Mr. Bugatti, el broker de coches de lujo de los multimillonarios

Vicente Cano
Bugatti, el broker de coches de lujo para millonarios
Mr. Bugatti
  • Obi Okeke es Mr. Bugatti y es uno de los pocos brokers de coches de lujo para multimillonarios.
  • Mr. Bugatti le ha vendido a Floyd Mayweather más de 40 coches por un valor total de 17 millones de euros. 
  • Entre sus otros clientes figuran personajes como Jessica Simpson, Ellen DeGeneres y Chris Tucker o Arnold Schwarzenegger.

Hace un par de años que contacté por primera vez con Obi Okeke, el broker de coches de lujo de los millonarios, quien se había dado a conocer por ser el conseguidor de Floyd Mayweather. Por entonces, al campeón del mundo de boxeo le había vendido ya la friolera de 39 vehículos. 

Y subiendo, porque la última vez que hablé con Obi ya había sumado otro par de vehículos a la lista de su mejor cliente. "No puedo confirmarle qué coches ni cuánto ha pagado por cada uno, pero sí que le he vendido coches a Mayweather por valor de 17 millones de dólares", confirmaba para Business Insider

En medio, habían pasado un tiempo durante el cual, de vez en cuando mi teléfono sonaba a horas a veces intempestivas y veía un número con prefijo de Arabia Saudí, Portugal, Croacia... y resultaba que al otro lado estaba un Mr. Bugatti, con bastante jet lag, intentando ponerse en contacto con alguien cuyo nombre empieza por las letras "V" e "I". 

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Salvo que el Euromillón lo remedie, nuestra relación no va a ir nunca más allá, por desgracia, ya que no me importaría ser miembro de una lista de clientes en la que están el propio Mayweather, Jessica Simpson, Ellen DeGeneres y Chris Tucker o Arnold Schwarzenegger, a quien este mismo año le vendió un Ferrari 812 Superfast. 

Mr. Bugatti, la sinécdoque como imagen de marca personal

Bugatti, el broker de coches de lujo para millonarios
Mr. Bugatti

Para Obi Okeke el viaje hasta convertirse en el broker de coches de los millonarios de medio mundo comenzó cuando su madre le envió a un internado Suiza tras un breve periodo exiliado en EE.UU. huyendo de la guerra civil que asoló su país natal, Nigeria. En ese país nació su gusto por los coches y desarrolló su innata habilidad para las relaciones personales. 

Así que, cuando se marchó a seguir estudiando en Boston, empezó a comprar y vender coches. Cuando un día vendió un BMW Alpina 323i por cuatro veces lo que le había costado se dio cuenta de que había encontrado la profesión de su vida. Eran mediados de los 80. 

Al poco tiempo ya había gestionaba un pequeña empresa que se encargaba de vender coches exclusivos como BMW, Lexus o Mercedes. Tras un tiempo, le llegó una oferta de un concesionario Ferrari en California, que aceptó y donde trabajo algunos años hasta llegar a ser director comercial. 

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Hasta que en 2008, un tal Floyd Mayweather entró por la puerta y le volvió a cambiar la vida. Cuando el boxeador salió del concesionario, ya le había vendido dos Ferrari 599, uno rojo y otro negro. Mayweather quedó tan contento que en poco tiempo empezó a llamar a Obi con más encargos.

Ahí, Obi vio una segunda oportunidad de negocio que no dejar escapar y decidió montar una empresa de coches de lujo que, al cabo de un año, le vendió a su socio para "poder centrarme en el trato personal y no estar atado a un lugar físico, esperando que los clientes entren", confirma Obi Okeke.

"La forma de hacer negocios ha cambiado y yo con ella. Ahora cierro transacciones desde un avión o en mitad del desierto entre Los Ángeles y Las Vegas, para eso tengo Wifi en mi SUV", admite Okeke, quien empezó a llamarse Mister Bugatti —marca que hoy tiene registrada por una casualidad—. "Mayweather me llamaba así pero un día, tras colgar un foto junto a él y sus adquisiciones en Twitter, la repercusión fue tan grande que no lo dudé y empecé a usar ese nombre", afirma. 

Desde entonces, Mr. Bugatti ha lanzado la app Liquid Torque y ha trabajado con otros famosos aunque su mejor cliente siga siendo Mayweather. "En los últimos años, le habré vendido unos 45 coches, entre los que hay varios Bugatti Veryron, un Bugatti Grand Sport Vitesse, un Ferrari Enzo, un Koenigsegg Trevita, un McLaren 650s, un Rolls-Royce Phantom Drophead, un Rolls-Royce Ghost, o un Rolls-Royce Wraith. También un Grand Sport Convertible de tres millones de euros el día antes de su pelea con McGregor", reconoce.

Los tres tipos de clientes millonarios de coches

Bugatti, el broker de coches de lujo para millonarios
Mr. Bugatti

Siempre contacta él mismo con el vendedor y se asegura de que el coche es legalmente de su propiedad, además de su estado de mantenimiento. Y siempre trata de conocer en persona al comprador, entre otras cosas, para averiguar de qué clase de sus tres tipos de clientes básicos de coches de superlujo es.

"Están el coleccionista, que quiere coches solo para guardarlos y casi con total seguridad jamás los utilizará; el conductor, a quien no le importa si el coche está un poco más gastado porque le va a añadir un montón de kilómetros más; y el Big Boy, que compra sin parar y trata de conducirlo todo, pero jamás tendrá tiempo para ello", afirma Okeke.

Cuando alguien le llama, viaja a donde haga falta por todo el planeta para tomarse un café y charlar de gustos y posibles objetivos del cliente, sobre los que establece un precio de mercado junto al comprador. Según admite, el país de procedencia no implica diferencia alguna en su negocio: "las diferencias solo las marca el dinero: una persona que se gasta tres millones de dólares en un coche no se comporta igual que otra con un presupuesto de 800.000 dólares".

Una vez Obi, perdón Mister Bugatti llegó a vender 93 vehículos en una única transacción, "aquello fue muy estresante y exigente para mí, pero aprendí mucho, sobre todo, acerca de mis capacidades". Otro día, Mayweather le llamó a las tres de la mañana porque necesitaba un nuevo Bugatti en 12 horas, "conseguí entregárselo en 11, pero este ha sido el encargo más exótico que he recibido... hasta ahora". 
 

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