El ordenador más pequeño del mundo es casi 20 veces más diminuto que un grano de arroz

Ethan Rakin,
El ordenador más pequeño del mundo
  • La Universidad de Michigan ha creado un ordenador con sensor de temperatura de 0,3 milímetros.
  • Es tan sensible que su transmisión por LED podría instigar corrientes en sus circuitos.
  • El ordenador puede ser utilizado para monitorizar reservas de petróleo y procesos bioquímicos.

El ordenador más pequeño del mundo es tan diminuto que uno podría pensar que no se le puede dar uso, pero su interior puede implicar una gran noticia para el futuro de la monitorización clínica.

La Universidad de Michigan ha creado un ordenador sensible a la temperatura que mide sólo 0,3 milímetros; más pequeño que el desarrollado por IBM.

Es alrededor de diez veces más pequeño que el anterior ordenador más diminuto del mundo, de IBM, casi 20 veces más pequeño que un grano de arroz ─que suele medir entre 5 y 6 milímetros─ y tan sensible que su transmisión por LED podría instigar corrientes en sus circuitos.

El término ordenador es usado con ligereza por la universidad, mientras se sigue debatiendo qué es exactamente un ordenador. Tiene un procesador, pero a diferencia de un ordenador completo, pierde todos los datos cuando se queda sin potencia.

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Las limitaciones espaciales forzaron a los investigadores a reimaginar las maneras de reducir los efectos de la luz en el dispositivo. Por ello, cambiaron de diodos a condensadores conmutados y tuvieron que luchar contra el aumento del ruido eléctrico que se produce en un dispositivo que usa tan poca energía.

El resultado de sus experimentos es un sensor que mide cambios en regiones extremadamente pequeñas, como un grupo de células en un cuerpo. Eso podría llevar a conocer qué causa el crecimiento de un tumor, reducir el riesgo de cáncer y diagnosticar el glaucoma desde el interior del ojo.

Otros posibles usos del dispositivo incluyen la monitorización de yacimientos de petróleo, de procesos bioquímicos, de sonido y visuales, así como un propósito más tierno: estudiar pequeños caracoles.

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