Microsoft se aferra al despegue de la Xbox y al lanzamiento de Windows 11 para impulsar su capitalización bursátil por encima de los 2 billones de dólares

Microsoft, una de las mayores compañías tecnológicas del mundo por capitalización bursátil, ha sufrido la presión en bolsa a medida que ha avanzado la rotación de las carteras de los activos crecimiento —que suelen ser los valores tecnológicos cimentados en la disrupción a largo plazo— a los de valor —ligados al ciclo económico, como los bancos o las eléctricas—.

Sus acciones están un 7% por debajo de sus máximos en abril en los 262 dólares. Incluso, cuando el ETF tecnológico, XLK, se recuperó de las pérdidas para cerrar sin cambios en ese periodo.

No obstante, la compañía tiene por delante 2 fechas clave en el calendario que podrían revertir esta situación hasta colocarla por encima de los 2 billones de dólares de capitalización bursátil (en torno a 1,68 billones de euros). Una meta, la de los 2 billones, en la que compite por llegar antes que Apple y Amazon, las otras gigantes del Nasdaq que son las principales rivales directas.

Danielle Shay, directora de opciones de Simpler Trading, cree que la compañía tiene potencial alcista pese a su debilidad reciente.

“Amo a Microsoft, es una de mis apuestas favoritas de crecimiento a largo plazo; es muy consistente porque tienen tantas divisiones de productos diferentes que continúará creciendo en el futuro”, explicaba Shay en la CNBC.

La compañía dirigida por Satya Nadella registró un significativo crecimiento en su beneficio del primer trimestre de 2021, un periodo en el que logró el mayor alza en ingresos desde 2018. Su negocio de la nube, Azure, avanzó un 50% en ventas.

“Creo que la posibilidad de comprar las acciones de Microsoft ante las últimas caídas es una muy buena oportunidad, ya que rebotó en su media móvil de 100 sesiones y puede superar los 270 dólares a corto plazo”, añade Shay.

Craig Johnson, responsable de análisis técnico de renta variable en Piper Sandler, también se muestra optimista. “Microsoft muestra un gráfico alcista”, concreta. Y dibuja ese potencial, además, comparativamente con otras empresas rivales. En los últimos 6 meses, la firma tecnológica fundada por Bill Gates ha ido batiendo marcas sin excesivas dificultades. 

Microsoft se ha quedado rezagada este año, pero fue uno de los títulos con mejor comportamiento en 2020. Las acciones de la tecnológica cerraron el ejercicio con un alza del 42%, superando la rentabilidad del 16% del S&P 500, el índice de referencia de Wall Street. 

“Simplemente, los títulos de la compañía corrigieron hacia la parte inferior de su rango de cotización, pero marcando la misma tendencia alcista, lo cual favorece una compra a corto, medio e incluso largo plazo”, agrega Johnson.

“Si miras a Satya Nadella y su historial, ha sido absolutamente asombroso, puesto que los títulos de Microsoft se han revalorizado más de un 565% en los últimos 7 años: ha superado a Apple y tiene un mejor histórico que Steve Ballmer, ex CEO de la empresa”, recuerda Johnson. 

La Xbox y el nuevo Windows, los ases en la manga

Los expertos ponen el foco en 2 factores que pueden llevar a que Microsoft alcance los 2 billones de dólares de capitalización bursátil y conquiste nuevos máximos históricos: el lanzamiento del nuevo Windows 11 y las ventas proyectadas de la Xbox.

Microsoft organizará un evento el próximo 24 de junio en el que presentará, previsiblemente, su nuevo sistema operativo. 

El consejero delegado de Microsoft, Satya Nadella, anunció esa "nueva generación" de su sistema operativo para ordenadores, "una de las actualizaciones más significativas de Windows de la última década".

Microsoft lleva mucho tiempo trabajando en una interfaz gráfica conocida como Sun Valley que ha definido como un "rejuvenecimiento visual". Parte de ese trabajo formaba parte de Windows 10X, una versión ligera que fue descartada recientemente.

“El lanzamiento de Windows 11 puede suponer un espaldarazo para los intereses bursátiles de Microsoft en los próximos meses”, comentan los analistas de Atlantic Capital.

Además, está el potencial de la videoconsola de Microsoft y las ventas que puede generar: la Xbox Series X. Sobre el papel, tiene más potencial que la PS5. Tiene 12 teraflops de potencia de procesamiento de tarjetas gráficas, frente a los 10.28 teraflops de PlayStation 5. 

Sin embargo, la PS5 supera a la Xbox en el rendimiento real, según las pruebas realizadas por terceros.

“Con todo, se espera que la nueva tecnología de AMD mejore el rendimiento de la Xbox… Microsoft ha confirmado que la tecnología FidelityFX Super Resolution (FSR) llegará a las últimas consolas Xbox Series X y Series S, lo que permitirá que Xbox ejecute juegos a velocidades y resoluciones más altas”, destacan los expertos de Jefferies.

“Esto al final supone un catalizador para que Microsoft consiga vender más consolas y que eso repercuta en su cotización en bolsa”, añaden.