Los jubilados toman las calles: "¿Tú crees que se puede vivir con 900 euros al mes?"

Los pensionistas han tomado esta mañana las calles de todo el país para protestar contra la raquítica subida de sus pensiones, estancada en el 0,25% en los últimos cinco años.

"Devolví la carta en cuanto me llegó", protesta Antonio, un jubilado que ha acudido a la manifestación de Madrid con su mujer. "Casi cuesta más el sobre que lo que nos suben. Si mi pensión es de 800 euros, calcula: son 2 euros de subida anual".

Todos los años, a finales de enero, los pensionistas reciben una carta del Gobierno indicándoles la subida de la pensión. Llevan cinco años con subidas del 0,25%, el mínimo establecido por la Seguridad Social tras la reforma del PP en 2013. La famosa carta incluye, además, palabras de "gratitud" por su "comprensión" durante "los años más difíciles de la crisis". Los jubilados las consideran irónicas.

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El resultado ha prendido la mecha: este año, además de organizarse para devolver las cartas en masa, han salido a la calle a reclamar una subida acorde al IPC. Las convocatorias de hoy, apoyadas por varias organizaciones de personas mayores y sindicatos, son las segundas en lo que va de 2018.

"La crisis ha servido de excusa para todo", lamentan dos mujeres durante la marcha madrileña, que ha sido multitudinaria pese a la lluvia. "Pero si no hay dinero es porque se lo han gastado todo ellos". 

El problema de las pensiones tiene varias aristas, que incluyen el creciente envejecimiento de la población (cada vez más gente se jubila y depende de una pensión), la precariedad del mercado laboral (y, en consecuencia, menores aportaciones a la Seguridad Social) y la hucha de las pensiones vaciándose. El debate va más allá del 0,25%. 

La "hucha de las pensiones" es el Fondo de Reserva creado en 1997 para ayudar a la Seguridad Social en caso de necesidad puntual. Sin embargo, desde 2012 se usa recurrentemente debido al desequilibrio en sus cuentas: los ingresos por cotizaciones ya no dan para pagar las pensiones.

La crisis se cargó muchos empleos y el empleo que se crea actualmente no es de calidad: es temporal, es precario y los sueldos son bajos, con lo que la Seguridad Social no recauda lo suficiente. Los jóvenes son uno de los grupos sociales más afectados por la precariedad laboral.

Así, sólo a comienzos de 2017 la Seguridad Social necesitó tirar de él y coger 3.586 millones para hacer frente a las pagas extras de ese mes.

El combo da lugar a un conflicto generacional que los poderes públicos aprovechan en su mensaje.

Así, una de las protestas más repetidas entre los pensionistas hoy eran las recientes declaraciones del gobernador del Banco de España, Luis María Linde, que insistió en que los pensionistas tienen casa, lo que supone "un efecto sobre la pensión real de jubilación muy importante, porque no es lo mismo pagar un de alquiler de 500 euros al mes que un gasto de comunidad de 1000 euros". 

"Encima dicen que tenemos casa, como si tuviéramos que estar agradecidos. Parece que quieren que nuestros hijos se enfaden y acaben con nosotros", apunta uno de los asistentes a la manifestación.

"¿Tú te crees que se puede vivir con 900 euros al mes?", añade otro. "Se lo daba a uno de ellos".

Los gritos contra los políticos - "Jódete, Rajoy, aunque llueva no me voy" o "Gobierno, ladrón, nos roba la pensión" - no han cesado durante toda la marcha: los jubilados insisten en que han sido "ellos" los que se lo han gastado durante años.

"No queremos volver a lo mismo", reconoce María José, una jubilada madrileña.

"Nuestras pensiones estaban garantizadas. Nosotros hemos ido avanzando, los jóvenes han estado protegidos y ahora no saben defenderse", continúa. "Los sindicatos habrán hecho muchas cosas mal, pero ahora nadie va al Comité de Empresa. Los empresarios se enfocan en las negociaciones individuales con cada empleado y eso no funciona".

Las organizaciones que han convocado las manifestaciones, entre las que se encuentran la Unión Democrática de Pensionista de España, los Mayores de Telefónica o la Federación Estatal de Jubilados y Pensionistas de CCOO, han firmado y leído un manifiesto por la defensa de las pensiones públicas y dignas que pide un "pacto de estado" para garantizarlas.

"Siendo conscientes y firmes defensores de que el sistema de Seguridad Social se articula sobre el principio de solidaridad más amplio entre generaciones y territorios, exigimos un trabajo digno y con derechos y unos salarios suficientes (...) que hagan posible el sostenimiento del sistema público de pensiones", firman. "Queremos defender no sólo nuestro presente, sinot ambién el futuro de nuestros hijos y nietos".

Con él, llaman a los pensionistas a convocar "cuantas manifestaciones sean necesarias" para alcanzar el objetivo.