"Cualquier dieta inferior a 1.300 calorías puede poner en peligro la salud de una persona": cómo afecta a tu cuerpo seguir una dieta demasiado restrictiva

tomar pocas calorías
  • Si bien para perder peso debes reducir tu ingesta de calorías, hacerlo en exceso puede tener consecuencias para tu cuerpo mucho más allá de adelgazar.
  • "Cualquier dieta que sea inferior a 1.300 calorías puede poner en peligro la salud de una persona", afirma la nutricionista Júlia Farré. Entre los riesgos: perder mucha masa muscular, ralentiar tu metabolismo o tener un déficit nutricional.
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Quieres perder peso y te has puesto a restar calorías como un loco. No tomas hidratos, o solo te alimentas de batidos o de verduras de x color. Es decir, estás siguiendo una dieta que has encontrado por ahí en internet o esa que asegura ser la última tendencia con la que la estrella de turno ha redefinido su silueta. Pues si es así cuidado.

Tu cuerpo requiere calorías para funcionar. Este las utiliza para procesos esenciales tales como digerir y metabolizar alimentos, darte energía para moverte y  sobre todo llevar a cabo las funciones básicas que te mantienen vivo (desde respirar a asegurar que tu corazón o pulmones funcionan).

Por lo que aunque te lo parezcan las calorías no son el enemigo. 

Lo que pasa es que también afectan a tu físico. Por lo general consumir más calorías de las que tu cuerpo necesita hará que aumente de peso, ya que principalmente se acumularan en forma de grasa. Mientras que comer menos calorías de las que su cuerpo requiere te hará adelgazar.

En general, la Organización Mundial de la Salud establece un cálculo genérico: entre 1.600 y 2.000 calorías al día para las mujeres, y para los hombres entre 2.000 y 2.500. —Aunque algunos expertos recomiendan disminuir estas a 1.800 calorías para ambos sexos—.

No obstante la Fundación Española de Nutrición, que apunta que las necesidades nutricionales varían según la edad, el sexo y el estado de salud.

Por tanto, lo habitual es que las personas que intentan perder peso restrinjan las cantidad de calorías que ingieren. Hasta ahí bien.

Sin embargo,a veces esta reducción calórica va demasiado lejos. Por ejemplo la popular dieta Sirfood implica consumir tan solo 1.000 calorías durante la primera fase para pasar a 1.500 durante la segunda.

"El problema de hacer dietas restrictivas por uno mismo es que uno no es capaz de calcular cuál es un déficit calórico adecuado que puede hacer para perder peso y cuál es de riesgo" explica en conversación con Business Insider España la nutricionista Júlia Farré.

Como explica Farré, antes de establecer un plan de alimentación los nutricionistas realizan un cálculo de las calorías mínimas que la persona debe ingerir para no poner en riesgo la masa muscular y las funciones vitales. "Eso lo calculamos con 30 kilocalorías por cada peso de masa magra".

¿Qué pasa? Si lo haces por tu cuenta, es posible que pases esto por alto y te quedes solo en la necesidad de reducir al mínimo la ingesta calórica (sin además saber cómo integrarlas dentro de una dieta balanceada).

"Cualquier dieta que sea inferior a 1.300 calorías puede poner en peligro la salud de una persona" subraya la nutricionista.  

"Es muy difícil llegar a consumir a lo largo del día todas las vitaminas, minerales, proteínas, la fibra, todos los nutrientes que necesitamos con una dieta de menos de 1.300 calorías. Seguramente va a ver carencias".

Las consecuencias de consumir muchas menos calorías de las que necesita tu cuerpo pueden variar en función de las características de cada persona 

"Hay gente que tendrá tendencia a perder mucha masa muscular, gente que puede perder masa ósea, gente a la que se le puede debilitar el pelo, las uñas, o la calidad de la piel, sequedad de mucosas. También se puede modificar negativamente la microbiota intestinal  y tener más alteraciones y problemas digestivos, etc." enumera Farré.

