Paco Cabezas, el sevillano que triunfa en Amazon y Netflix, estrena su primera película rodada 100% en España y lo tiene claro: "Invertir en cine no tiene lado malo"

• A lo mejor (aún) no te suena su nombre, pero Paco Cabezas (Sevilla, 1978) tiene en su currículum más de 20 capítulos de series como American Gods (Amazon), Penny Dreadful, Dirk Gently, The Alienist (Netflix), Fear the Walking Dead, Into the Badlands (AMC), The Strain (FX), Clase Letal (Syfy) y varias películas rodadas en Hollywood.
• La productora de Spielberg lo quería para dirigir su serie basada en el videojuego Halo, pero se tomó una pausa en su aventura americana para rodar Adiós, un thriller ambientado en su Sevilla natal.
• "El mayor obstáculo que tenemos para que haya más rodajes extranjeros en España es el 'tax rebate'. Yo mismo he intentado que algún proyecto en el que participaba y que se rodaba en México, por ejemplo, se hiciera aquí, pero si la propuesta de incentivo fiscal no es interesante las productoras no miran más allá". 
• "Espero que el Gobierno entienda que la inversión en cine es muy inteligente: genera empleo, promociona el país, atrae al turismo, ayuda a desarrollar a los profesionales propios...".
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Paco Cabezas es todo un artesano del audiovisual, un realizador español que ya cuenta con un extenso currículo de series en grandes plataformas y cadenas de EE.UU. como Amazon y Netflix y películas de Hollywood en su haber. Su agenda de rodajes es apretadísima y no para de recibir ofertas. Una de Amblin Entertainment, la productora de Steven Spielberg, la rechazó para regresar unos meses a España y rodarAdiós, un thriller que gira en torno a la desaparición de una niña en el barrio de Los Pajaritos de Sevilla, donde este director y guionista creció.

"Llevaba mucho tiempo intentando llevar a cabo un proyecto personal. Ha sido demasiado tiempo fuera de casa, y quería rodar algo que me tocara más el corazón. Ha sido difícil convencer a mis agentes de que me hicieran un hueco entre ofertas, porque afortunadamente en EE.UU. tengo muchas", afirma Cabezas, al tiempo que lamenta no tener más oportunidades de rodar en España: "El mayor obstáculo que tenemos para que haya más rodajes extranjeros aquí es el tax rebate. Yo mismo he intentado que algún proyecto en el que participaba y que se rodaba en México, por ejemplo, se hiciera en España, pero si la propuesta de incentivo fiscal no es interesante, las productoras no miran más allá".

"Dan igual nuestro clima, nuestras horas de luz, nuestros paisajes, el buen nivel de nuestros profesionales... Siempre morimos en el primer obstáculo. Ahora se ha conseguido el rodaje de la nueva de Rambo, pero ha sido justo porque Canarias sí tiene esa exención fiscal alta que la hace competitiva". En efecto, las Canarias suman al 20% de incentivo nacional un 15% más por su insularidad. Suficiente para competir con exenciones de países como Canadá, México, Portugal, Bélgica, Eslovaquia o Irlanda del Norte, todos por encima del 30%.

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"Espero que el Gobierno entienda que la inversión en cine es muy inteligente: genera empleo, promociona el país, atrae al turismo, ayuda a desarrollar a los profesionales propios... Yo no le veo lado malo", asevera el realizador sevillano, que conoce muy bien los procesos de la industria estadounidense y destaca que "allí tienen una manera más inteligente de identificar el talento. Por ejemplo, si un director tiene buen ojo y capacidad para rodar acción, o historias familiares, o terror... enseguida se le identifica como un talento en eso y se le pone al frente de proyectos relacionados, y eso ayuda mucho a su desarrollo. Los productores españoles ya se han empezado a dar cuenta de que esa fórmula funciona mucho mejor".

Para Paco Cabezas, la mejor combinación "es hacer TV americana y cine independiente en Europa o en España. En EE.UU., en televisión tienes a un showrunner que cuida mucho el producto, una cadena que apuesta por el proyecto y una fecha de entrega, y todo eso facilita mucho la labor. Sin embargo, en el cine independiente allí tiene mucho peso quién pone el dinero, y casi nunca te libras de que quieran intervenir en la película. Hay poca seguridad y escaso compromiso con el proyecto. Aquí, sin embargo, las películas independientes tienen lo más importante, que es personalidad y seguridad, desde el momento de su concepción hasta el final".

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En Adiós cuenta con su actor español de cabecera, Mario Casas, porque "se entrega en cuerpo y alma, y yo hago un cine muy brutal y apasionado". También con Natalia de Molina, Carlos Bardem y Ruth Díaz, todos actores "comprometidos con un rodaje que en algunos momentos fue casi de guerrilla, rodando cámara al hombro por las Tres Mil Viviendas. Mi objetivo es crear un mundo lo más realista posible, para que los actores puedan estar inmersos en esa realidad que se presenta".

Y reconoce que disfrutaría si tuviera más oportunidades de rodar en España: "Por estar en casa y porque el nivel profesional aquí es muy alto. Rodar en Canadá, donde ahora rueda casi todo el mundo, puede ser peor precisamente porque allí hay muchos más rodajes... y menos cantidad de equipos disponibles. No sabes si te va a tocar uno 'menos bueno' que la media. Aparte de que en Vancouver hace un frío del carajo, claro".

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