Esta increíble mano robótica puede sostener un huevo sin romperlo, verter bebidas y estrujar latas de cerveza

Los robots con los que cuenta la humanidad están cada vez más próximos a las funcionalidades humanas. Tanto es así que un grupo de científicos de la Universidad surcoreana de Ajou acaban de diseñar una mano robótica con un amplio rango de movilidad, capaz de sostener objetos frágiles como los huevos, estrujar latas y manejar herramientas como pinzas y tijeras. 

El artículo que la describe, publicado en la revista Nature, explica todas las virtudes de esta nueva máquina, que pesa poco más de un kilo, mide 22 centímetros de largo y destaca por integrar a la vez delicadeza, fuerza y flexibilidad.

Elaborada de acero y aluminio, cada dedo recibe el impulso de 3 pequeños motores que encajan dentro de la palma y mueven partes metálicas que actúan como tendones alrededor de un total de 20 articulaciones, según explicaNew Sciencist.

De esta manera, los dedos pueden inclinarse hacia los lados, flexionarse hacia delante y hacia atrás y doblarse, otorgando a la mano sintética de movimientos comparable al de una mano humana. Otra de sus grandes ventajas es que puede unirse fácilmente a los brazos robóticos comerciales. 

Sostener un huevo, levantar mancuernas o manejar pinzas

Dirigido por Uikyum Kim, el equipo comprobó la capacidad de la compleja mano robótica para sostener un huevo sin romperlo, verter bebidas o estrujar latas de aluminio. 

Al estudiar su capacidad para manipular herramientas, los resultados también fueron positivos. Pudo sostener tijeras y cortar papel, e incluso manipular pinzas para levantar y colocar un microchip en una placa de circuito.

"Tiene al mismo tiempo un agarre fuerte y delicadeza", señala el principal autor del estudio. 

En cuanto a su durabilidad, también cumple con creces. En un experimento programando un dedo para presionar un sensor durante media hora, la fuerza ejercida apenas se debilitó durante ese tiempo.

La mano robótica también "se pone cachas": pudo levantar mancuernas de 18 kilos sin romperse. Y en otra prueba, programaron uno de los dedos del robot para que se doblara y flexionara repetidamente para presionar un sensor cada segundo durante 11 minutos. Lo logró sin ralentizarse ni perder fuerza.

Hay varios campos en los que este avance resultará útil: la mano robótica, en su versión más ligera, podría formar parte de prótesis avanzadas, o en su versión más robusta, integrarse en robots inteligentes capaces de detectar y manipular objetos.

Lo que precisa para ser todavía más sofisticado y acelerar su futura implantación es dotarse de la suavidad de una mano humana. Para ello, el equipo espera desarrollar una piel artificial flexible.