Por qué los hoteles más caros no siempre son los mejores, según un viajero profesional que se ha alojado en más de 3.000

• Los hoteles más caros no siempre son los mejores, según un viajero profesional. 
• El nómada digital Phiippe Kjellgren se ha alojado en más de 3.000 hoteles y contó a Insider que cree que los hoteles aumentan sus precios más de lo que deberían. 
• Su situación favorita es cuando los hoteles que ya son caros cobran precios exorbitantes pot todo lo demás como la comida o las actividades. 
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Los hoteles en los que nos quedamos mientras estamos de viaje son una parte fundamental de las vacaciones que estamos disfrutando en el país que visitamos.

Después de todo, ¿no nos encantan los desayunos de buffet libre y no tener que limpiarlo tú?

Sin embargo, aunque la tendencia es creer que cuanto más gastas mejor experiencia puedes tener, según el viajero profesional Philippe Kjellgren, la respuesta es "un no rotundo".

"Creo que los hoteles son demasiado caros en función del tipo de turistas que tienen", afirma Kjellgren que ha estado en más de 3.000 hoteles mientras los examinaba para su aplicación PK's List, a Insider.

Cree que los hoteles que se dirigen a los turistas americanos aumentan sus precios. "Diría que que los mercados que atienden a muchos turistas americanos elevan sus precios".

Hay varias zonas de Italia que "son muchos más caras" de lo que deberían ser. "Creo que el resultado de tener tantos turistas americanos que están dispuestos a pagar el precio que sea", explica Kjellgren. Así que tengo claro que el precio no forma parte de la experiencia. 

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"Si miras, muchas veces puedes encontrar un hotel más barato que ofrece una exeriencia mucho mejor que el más caro y a veces no tienen buena relación calidad-precio". 

A pesar de esto, Kjellgren piensa que hay muchos hoteles muy caros que sí que ofrecen una buena relación calidad-precio como por ejemplo el complejo privado de Laucala en Fiji, donde una noche empieza en torno a los 4.800 dólares. 

"Parece una locura, es mucho dinero, pero comparado con lo que obtienes en sitios como las Maldivas o Seychelles por el mismo precio, obtienes mucho más porque todo está incluido como buenos vinos, spa, deportes acuáticos o un submarino", apunta Kjellgren. 

Una de las cosas que menos le gusta cuando visita un hotel que ya es caro es que luego cada complemento es caro. "Creo que es irritante cuando vas a un hotel y cobran de más por ciertas cosas", señala Kjellgren.

"Ya estás pagando digamos 2.000 dólares por noche. No es necesario pagar 50 dólares más por tomar tacos en la playa. No tiene buena relación calidad-precio. 

"Un zumo de naranja no debería costar 25 dólares si pagas 2.000 por pasar la noche. La razón por la que pagas ese dinero es que posiblemente hayan invertido entre 2 o 3 millones por habitación, por lo que me parece razonable", apunta. "Lo que no entiendo es porque es necesario cobrar por el zumo de naranja ese precio. Es algo que realmente odio", sentencia Kjellgren.