Los fabricantes de coches de EEUU tendrán que pagar mayores multas tras caer una de las últimas decisiones de Donald Trump, lo que supone una victoria para Tesla

El humo del motor sale por el tubo de escape de un coche
El humo del motor sale por el tubo de escape de un coche

Getty Images

  • Los fabricantes estadounidenses de coches tendrán que pagar casi el triple por cada exceso de consumo de combustible de los modelos vendidos desde 2019.
  • La decisión de la NHTSA estadounidense recupera una norma paralizada por Donald Trump justo antes de dejar la Casa Blanca, lo que supone una factura de cientos de millones de dólares a todo el sector.
  • Tesla y todos los fabricantes de eléctricos son los grandes ganadores, ya que no tienen que pagar estas multas. La empresa de Elon Musk ingresa miles de millones por vender a otros sus derechos de contaminación.
  • Comienza el día bien informado con la selección de noticias de Business Insider España: suscríbete gratis aquí.

La factura de no cumplir con los requisitos de eficiencia en el consumo de combustible se va a encarecer, y mucho, para los fabricantes de coches en Estados Unidos. 

Una decisión de la NHTSA, la agencia que se encarga de los temas de tráfico en EEUU, acaba de tumbar una de las últimas maniobras de Donald Trump antes de dejar la Casa Blanca a principios de 2021. El expresidente retrasó una regulación que duplicaba las multas a quienes no cumplieran con los requisitos conocidos como CAFE (Corporate Average Fuel Economy).

La medida casi triplicaba la cantidad que se cobraba por exceder de las pautas de ahorro de combustible, de 5,50 dólares (5 euros, al cambio actual) a 14 (12,73 euros) por cada exceso de consumo de 0,1 millas por galón (0,04 kilómetros por litro) en los vehículos matriculados a partir de 2019.

Ahorra combustible

Trump frenó esa regulación, adoptada en 2016 y que debía empezar a aplicarse en 2019, pero tras los diferentes recursos judiciales de los fabricantes, la NHTSA ha confirmado que las multas volverán a tener efecto desde los modelos matriculados en 2019, y subirán para los matriculados a partir de este año 2022, que pasarán a pagar 15 dólares por cada exceso, según ha adelantado Reuters.

Una nueva factura para los fabricantes y una victoria para Tesla

La decisión supone que la mayoría de los fabricantes con ventas en Estados Unidos tengan que afrontar una factura millonaria por todos los vehículos vendidos en ese periodo que no cumplan con los estándares de eficiencia. 

En 2016, la industria calculaba un impacto de 1.000 millones de dólares anuales por la aplicación de esas medidas de eficiencia. Ahora, un fabricante como Chrysler (que apenas vende unos 115.000 vehículos al año en EEUU y forma parte del grupo Stellantis) podría tener que afrontar una factura de 572 millones de dólares.

La NHTSA rebaja el coste para el sector en torno a unos 294 millones de dólares, solo por los modelos matriculados en 2019, más del doble de lo que pagaban con la tasa anterior (115,4 millones).

El gran ganador de esto son los vehículos eléctricos, especialmente Tesla como el principal vendedor del segmento en el mercado estadounidense, que recibe importantes ingresos cada año por los créditos para contaminar que la empresa Elon Musk no usa y revende a otras marcas. En 2021 ingresó 1.465 millones de dólares solo por este motivo.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.