Iberdrola rebaja sus expectativas de crecimiento para 2020 y augura que se duplicarán los impagos en el tercer trimestre

Ignacio Sánchez Galán, presidente y consejero delegado de Iberdrola
Ignacio Sánchez Galán, presidente y consejero delegado de Iberdrola
  • Iberdrola corrige sus guías para cierre de año y estima un crecimiento a dígito simple medio alto, frente a un nivel alto que estimó en la presentación de resultados del primer trimestre el pasado abril.
  •  A la falta de certeza sobre si habrá un rebrote de la COVID-19 en otoño, se juntan las negociaciones con los reguladores.
  • En los resultados de cierre de año tendrán un papel clave los niveles de morosidad de los clientes y pronostica un mayor impacto de estos impagos en el tercer trimestre.
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Iberdrola rebaja sus expectativas de crecimiento para el 2020 por la crisis del coronavirus. El grupo energético corrige sus guías para cierre de año y estima un crecimiento a dígito simple medio alto, frente a un nivel alto que estimó en la presentación de resultados del primer trimestre el pasado abril. 

En una conferencia con analistas, tras la presentación de las cuentas del primer semestre, el presidente de la compañía Ignacio Sánchez Galán apuntó que hace tres meses “no éramos conscientes, no sabíamos que vendrían medidas de confinamiento. Sólo teníamos una comprensión parcial de la situación”. Tras cifrar el impacto de la pandemia en 153 millones de euros sobre el beneficio neto, Iberdrola augura ahora que la evolución del resto del año dependerá de múltiples factores.

El ejecutivo reconoce que hay signos positivos de estabilización de la demanda y los precios de la energía, aunque “hay demasiada incertidumbre”. A la falta de certeza sobre si habrá un rebrote del COVID-19 en otoño, se juntan las negociaciones con los reguladores. 
Se refiere el ejecutivo a las medidas en las que están trabajando para mitigar el impacto del coronavirus. “Si tenemos éxito en la negociación con los reguladores para registrar los gastos de este tipo”.

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En los resultados de cierre de año tendrán un papel clave los niveles de morosidad de los clientes. Y es que Iberdrola pronostica un mayor impacto de estos impagos en el tercer trimestre. El grupo estima que para finales de año se duplicarán los niveles de morosidad respecto a la cifra actual. 

Galán estima que el grupo cerrará el año con una deuda de 39.000 millones, que añadiría 550 millones más si se cierra la OPA sobre la australiana Infigen. En cualquier caso, el grupo mantiene su objetivo de invertir 10.000 millones de euros este ejercicio, “en el segundo trimestre hemos logrado invertir más que en el primer trimestre”, señala el ejecutivo. 

Galán ha aplaudido también al acuerdo alcanzado por la Unión Europea esta semana que considera es la “consolidación del proyecto político europeo”. El ejecutivo ha subrayado que es la primera vez que se emite deuda a escala europea de esta magnitud. "Supone la consolidación del Green Deal como proyecto de crecimiento económico y de recuperación económica de la Unión Europea. Los que llevamos 20 años luchando por la transición energética, pues realmente es una magnífica noticia. Y en tercer lugar porque, de cara a nuestro país, es muy positivo para España. Aparte de la aportación de los 140.000 millones de euros que van a venir, creo que nos va a ayudar  a hacer reformas que mejoren o cambien nuestro modelo productivo y de gestión para ser más competitivos y más sostenibles. Creo por tanto que es muy positivo a todos los niveles".

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El cierre progresivo de las nucleares en favor de las renovables tendrá un efecto sobre los precios de la electricidad. “Tenemos que hacer algo para garantizar el servicio de préstamos y absorber los costes fijos que plantea el sistema”, opina Galán. “Hay tecnologías que aportan seguridad al sistema, como la nuclear y el ciclo combinado que no están en el estado de salud adecuado”.

En este sentido Galán apela a utilizar las infraestructuras de las nucleares para las renovables y evitar construir una nueva infraestructura de transmisión. “Tenemos que ser conscientes de que se van a cerrar las nucleares que representan entre un 50% y un 60% de la producción actual”, introdujo Galán. “Podemos hibridar las plantas actuales y utilizar estas instalaciones para las renovables”.

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