Problemas para Elon Musk: la demanda de Twitter podría llevar al multimillonario a prisión, según un experto en Derecho, y el sudafricano denuncia que la red social quiere acelerar el juicio

La tóxica relación entre Twitter y Elon Musk sigue más candente que nunca. La plataforma ha demandado al multimillonario sudafricano después de que este se echara para atrás en la compra de la red social por 43.000 millones que anunció el pasado mes de abril.

La compañía exige ahora a Musk que complete la transacción, ya que tienen un acuerdo vinculante. Por su parte, el fundador de Tesla se defiende alegando que Twitter no ha colaborado a la hora de entregar la información relativa a los bots que ha solicitado, y que ahora la compañía quiere acelerar el proceso judicial mientras él pide que se posponga hasta febrero de 2023.

Las acusaciones entre ambas partes han sido muy acaloradas esta semana. Desde que se conoció la intención de Musk de hacerse con la red social, ambas partes han estado sumidas en una intensa batalla en la que se han llegado a intercambiar los papeles.

Primero era Twitter quien no quería que el excéntrico multimillonario se hiciera con el control de la empresa. Ahora le demanda para que cumpla con el trato. Por otro lado, Musk ha pasado del entusiasmo al aburrimiento en apenas unos meses y ahora está haciendo todo lo posible por dilatar el cierre de la transacción.

En su demanda presentada contra Musk el 12 de julio, Twitter señala que el multimillonario se "negaba a cumplir con sus obligaciones" y que sus acusaciones sobre que proporcionaron datos engañosos sobre bots "carecen de mérito".

Si el multimillonario sigue su camino y se niega a comprar Twitter, se enfrenta a duras penas y sanciones, e incluso podría pasar un tiempo en prisión.

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La cárcel sería "el último recurso"

Robert Miller, profesor de Derecho con amplia experiencia en fusiones y adquisiciones y leyes relacionadas en el Tribunal de la Cancillería de Delaware, donde Twitter está demandando a Musk, asegura a Business Insider que la probabilidad de que el juez falle a favor de Musk en su argumento central, que Twitter está en incumplimiento porque se negó a entregar toda la información que Musk exigió es "el colmo de la inverosimilitud".

Según este experto, que Musk acabe entre rejas sería "el último recurso", pero no es algo imposible. El Tribunal de Cancillería está "revestido con poderes muy fuertes" para forzar el cumplimiento, señala Miller.

Es probable que el caso se resuelva rápidamente, probablemente antes de fines de octubre, cuando inicialmente se fijó el cierre de la adquisición y vencen ciertos acuerdos de financiamiento, apunta Miller. 

Si se le ordena a Musk que "desempeñe específicamente" de alguna manera, la capacidad de la corte de Delaware para forzar su mano es amplia. 

Miller asegura que sus poderes van desde declarar formalmente "en desacato" a Musk hasta tomar el control de sus acciones de Tesla, la compañía de automóviles eléctricos.

En ese caso, señala Miller, El Tribunal de Cancillería de Delaware está "expresamente" autorizado no solo a declarar en desacato a alguien por desobedecer una orden, sino también a encarcelarlo por hacerlo.

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Musk se defiende con uñas y dientes

Este viernes, Musk respondía a la demanda interpuesta por Twitter en una presentación judicial en la que acusa a la compañía de intentar apresurar su demanda y de no haber cumplido con sus obligaciones contractuales.

"Durante casi dos meses, el señor Musk ha buscado los datos y la información necesarios para 'realizar una evaluación independiente de la prevalencia de cuentas falsas o spam en la plataforma de Twitter'", recoge su respuesta.

"La repentina solicitud de Twitter de velocidad ultrarrápida después de dos meses de dilación y ofuscación es su táctica más reciente para ocultar la verdad sobre las cuentas de spam durante el tiempo suficiente para obligar a los demandados a cerrar", continúa el documento obtenido por The Washington Post.

La presentación del viernes marca la primera respuesta formal presentada en nombre de Musk. En ella, solicita que la fecha del juicio se establezca a partir del 13 de febrero de 2023, para dar tiempo a evaluar las afirmaciones de Twitter sobre la cantidad de bots en la plataforma.

Esta semana, cuando Twitter hizo público que había demandado al sudafricano y antes de que este respondiera formalmente ante la Corte, Musk escribió en su perfil de la red social: Oh, la ironía, lol".