artículo de Eroski Consumer, que lo mejor es esperar a que se le pase, algo que suele suceder a los 10 o 15 minutos. 

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Si, a pesar de todo, se quiere intentar algo, esto es lo que se puede hacer para quitar el hipo del bebé:

• No esperar a que tenga mucha hambre para darle de comer, ya que esto le provocará ansiedad y, por ende, que trague más aire en el momento de amamantarlo o de darle el biberón. 
• Haciéndole expulsar los gases. En un artículo de Medical News Today (MNT) se hace referencia a que la Academia Estadounidense de Pediatría recomienda hacer eructar al bebé cada vez que consume entre 56 y 85 gramos (de 2 a 3 onzas).
• Evitar que coma demasiado rápido.
• Darle de comer: si es la hora de alimentarlo, es bueno hacerlo, puesto que la succión coadyuvará a que se apoquen las contracciones del diafragma. 
• Intentar que el bebé no tenga la cabeza demasiado baja a la hora de amamantarlo.

¿Cuándo ir al pediatra?

¿En qué casos el hipo puede llegar a ser algo preocupante? En MNT, la pediatra Karen Gill destaca que, si el hipo ocurre con frecuencia, y, sobre todo, causa angustia en el bebé, es posible que se deba a una afección médica subyacente, como reflujo gastroesofágico (RGE). 

Algo que sucede, detalla, cuando los alimentos parcialmente digeridos y el ácido del estómago regresan a través del esófago. “A media que estos líquidos pasan por el diafragma, pueden irritarlo y activas los espasmos”, indica. 

En este caso, no estaría de más consultar con el pediatra. Algunos de los síntomas de que el bebé tiene RGE son:

• Llora con mucha frecuencia, especialmente al alimentarlo.
• Arquea su espalda excesivamente durante o después de la alimentación.
• Escupe con mucha frecuencia. 

En SerPadres dan algún motivo más para acudir al especialista:

• El hipo dura más de 3 horas. 
• El bebé rechaza el alimento.
• Provoca pérdida de peso. 
• Provoca vómitos frecuentes. 

Por añadidura, en Tua Saúde recomiendan escuchar la opinión del que sabe si el hipo es muy intenso o frecuente o si ocurre después de los 12 meses de manera habitual.