Preguntas y respuestas sobre los premios Oscar 2018

Quedan apenas unas horas para la gala de los Oscar 2018 y ya tenemos bastante cosas muy claras:

• Que vamos a asistir a una (muy necesaria) y contundente reivindicación sobre el papel de la mujer no solo en el cine, si no también en la sociedad actual.
• Que si Jimmy Kimmel lo hace la mitad de bien que el año pasado (no le cargamos al pobre el lío final) el humor ingenioso y la diversión están aseguradas.
• Que La Forma del Agua parte como favorita, aunque es posible que haya un reparto de los galardones como ya viene siendo habitual.
• Que pocas veces ha habido unos favoritos tan claros en los premios a las interpretaciones: Gary Oldman y Frances McDormand en los principales, y Allison Janney y Sam Rockwell en los secundarios.

Sin embargo, la edición de este año, número 90, también nos deja algunas dudas a la que no resulta fácil encontrar una respuesta sólida. Son estas:

1. ¿Por qué Coco, la favorita a Mejor Película de Animación, está originalmente hablada en inglés cuando se trata de una historia desarrollada en México?

Sí, ya, por un lado se trata de una producción americana, es la respuesta más obvia. Vamos, que lo hacen porque les da la gana y así la comercialización en USA es más rentable (aunque todos los actores que ponen voces sean de origen hispano, como Gael García Bernal o Edward James Olmos).

Por otro, es cierto que para los países Latinoamericanos (incluida España, lo que provocó cierta absurda polémica) se realizó una versión en la que las voces corren a cargo de actores mexicanos. Vale pero, dado que se trata de una historia desarrollada en México, ue ahonda en sus costumbres y tradiciones, ¿no habría que haber realizado solo esta última? ¿No nos recuerda esto a cuando se hacían películas americanas sobre nazis o sobre rusos en la Guerra Fría y los actores hablaban en inglés con acento alemán o ruso, provocando un efecto ridículo?

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En este momento anti-México que se está viviendo en los USA por parte de algunos sectores, un gesto de este calibre por parte de Disney, proyectando la película también en USA solo en español con voces mexicanas (lo único que tiene sentido según la historia) habría sido un bofetón a Trump y un abrazo a la amplia cultura hispana de los estadounidenses, máxime cuando el propio director, Lars Unkrich, asgura que se trata de "una carta de amor al país y un homenaje a su cultura". Pues empieza por respetar su idioma, ¿no?

2. ¿Por qué Tres Anuncios en las Afueras ha pasado de ser la favorita a generar oscuros rumores y sospechas?

Pues sí, una sensacional cinta, con un guión de primera y unas interpretaciones brillantes, ha pasado de ser una de las dos favoritas, junto con La Forma del Agua, a generar cierto rechazo.

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Parecer ser que, desde algunos sectores, se la está acusando de ser “subversivamente racista”, por la superioridad moral con la que retrata a la "América Profunda", con los estereotipos de paletos, racistas y machistas, por parte de un director británico como Martin McDonagh, y también por el papel de la protagonista, que representa a una madre coraje en vez de a una señora afligida y destrozada. Sinceramente, eso es lo que se llama hilar fino.

Veremos si finalmente estas rebuscadas, aunque respetables, consideraciones se reflejan en los premios Oscar.

3. ¿Por qué Jessica Chaistain no está nominada como mejor actriz por Molly´s Game?

En realidad, la pregunta debería aplicarse a por qué esta película solo ha recibido una nominanción al Mejor Guión Adaptado, cuando se trata de uno de los films más potentes y arrebatadores del año.

Lo de Jessica Chaistain ya empieza a ser la clásica historia de una sensacional actriz cuyo físico la impide alcanzar un mayor reconocimiento.

Ya fue ninguneada, aunque tuviera nominación, por su sensacional papel de agente de la CIA en La Noche más Oscura. Ahora está descomunal en un intenso y entretenido film del prestigioso guionista Aaron Sorkin (La Red Social, El Ala Oeste de la Casa Blanca) basado en una historia real que desde luego merecía más reconocimiento.

4.¿Por qué han tardado tanto en reconocer (en el cine) el inmenso talento de Allison Janney?

Nadie hacer mejor de madre despreciable (o no) que ella. Y es cierto que como actriz de televisión se ha forrado a premios (El Ala Oeste de la Casa Blanca, Master of Sex o Mom). Pero en el cine, a pesar de habernos regalado interpretaciones sublimes en películas como American Beauty, Las Horas, Hairspray o Juno, este año es la primera vez que recibe una nominación a los Oscar, por su asombrosa recreación de la deleznable madre de la patinadora Tonya Harding en Yo, Tonya.