Puedes ralentizar tu metabolismo (lo que dificultará más la pérdida de peso)

mujer pensándose en la báscula

Getty Images

"Uno de los riesgos para mi más importante y que la gente no tiene en cuenta es la afectación que estas dietas tienen sobre el metabolismo", resalta Farré.

Cuando una persona hace una dieta muy baja en calorías, sobre todo si la hace durante bastante tiempo, el cuerpo se pone como en "método de reserva" y lo que hace es no gastar energía, explica la especialista. 

En otras palabras, comer de manera frecuente menos calorías de las que tu cuerpo necesita provoca que tu metabolismo se ralentice. 

Varios estudios han remarcado esto, mostrando que las dietas muy hipocalóricas pueden disminuir la cantidad de calorías que el cuerpo quema hasta en más de un 20%.

"Por lo que luego tienes mucha más tendencia a engordar y más dificultad a la hora de adelgazar", enfatiza Farré.

Al respecto, un estudio de 2016 enObesity encontró que la reducción de la tasa metabólica en reposo causada por la pérdida de peso puede persistir en el tiempo, incluso después haber concluido con la dieta.

Puedes perder demasiada masa muscular

Cuando haces dieta pierdes peso y grasa, lo cual te alegra mucho. Pero en ese camino también estás eliminando músculo.

Y con una dieta excesivamente baja en calorías "hay gente que tendrá tendencia a perder mucha masa muscular", destaca Farré.

Lo cual de no remediarse, puede tener consecuencias en tu salud.  Ya que en extremopodría conducir a menor fuerza muscular y finalmente peor rendimiento físico.

gente haciendo ejercicio en el gimnasio

Reuters/  NACHO DOCE

Tener una masa muscular baja conduce además a la ganancia de peso, sin necesidad de un consumo calórico excesivo posterior, señala el Centro Integral de Nutrición de las Islas Baleares (CINIB).

"Vas perdiendo masa muscular y el cuerpo va recuperando no solo lo perdido, sino un poco más para poder recobrar la musculatura lo que hace que [tras estar a dieta] cada vez pesemos más", aseguró asimismo previamente la nutricionista.

Por ello es importante combinar una dieta saludable con ejercicio que asegure el desarrollo y mantenimiento del músculo. Como son los ejercicios de fuerza, pesas o tonificación.

Corres el riesgo de tener un déficit de nutrientes

Una médico atendiendo a un paciente

Una de las consecuencias más serias que puede conllevar comer muchas menos calorías de las que necesita tu cuerpo tiene que ver con comprometer seriamente la salud.

Cuando te sometes a una dieta muy restrictiva en este aspecto y sin supervisión corres el riesgo de no estar dando a tu cuerpo todo lo que este necesita para funcionar correctamente. O dicho de otra manera hacer que te falten nutrientes.

Una carencia nutricional puede darse por varias razones, entre ellas a causa de una "dieta insuficiente, o lo que es lo mismo, por una restricción excesiva de calorías o de algún nutriente en concreto", afirmó previamente a Business Insider EspañaCristina Morillo, nutricionista de bluaU de Sanitas.

Según Morillo, las carencias más habituales que se producen son de micronutrientes, es decir, vitaminas y minerales. Los más comunes son los déficits de hierro, yodo, vitamina A, D, B-12 y ácido fólico. 

El cansancio generalizado, problemas para concentrarte o un peor estado de piel, cabello y uñas son algunos de los signos con los que tu cuerpo podría estar diciéndote que tienes un problema nutricional.

Determinar la cantidad de calorías adecuada para ti reducirá la probabilidad de desarrollar estas  consecuencias negativas para tu salud. 

Por lo que es importante que optes siempre por dietas de calidad que se alejen de severas restricciones. 

Lo más adecuado para estar seguros es contar con la supervisión de un experto en alimentación que prime ante todo cambios de estilo de vida saludables y sostenibles en el tiempo.

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