La Policía Nacional ha detectado una nueva estafa. Se trata de una técnica denominada Teller Hooking que consiste en la manipulación de los cajeros automáticos para conseguir una determinada cantidad de dinero.
Mediante esta técnica, los investigados solicitaban un reintegro de 1.000 euros en el cajero e introducían un artilugio metálico conocido como Teller Hoodking en el dispensador en el momento de abrirse, de este modo y con el efectivo de nuevo en su poder provocaban un fallo en la máquina, que registraba el dinero en la cuenta del titular aun sin haberlo recibido. Así, conseguían duplicar su saldo.
La Policía ha detallado este procedimiento en sus redes sociales:
🚩Detectada una modalidad de #estafa en cajeros automáticos mediante la técnica Teller Hooking
— Policía Nacional (@policia) August 16, 2020
Introducían un gancho metálico cuando el dispensador se abría para capturar los billetes.
Entonces anulaban la operación provocando un error en la máquina.
6 detenidos en #Madrid pic.twitter.com/dGxGWK1e7L
El grupo criminal ya ha sido desarticulado por la Policía. Operaba en varias provincias españolas y había conseguido acumular más de 200.000 euros, llegando a obtener 40.000 euros en un solo fin de semana.
Sin embargo, todavía hay que esperar a que las entidades bancarias afectadas terminen de recabar toda la información pertinente, por lo que la cantidad estafada podría aumentar.
Gracias a dicha operación, la Policía ha conseguido descubrir este nuevo método de estafa y actualizar las medidas de seguridad de los cajeros automáticos.
Los investigados utilizaban tarjetas a nombre de terceras personas. En la cuenta del titular ingresaban la cantidad de 1.000 euros solicitando inmediatamente un reintegro del mismo importe. Acto seguido utilizaban la novedosa técnica para bloquear la máquina y duplicar el dinero.
Para evitar ser rastreados, los investigados utilizaban documentación venezolana y teléfonos extranjeros. El dinero obtenido era enviado a varias cuentas bancarias de Estados Unidos para dificultar el seguimiento del mismo.
La Policía Nacional ya ha detenido a 6 personas, aunque la investigación sigue en marcha y no se descarta que haya nuevas detenciones. Los arrestados suman antecedentes por crímenes similares, y ahora se les imputa los presuntos delitos de pertenencia a grupo criminal, estafa y falsificación documental.