El Pentágono prueba su sistema de defensa contra drones: Estados Unidos busca mejorar esta tecnología ante el incremento de su uso en la guerra

Un militar ucraniano en la trinchera muestra un dron ruso derribado en el campamento militar de la región de Zaporizhzhia (Ucrania), el 29 de abril de 2022.
Un militar ucraniano en la trinchera muestra un dron ruso derribado en el campamento militar de la región de Zaporizhzhia (Ucrania), el 29 de abril de 2022.

Reuters

Es cierto que la guerra no suele tener consecuencias positivas. A pesar de ello, tras la Primer Guerra Mundial aparecieron numerosos inventos relacionados con ella, como los pañuelos de papel, las bolsitas de té, el reloj de pulsera e, incluso, las salchichas vegetarianas.

En el campo de la tecnología, llegó también la tan necesaria comunicación con los pilotos de aviones.

Con mayor frecuencia, los diferentes gobiernos se esmeran en hacer demostraciones de fuerza para persuadir al enemigo de atacar el territorio. No solo Rusia o Corea del Norte. También Estados Unidos, que hace 2 demostraciones anuales de sistemas contra drones.

A principios de 2020, el Pentágono de Estados Unidos consideró que tenía que defenderse contra los sistemas de drones, cada vez más presentes en el campo de batalla. Así creó la Oficina Conjunta de Sistemas de Aeronaves No Tripuladas Pequeñas (JCO).

Tan solo 2 años antes, el mismo Pentágono, a través de DARPA –Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa, por su traducción al castellano–, creó un enjambre de drones que fueran capaces de desplegarse desde una nave nodriza.

La última arma que EEUU ha mandado a Ucrania: un dron de 60 centímetros y 2,25 kilos de peso diseñado para misiones suicidas

Sin embargo, el funcionamiento del JCO parece ser todo lo contrario: defenderse de un enjambre de drones. Tal es su importancia porque la nueva guerra también implica a estas pequeñas máquinas.

Por ejemplo, para el reconocimiento y la ubicación de tropas, Ucrania utiliza los Bayraktar TB2 de Turquía. Por su parte, Rusia hace uso de los drones kamikaze Kub, fabricados curiosamente por la empresa rusa Kalashnikov.

De momento, el Ejército de Estados Unidos ha realizado 3 demostraciones en total de su sistema antidrones: 2 durante la primavera y el otoño del año pasado, y una muy reciente.

Así es el sistema antidrones de Estados Unidos

Del 4 al 22 de abril, Estados Unidos realizó su demostración más reciente del sistema antidrones, en Yuma Proving Ground, en Arizona, una zona de prueba que depende del Pentágono.

El funcionamiento de este sistema defensivo se debe a diferentes pulsos electromagnéticos que se dirigen desde tierra hasta el aire

"Estábamos analizando el alcance para atacar a los objetivos que se acercaban y la cantidad de tiempo que llevó disuadir o derrotar al objetivo", explicó durante una rueda de prensa Michael DiGennaro, líder del equipo de pruebas. 

Para tal experimento se utilizaron diferentes grupos de drones: los del grupo 1 con un peso de 9 kilogramos; el grupo 2, entre 9,5 y 25 kilogramos, y el grupo 3, de 25 hasta 600 kilogramos.

Para derribar dichos drones se utilizaron diferentes sistemas: Leonardo DRS, Epirus y Raytheon. Aunque las pruebas están casi en sus primeras fases, la integración de estos en un sistema mayor parece ser el objetivo principal del Pentágono.

De momento, el más efectivo parece ser el último. Aun así, el Pentágono cuenta con el apoyo de 5 empresas: Industrias Anduril, Black Sage, CACI, Rafael Systems Global Sustainment y SAIC.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.