Patrik Bergareche (Just Eat): "Hemos maleducado al consumidor y no le hemos explicado que entregar un pedido en 30 minutos es una proeza"

Envíos gratis, descuentos de hasta 15 euros en tu primer pedido, una hamburguesa en la puerta de tu casa por menos de 10 euros. La guerra de precios de Glovo, Uber Eats y Just Eat en los últimos años por lograr captar más y más usuarios ha tenido un claro ganador, los consumidores, y varios perdedores, las propias plataformas, los restaurantes y hasta los riders.

Ahora, ese modelo se ha acabado. 2022 ha puesto fin a una década de dinero barato, en la que los grandes fondos de inversión regaron con miles de millones modelos de negocio insostenibles que han trabajado a pérdidas desde su fundación centrados en la expansión a toda costa y donde la rentabilidad era casi un tema tabú.

Las plataformas de reparto son uno de esos negocios. Los descuentos, las promociones y los envíos a un precio muy por debajo de lo que realmente cuesta realizar ese envío han caracterizado a estas empresas.

"Hemos maleducado al consumidor y no le hemos explicado que entregar un pedido en 30 minutos es una proeza", ha destacado Patrik Bergareche, director general de Just Eat en España, ante la pregunta de Business Insider durante la presentación de su último informe del sector Gastrómetro.

"Poner en conjunto a un restaurante, un usuario y un repartidor y que el producto fluya por las ciudades y que llegue caliente, a tiempo y sin errores, es una proeza. Y eso tiene un coste", ha añadido.

El actual contexto macroeconómico, marcado por las diferentes subidas de tipos de interés tanto de la Reserva Federal de EEUU como del Banco Central Europeo para paliar la creciente inflación, ha obligado a estas empresas a dar un golpe de timón en su estrategia y empezar a buscar la rentabilidad que exigen sus inversores.

"Muy pocos sectores han recibido tanto dinero como ha sido el sector de delivery a nivel mundial. España tampoco es una excepción. Es alucinante que no ha habido una sola empresa pura delivery que haya dado rentabilidad en los últimos 10 años. Es inaudito. Nómbreme usted un sector que no haya sido rentable nunca", ha señalado el directivo, y ha añadido que Just Eat ha sido la única que ha salido de la zona roja. 

En concreto, la compañía de reparto volvía a la senda de la rentabilidad en el tercer trimestre de este 2022 gracias a la reducción de costes, la subida de las tarifas a sus clientes y las comisiones, aunque en otros ejercicios anteriores también ha sido rentable.

Actualmente, la palabra rentabilidad copa las llamadas con los inversores tras la presentación de resultados de los gigantes del sector, como Delivery Hero (dueña de Glovo), Just Eat, Deliveroo o DoorDash, que no opera en España, pero es una de las empresas más grandes de EEUU.

"El cambio macroeconómico nos da de bruces con la realidad. Ahora los inversores quieren una empresa rentable y quieren recuperar su inversión. Nos toca el trabajo complicado de deshacer un poco el camino, o mejor dicho, continuarlo, pero con unos términos más sostenibles", ha señalado.

¿Precios dinámicos en el 'delivery'?

Por su parte, Enrique Gallego, secretario general de la Confederación Empresarial de Hostelería de España ha asegurado durante el mismo evento que una solución es que el sector incorpore los precios dinámicos en función del momento del día y la demanda del servicio, como ya funciona en hoteles, o billetes de avión.

"El cliente tendrá que saber que, en algunas ocasiones, que te lleven el pedido a casa por supuesto tendrá que ser más caro que si te lo sirven en el comedor del establecimiento. Depende de las circunstancias del horario. Depende de si está lloviendo y hay una final de un mundial de fútbol. Es decir, todas esas circunstancias influyen", ha comentado.

"Lo entendemos ya perfectamente cuando hablamos de precios de hoteles, cuando hablamos de precios de avión. Es decir, todos esos elementos tienen que empezar a jugar en este mercado y es el momento en el que se van a ir consolidando", ha añadido.

Carlos Pérez Tenorio, presidente de Marcas de Restauración, ha asegurado que el modelo necesita una reflexión de cara al futuro para que "sea estable y sostenible. El consumidor debe entender que está recibiendo un servicio puerta a puerta. Y eso no puede ser gratis".