Eso sí, nunca es tarde si la dicha es buena, porque no hay un Oscar más claro en toda la noche.

5. ¿Por qué un excelente actor como Michael Stuhlburg, semi desconocido para el gran público, está ahora en tres de las películas nominadas a Mejor Film sin una sola nominación?

Es cierto que hasta ahora su carrera en el cine apenas le había otorgado papeles menores, eso sí, en films de prestigio como Hugo, de Scorsese, Lincoln, de Spielberg, Blue Jasmine, de Woody Allen, y su único gran papel fue en una película poco comercial, Un Tipo Serio, de los Hermanos Cohen, por la que sí recibió una nominancion a los Globos de Oro.

Pero en esta ocasión ha acertado de lleno con sus elecciones (o lo han hecho los directores de casting con él) apareciendo en papeles muy relevantes de tres de las películas con más nominaciones: Los Archivos del Pentágono, La Forma del Agua y Call Me by Your Name. Solo por mencionar su trabajo en esta última (aunque está espléndido en las tres) nos regala la que sin duda es una de las escenas más emotivas de todas las que hemos visto este año, la conversación que en su papel de padre tiene con un atribulado Elio (Timothée Chalamet) hacia el final del metraje.

Por esa razón es difícil entender que no esté nominado por alguno de estos tres films. Lo que sí es seguro, es que a partir de ahora no le van a faltar papeles relevantes.

6. ¿Qué habría pasado si Todo el Dinero del Mundo se hubiera estrenado con Kevin Spacey en el papel de Jean Paul Getty?

A Ridley Scott y a la productora les pareció inviable seguir con él en el film tras las graves acusaciones de acoso sexual y decidieron gastarse 10 millones de dólares en borrar sus escenas para introducir a Christopher Plummer, que además ha sido nominado por este papel.

Pero siempre nos quedaremos con la duda de qué habría pasado si la película se hubiera estrenado antes de salir a la luz esas graves acusaciones. ¿Habría sido nominado él si su interpretación hubiera sido buena? ¿La habrían penalizado los académicos? ¿Es justo demonizar a un film porque uno de sus actores haya sido acusado de algún delito? Ahí queda la reflexión.

7. ¿Le han perjudicado a James Franco, y a su film The Disaster Artist, en el reparto de las nominaciones las acusaciones sobre acoso sexual que él recibió tras los Globos de Oro?

James Franco se llevó el Globo de Oro al Mejor Actor por el film que él dirige, además de estar nominada en otras importantes categorías, y también se llevó la Concha de Oro en San Sebastian. 

La película tenía todas la papeletas para tener varias nominaciones en los Oscar de este año, pero se ha quedado con la de Mejor Guión Adaptado. Para colmo, acaba de salir otra acusación por parte de uno de los supuestos guionistas por no aparecer en los créditos. ¿En estos premios cuenta solo la calidad artística o también la moral?

8. ¿Por qué El Instante Más Oscuro y Dunkerque no han competido como un solo film para tener más opciones?

Permitidnos esta pequeña broma final. Ambos films, de altísima calidad, tratan los mismos acontecimientos desde puntos de vista diferentes.

En Dunkerque, Chris Nolan nos mete de lleno (literalmente) en el drama de 300.000 soldados británicos acorralados por el ejercito alemán en la famosa playa francesa. En El Instante Más Oscuro, asistimos al nombramiento de Winston Churchill como Primer Ministro del Reino Unido, y cómo es él quien tiene la, a priori, alocada idea de rescatar a esos 300.000 soldados usando embarcaciones civiles.

El film de Nolan es un alarde técnico asombroso y una impactante y espectacular manera de contar unos hechos sumergiendo al espectador en el horror de una batalla- El protagonizado por Gary Oldman supone una perfecta -pero también más intimista y reflexiva- muestra de un personaje icónico, un líder a su pesar, con un punto extravagante, que al final resulta ser la persona ideal en el momento clave, capaz de enfrentarse a la terrible responsabilidad de tomar decisiones que tendrán consecuencias sobre, no solo esos 300.000 hombres, sino sobre millones de personas, y todos los recovecos políticos y dilemas terribles a los que se tiene que enfrentar. Presentadas ambas en una única candidatura, si eso fuera posible, resultaría una combinación imbatible en estos premios.

Sea como sea, no os perdáis ninguno de los dos films, y si es posible vedlos de forma consecutiva.