Los mejores hábitos alimenticios para perder peso si superas los 30 años, según los expertos

Perder peso no es lo mismo a los 20 que a los 30, ya que aunque todavía te consideres una persona joven, a esa edad empiezan a tener lugar numerosos cambios hormonales.

A partir de los 30 entras en el inicio de la etapa adulta y esto viene con consecuencias como cambios en el metabolismo y mayor dificultad para quemar calorías, unidos a la pérdida de masa muscular.

Por tanto, es importante que llegada esa edad empieces a prestar especial atención a tus hábitos de vida, especialmente a la alimentación, ya que cada vez te costará más.

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Mantenerte en forma y sano se convierte en todo un reto también por factores ambientales, como el estrés de tener diversas responsabilidades, como mantener el hogar, rendir en el trabajo o cuidar de los niños, todo al mismo tiempo.

"A los 30, comienzas a ver signos de un estilo de vida poco saludable, como diabetes o hipertensión", explica James O. Hill, doctor y director del Centro de Nutrición Humana de la Universidad de Colorado. "Bajar el 10% de tu peso a estas edades podría reducir el riesgo de sufrir estas enfermedades".

Para ello debes planificar y organizar tu dieta acorde a tu rutina, ponte objetivos razonables que puedas cumplir, aunque lo recomendado es consumir como máximo entre 1.800 y 2.000 calorías diarias.

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Para los expertos existen 3 puntos básicos a seguir para adelgazar: llevar una dieta equilibrada y moderada, aumentar la actividad física (al menos 150 minutos semanales) y evitar pecar entre horas.

A esto se le debería de sumar el beber 2 litros de agua al día, evitar los azúcares, grasas saturadas y productos ultraprocesados, como las patatas fritas o la bollería.

Además, si tienes 30 años deberías centrarte en ingerir 3 nutrientes clave, como el folato, los fitonutrientes y el hierro.

El folato, que se encuentra en aguacates, garbanzos y espinacas, ayuda a mantener un embarazo saludable, mientras que los fitonutrientes retrasan el envejecimiento gracias a los antioxidantes y se encuentran en el café y el chocolate negro y el hierro. 

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La falta de hierro lleva a un estado físico y mental de agotamiento, lo que se traduce en un peor desarrollo de tareas cognitivas, según investigadores de la Universidad de Penn State.

Lo puedes obtener de alimentos como las carnes magras, las almejas, la soja o las aves de corral sin piel o del famoso potaje de lentejas.

En definitiva, no deberías obsesionarte con la dificultad para perder peso a los 30, pero sí empezar a ser consciente de que cuanto antes instaures en tu vida estos hábitos saludables más fácil te será adelgazar en el futuro.

Una dieta recomendada por expertos que cumple todos los requisitos anteriores es la popular dieta mediterránea, una dieta muy fácil de seguir y de mantener a largo plazo.