Nadia Calviño no prevé retrasos en las ayudas europeas y confía en que Bruselas relajará las condiciones para facilitar su reparto

La vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, es optimista respecto a la puesta en marcha del fondo europeo de recuperación y a las posibilidades económicas que supondrá para la recuperación de la economía española y la aplicación de reformas estructurales que permitan fomentar su resiliencia ante futuras crisis.

Así lo ha asegurado este lunes durante la presentación del informe de Afi La tercera modernización de la economía española, claves para aprovechar la oportunidad del plan de recuperación, en la que ha repasado algunas de las claves del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que el Gobierno ha presentado la semana pasada y del que ha destacado que ha supuesto una inyección de "energía positiva".

Calviño ha destacado que el plan implica acometer cambios para lograr una economía más resiliente a largo plazo, señalando que es uno de los 4 factores que condicionará la evolución de la economía española en el futuro inmediato, junto a la evolución de la pandemia y del proceso de vacunación, la del sector exterior y el mantenimiento de la estabilidad internacional y la prevención de la destrucción del tejido productivo y el empleo.

La vicepresidenta ha destacado que ese plan refleja cómo se ha encarado la crisis de forma distinta, mediante un esfuerzo fiscal que ha evitado la destrucción de más de 3 millones de empleos y que ha evitado que la caída del PIB y la destrucción de puestos de trabajo hayan vuelto a ir de la mano. Además, ha priorizado que el plan tenga un impacto en la economía real cuanto antes para que se cumpla la meta de favorecer la transformación del tejido productivo.

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Para ello, Nadia Calviño ha destacado que este año se podrán comenzar a lanzar proyectos y reformas gracias a la financiación dispuesta en los presupuestos generales del estado para este año para iniciativas con capacidad tractora, como el plan de digitalización de pymes. "Se trata de conseguir ese impacto inmediato en la economía real mientras otros proyectos van dando frutos a partir de 2022 y 2023", ha añadido.

Así, la vicepresidenta ha distinguido entre los proyectos como la nueva política de vivienda o el plan de infraestructuras ferroviarias, que sí ha afirmado que tendrán un impacto inmediato en la economía, mientras que otros proyectos contarán con un recorrido más amplio dentro de las 110 inversiones y las 102 reformas de las que consta el plan que el Gobierno debe entregar a Bruselas antes del 30 de abril.

Calviño ha asegurado que el Gobierno confía en que la Comisión Europea acceda a relajar las condiciones para el reparto de las ayudas simplificando las normas sobre ayudas de Estado, del mismo modo que las normas de rigor presupuestario han sido suavizadas durante la pandemia. Esa medida, según la vicepresidenta, supondría agilizar la puesta en marcha de los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y la Transformación Económica (Perte) que buscan transformar la estructura del tejido productivo español.

Por otra parte, la número 3 del Gobierno ha descartado que se produzcan retrasos en la puesta en marcha de las ayudas europeas por reticencias de los estados miembros que aún no han ratificado la disposición de fondos propios para que la Unión Europea pueda endeudarse y financiar este plan, destacando que Bruselas ya ha publicado el plan de emisión de deuda a partir de la segunda mitad de año como señal de que no habrá problemas.

Calviño también ha restado importancia al recurso ante el Tribunal Constitucional alemán sobre la legalidad de la emisión conjunta de deuda comunitaria, señalado que el ministro de Finanzas germano, Olaf Scholz, había anunciado a sus homólogos europeos que la respuesta de su Gobierno a ese recurso era sólida, por lo que no preveían retrasos adicionales por este proceso.