La industria española ha destruido ya 5.000 empleos en 16 empresas del sector por el impacto del coronavirus

La destrucción de empleo vinculada a la crisis del coronavirus en España no solo está afectando a la hostelería, el sector turístico o el comercio. Desde el inicio de la pandemia, en torno a 16 empresas del sector industrial han anunciado la destrucción de en torno a 5.000 empleos con el fin de reducir costes ante la caída de la demanda y de la carga de trabajo.

Así, tras haber recurrido a expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) tras la declaración del estado de alarma en el mes de marzo debido al parón en la producción durante las primeras semanas del confinamiento, varias compañías están optando por aplicar despidos colectivos para aliviar su situación financiera, que en algunos casos ya estaban en una situación comprometida antes de la pandemia, segúnCinco Días.

Así, multinacionales como Alcoa, Nissan o Airbus y empresas como Bosch, CIE Automotive, Alestis, Aernnova o ITP Aero ya han anunciado expedientes de regulación de empleo (ERE) para realizar cientos de despidos colectivos, mientras que otras como Abengoa, Duro Felguera o Saint Gobain podrían tomar una decisión similar próximamente, poniendo en riesgo miles de puestos de trabajo.

En el caso de Alcoa, la compañía siderúrgica estadounidense ha presentado un ERE para 534 trabajadores de su planta de San Cibrao, en Lugo, mientras sigue negociando la venta de esta fábrica al grupo industrial británico Liberty House, que forma parte del conglomerado mundial GFG Alliance, que ya intentó hacerse en 2019 con las plantas de Avilés y San Cibrao, aunque su oferta fue rechazada.

No obstante, los problemas de Alcoa comenzaron antes de la pandemia, dado que ya en octubre de 2018 anunció su intención de cerrar las plantas de Avilés y A Coruña, en las que trabajaban cerca de 700 empleadospara los que se presentó un ERE en enero de 2019 y que provocaron una oleada de protestas ante las ayudas estatales recibidas por la compañía, vinculadas a conservar los empleos y evitar una deslocalización.

Una situación similar se sufre en Airbus, que anunció en febrero, justo antes de la pandemia, un ajuste de empleo de cara al final de 2021 para 2.362 trabajadores en toda Europa que se traduciría en 630 españoles despedidos. Estos despidos se debían a 3 años consecutivos de pedidos por debajo de las previsiones y al impacto de las sanciones de Estados Unidos a la compañía aeronáutica europea por los subsidios que ha recibido de Bruselas.

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Sin embargo, el impacto de la crisis del coronavirus, que ha provocado una caída del 40% en su producción de jets de los últimos meses, ha provocado que Airbus aumente la cifra de despidos previstos hasta 15.000 puestos de trabajo, de los que 900 corresponden a España y que se aplicarán antes del verano de 2021.

Además de estas 2 multinacionales, la destrucción de empleo en 2020 también se ha centrado en la industria de componentes de automoción, que prevé perder hasta un 10% de su empleo directo ante la caída de la demanda, lo que se traducirá en entre 15.000 y 20.000 despidos, según ha asegurado a Cinco Días la patronal del sector, Sernauto.

Así, Gestamp prepara ajustes de empleo para 43.000 empleados, de los que 6.000 son españoles, mientras que CIE Automotive, que cuenta con 24.000 trabajadores en sus fábricas de Bilbao, redujo su plantilla en 4.000 personas en la primera mitad del año y Bosch ha anunciado su intención de cerrar la planta de Castellet (Barcelona) y despedir a sus 300 empleados.

Mientras, la automovilística Nissan ya venía preparando el cierre de sus fábricas en España antes del coronavirus, pero no fue hasta finales de mayo que confirmó el cierre de sus plantas en Barcelona ubicadas en la Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca, en una decisión afecta a los empleos de 2.800 trabajadores, que recibieron la noticia tras 24 días de huelga indefinida.

Los cierres de Nissan, que afectan también a cerca de 25.000 empleos indirectos que dependen de las plantas, se justificaron por el colapso en la demanda y para ahorrar un 40% en la fabricación de nuevos modelos mediante un reparto de zonas geográficas con sus socios Renault y Mitsubishi, que implica que Nissan abandonará la UE para centrarse en China, Japón y Norteamérica.

En el sector aeronáutico, han sido varias las empresas que han anunciado despidos, como ITP Aero, que se deshará de 600 de sus 4.000 empleados, mientras que la filial de Rolls-Royce prevé despedir a 319 personas en España, Aernnova  a 650, Aciturri a 214, Alestis a 585 y Sener a 90, que se realizarán a través de ERE en varias de sus plantas.

En lo que respecta a la siderurgia, no solo Alcoa ha anunciado despidos. La compañía francesa Saint Gobain ha presentado un ERTE para 99 empleados para cerrar su alto horno en Tarragona, mientras que Tubacex prevé destruir 500 empleos, de los que 150 se centrarán en España y  Tubos Reunidos tiene pendiente definir el futuro de sus 1.350 trabajadores en ERTE, según Cinco Días.