El mundo se está quedando sin helio, algo que preocupa a médicos de todo el mundo, ya que es una elemento indispensable para hacer funcionar las máquinas de resonancia magnética

una máquina de resonancia magnética

Reuters

El helio está desapareciendo de la Tierra y aunque pueda parecer que es un elemento poco importante, el mundo médico está francamente preocupado. 

¿El motivo? Este elemento del gas natural es clave para hacer funcionar las resonancias magnéticas

Por extraño que parezca, este elemento que consigue que floten los globos es una elemento indispensable para cualquier máquina de diagnóstico médico. 

Una resonancia magnética necesita 2.000 litros de helio líquido ultrafrío que mantiene sus imanes lo suficientemente fríos para hacerlas funcionar. 

¿El problema? El helio es un elemento no renovable que se encuentra en las profundidades de la corteza terrestre y se está agotando. Ante esta situación, los hospitales se están preguntando cómo planificar un futuro con un suministro mucho más escaso

"El helio se ha convertido en una gran preocupación", afirma Mahadevappa Mahesh, profesor de radiología de la Escuela de Medicina Johns Hopkins de Baltimore, en declaraciones a NBC News. "Especialmente ahora con la situación geopolítica".

Hasta este año, Estados Unidos contaba con Rusia para aliviar la escasa oferta. Existe una enorme instalación en el este del país que iba a suministrar casi  un tercio del helio del mundo, pero un incendio el pasado enero desbarató el calendario

Ahora, a pesar de que la instalación puede reanudar su funcionamiento en cualquier momento, la guerra en Ucrania ha paralizado, en su mayor parte, el comercio entre ambos países. 

Para ser claros, 4 de los 5 principales proveedores de helio de Estados Unidos están racionando el elemento, revela Phil Kornbluth, presidente de Kornbluth Helium Consulting. Estos proveedores están dando prioridad a la industria de la salud, reduciendo las asignaciones de helio a clientes menos esenciales. 

"El helio está en la asignación, sin duda", apunta Donna Craft, gerente regional de construcción de Premier Health que contrata a los proveedores de helio para unos 4.000 hospitales. "Probablemente, ya no estamos inflando globos en la tienda de regalos", continúa.

De momento, los hospitales no han detenido las resonancias magnéticas de los pacientes ni han apagado las máquinas, pero se están enfrentando a un aumento de costes del helio a un ritmo alarmante: puede haber crecido hasta un 30%, afirma Kornbluth. 

De momento no existe un final, pero el futuro de la resonancia magnética sigue siendo incierto. Este elemento ha sido indispensable desde la década de 1980, puesto que son máquinas que proporcionan imágenes de alta resolución a los médicos que les dejan ver detalles de órganos, huesos y tejidos que no aparecen en las radiografías. 

"Se obtienen imágenes nítidas y se pueden distinguir los tejidos blandos", afirma el Dr. Scott Reeder, jefe de resonancia magnética de la Facultad de Medicina y Salud Pública de la Universidad de Wisconsin. "Es fundamental para muchas cosas que hacemos en la medicina moderna", asegura. 

Ejemplos hay muchísimos: las resonancias magnéticas ayudan a los médicos a diagnosticar tumores cerebrales, accidentes cerebrovasculares, lesiones de la médula espinal, enfermedades del hígado y cáncer y el problema es que son insustituibles. 

El funcionamiento de las máquinas de resonancia magnética es muy interesante. 

En lugar de recurrir a los rayos X, que emiten trazas de radiación para observar el interior del cuerpo, las resonancias magnéticas utilizan campos magnéticos y ondas de radio. Estos pulsos indican a los sensores de la máquina qué tejidos se encuentran en cada lugar, y la máquina genera su imagen. 

Ahora bien, para mantener la corriente magnética requiere un frío extremo, que es donde entra en juego el helio, que con sus -452º Fahrenheit es el elemento más frío de la Tierra. 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.

Etiquetas: