Cómo limpiar el aire acondicionado de casa y ponerlo a punto para el verano

Un hombre trata de refrescarse con un vaso de agua y un ventilador.

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  • Limpiar el aire acondicionado y ponerlo a punto para el verano hará que el aire que expulse sea más puro y que mejore su eficiencia energética.
  • En sólo media hora y con 5 sencillos pasos, tu equipo de aire acondicionado estará listo para refrescar tu casa.
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2 palabras empiezan a repetirse con asiduidad con la llegada del calor: aire acondicionado. Se puede ir a un restaurante, a una tienda, a un supermercado... a dónde sea... pero, por favor, que tenga esa maravillosa y fría brisa. Y si dispones de él en casa, quizá racanees un poco para encenderlo (por eso del alto precio de la energía), pero seguro que lo acabas haciendo. Antes asegúrate de limpiar el aire acondicionado y ponerlo a punto, porque, entre otras ventajas, hará que pagues menos por tu factura de la luz.

En Endesa dan instrucciones acerca cómo poner a punto el aire acondicionado de casa, algo necesario después de varios meses sin ser utilizado y, por ende, acumulando polvo. 

Desde la compañía eléctrica recomiendan limpiar el equipo de aire acondicionado antes y después de su uso prolongado, es decir, al principio y al final del verano. Pero, alertan, “si tu aire acondicionado cuenta con bomba de calor deberías limpiarlo también al empezar y terminar el invierno”. Y si la instalación tiene más de 5 kW de potencia, el mantenimiento debe realizarlo un profesional autorizado, para así respetar el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios.

¿Cómo limpiar el aire acondicionado en media hora?

Realiza los siguientes pasos y, en sólo media hora, tendrás a punto el aire acondicionado. Todo listo para superar un nuevo y caluroso verano. Eso sí, una advertencia previa: no enciendas tu aire acondicionado (sin limpiarlo) si lleva meses apagado. Si lo haces, “aunque sea unos pocos segundos, lo único que conseguirás es rociar con suciedad y bacterias la habitación”.

1. Limpiar los filtros

La misión del filtro es asegurar la calidad del aire que respiras recogiendo los ácaros, las bacterias y los virus. Para limpiarlo, explican, hay que abrir la tapa del split inferior, sacar el portafiltros y pasar una aspiradora suavemente. En caso de que esté muy sucio, se puede sumergir en agua fría (nunca caliente) e, incluso, cepillarlo con jabón antibacteriano y abundante agua. Para que se seque, aconsejan dejarlo abierto durante unas cuantas horas en una zona donde no haya luz solar directa ni otra fuente de calor. Es muy importante limpiar a fondo los tubos que se encuentran en el split detrás del filtro.

2. Limpia el split interior

El split has de limpiarlo con un poco de agua y jabón, prestando especial atención a las rejillas, que es donde se acumula más polvo. Hay que secarlo con un paño limpio.

3. Comprueba la unidad exterior

El tercer paso para limpiar un aire acondicionado es comprobar la unidad exterior. Quizá sea la parte más complicada, pero si eres un poco manitas lo harás sin problemas. Debes verificar que tanto las entradas de aire como el tubo de desagüe no se encuentren obstruidas. También es conveniente limpiar con un cepillo o con aire a presión la batería de intercambio para su buen funcionamiento.

4. Examina el gas refrigerante

En este caso, se trata de confirmar que no existen pérdidas. Para ello, tienes que inspeccionar la carga de gas refrigerante. Si no ves nada extraño, pero después tu aparato de aire acondicionado requiere de muchas cargas de gas durante un solo verano, significa que tienes una fuga. Si así es, lo mejor será llamar a un especialista. 

Ventajas de limpiar y poner a punto el aire acondicionado

Limpiar el equipo de aire acondicionado no es sólo una cuestión estética, ni mucho menos. Es algo que redundará muy positivamente en su funcionamiento: 

  • El aire que expulsará tu aparato será más puro, libre de suciedad y bacterias. Este punto es crucial para quien tiene problemas respiratorios.
  • Mejorará la eficiencia energética: para enfriar lo mismo, gastará menos energía (y tú pagarás menos en la factura).
  • Se reducirá la probabilidad de averías y el aparato durará más.
  • Evitarás los malos olores al encenderlo.

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