¿Por qué los presentadores de los programas de televisión no utilizan mascarilla?

Antonio García Ferreras
  • Desde que empezó la pandemia las mascarillas se han convertido en uno de los mejores elementos de protección contra el coronavirus, y son obligatorias en la mayoría de espacios, tanto cerrados como abiertos.
  • Sin embargo, los presentadores de televisión, sus invitados y los tertulianos de los programas no suelen utilizar mascarilla. Una experta explica por qué pueden prescindir de esta prenda.
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Las mascarillas se han convertido en un elemento de protección indispensable desde que empezó la pandemia, siendo la primera barrera que puede evitar contagios de coronavirus.

En muchas situaciones cotidianas su uso es obligatorio: en el transporte público, cuando se hace la compra en supermercado, en los comercios e incluso dando un paseo por la calle se debe tener la nariz y la boca cubierta con una mascarilla.

Sin embargo, hay un lugar en el que las mascarillas no se usan: los platós de la televisión. Los presentadores de los programas, sus invitados y los tertulianos que participan en ellos no suelen llevar mascarilla.

Los espectadores pueden pensar que este hecho es injustificado, y que para evitar posibles contagios en el programa debería ser obligatoria también la mascarilla. Pero existen varios motivos que explican este fenómeno y que lo convierten en una actividad menos arriesgada de lo que aparenta.

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La divulgadora científica Deborah García Vello, conocida en redes sociales como @deborahciencia, ha explicado en el programa La Hora de la 1 de Televisión Españolapor qué en los platós de televisión se puede llevar la cara destapada:

"La normativa exime algunas actividades profesionales porque son incompatibles con el uso de mascarilla. Por ejemplo los actores, que siguen haciendo películas o series, o los músicos, ya que un músico que toca un instrumento de viento no puede usar mascarilla, y en televisión tampoco", empieza detallando la divulgadora.

García Vello explica que si un presentador se tapa la boca "acaba perdiendo la mitad de la comunicación no verbal", y esto provoca que las personas con dificultades auditivas no puedan seguir cómodamente el programa, además de ser también más complicado para el resto de espectadores.

Además, que no se utilicen mascarillas no quiere decir necesariamente que exista mayor riesgo. Para paliar este defecto los presentadores y colaboradores se someten a test de detección de coronavirus de forma continúa. Si uno de ellos da positivo tendrá que aislarse tanto él como su entorno.

Otro punto a favor es que los platós y los espacios televisivos cuentan con ventilación asistida, haciendo que el aire se renueve y que las condiciones de seguridad sean similares a las que se dan en el exterior,donde la acumulación de aerosoles es mucho más improbable.

"Además, los platós de televisión son muy grandes. Son techos de a lo mejor 10 metros, espacios muy grandes. Se puede comparar con estar en un exterior", argumenta Deborah García Vello, haciendo hincapié en las condiciones de seguridad de la televisión.

Por último, también hay que aclarar que el resto de trabajadores de las diferentes cadenas sí que usan mascarilla. Los técnicos de cámara y de sonido, los realizadores e incluso los redactores que se encuentran en otra localización siempre se la ponen. 

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