Los ladrones quieren esta pieza de tu coche porque esconde un metal más valioso que el oro: pueden robarla por la noche mientras está aparcado

Que te roben la cartera, el teléfono móvil o la tarjeta de crédito es problema que te puede causar grandes inconvenientes.

Pero aunque la sustracción de estos enseres sigue siendo una importante molestia, los ladrones están empezando a llevar a cabo otro tipo de robos que no deben pasar desapercibidos.

Tu coche está en peligro, y no porque quieran quedárselo en su totalidad, sino por una pequeña pieza que quizás no conoces y que tiene un valor incalculable para los ladrones.

El objetivo de los delincuentes es hacerse con el catalizador de tu vehículo. Este componente, denominado también como convertidor catalítico, forma parte del sistema de escape del coche.

El catalizador sirve para modificar los gases que salen del tubo de escape y que así resulten menos contaminantes. Entonces, ¿por qué los ladrones están tan interesados en esta pieza?

La respuesta es sencilla: los convertidores catalíticos contienen metales que son muy codiciados en el mercado negro. Su recubrimiento de paladio, rodio y platino es una enorme tentación para los amigos de lo ajeno.

No hay más que conocer el valor de cada uno: el rodio equivale a 28.250 dólares por onza (24.300 euros), esto se traduce en 830 euros por cada gramo.

El segundo más caro es el paladio, que equivale a 2.925 dólares por cada onza (2.500 euros), es decir, 85 euros por el gramo.

Por último se encuentra el platino, con un valor de 1.232 dólares por onza (1.060 euros), o lo que es lo mismo, 36 euros el gramo.

Así roban el catalizador de tu coche

Según explica a La Vanguardia David Aguiar, Capitán de la Guardia Civil, la mayoría de coches que sufren estos robos se encuentran estacionados en la vía pública o en un garaje en horario nocturno.

"Los autores, una vez han localizado el vehículo, se deslizan por debajo de este y dependiendo de la altura del mismo, si es preciso, hacen uso de elevadores", detalla el Capitán sobre el proceso de robo.

"Mediante el uso de herramientas de corte ( como radiales pequeñas, sierras eléctricas, artefactos con cadenas y cuchillas de corte) separan la caja del convertidor catalítico del tubo de escape", relata.

La mayoría de ladrones pertenecen a bandas especializadas que poseen las herramientas adecuadas para realizar estos robos.

Los vehículos que están en peligro son sobre todo los que se fabricaron antes de 2010, ya que a partir de entonces las compañías automovilísticas encontraron otros métodos para reducir las emisiones que no precisan de estos metales.

Cuidado: hay un aumento de estos delitos

Los delincuentes han encontrado un verdadero chollo con la sustracción de los catalizadores, por lo que los robos están aumentando en España.

En Valencia, la Guardia Civil detectó una oleada de robos el pasado mes de septiembre. Se registraron hasta 28 delitos en diferentes localidades.

A comienzos de octubre, en la provincia de Cádiz también se declaró un aumento de robos de catalizadores.

Lo mismo ha ocurrido en Burgos, donde se han llegado a poner 8 denuncias a lo largo del mes de septiembre. 

Noticias similares se pueden encontrar en Galicia, Castilla-La Mancha o Cataluña. Se trata de un delito común en todo el territorio. 

El proceso siempre es el mismo: bandas de ladrones asaltan coches que están aparcados durante la noche en la vía pública o un garaje y se quedan con el catalizador. 

Coste que te va a suponer el robo

El vehículo puede funcionar perfectamente sin catalizador y no se van a generar daños en el motor. Sin embargo, es necesario denunciar el hecho a las autoridades y dar parte al seguro.

Según expone el taller mecánico Rodi Motor a La Vanguardia, el coste de un catalizador nuevo oscila entre los 300 y los 500 euros. Pero a esto hay que añadir la mano de obra, por lo que puede llegar a los 1.00 euros.

La buena noticia es que la sustracción del catalizador está cubierta por la garantía de robo de los seguros. Las pólizas a todo riesgo van a encargarse del coste total de la reparación.

En el caso de que tu seguro no lo cubra y que el coche sea antiguo, quizás conviene dejarlo de lado y que se declare como siniestro, ya que el coste de la reparación podría no compensar.

Recuerda que conducir sin catalizador provocará que el vehículo emita más gases contaminantes, y en caso de acudir a la ITV sin él suspenderías la inspección.