La escasez de chips causa estragos en los fabricantes de automóviles: es posible que tu próximo coche venga sin pantalla táctil ni otras tecnologías

Si te comprases un nuevo SUV BMW X7 de 100.000 dólares (unos 87.000 euros), tendrías tres filas de asientos, un interior lujoso y muchos extras elegantes. Sin embargo, este vehículo no contaría con una de las piezas de tecnología más básicas que se ha vuelto omnipresente en los automóviles de nuevo cuño: una pantalla táctil.

Debido a la escasez mundial de semiconductores, hay pocos chips para repartir entre todos, lo que implica que BMW y otros fabricantes de automóviles han tenido que eliminar una serie de características tecnológicas familiares de sus modelos.

La marca de lujo alemana ha dejado temporalmente de construir pantallas táctiles en varios de sus modelos en un intento por mantener altos los volúmenes de producción. El parón incluye el Sedan Serie 3; Serie 4 cupé, Gran Coupé y convertible, y los populares SUV X5, X6 y X7. 

El anunció apareció en una noticia del foro especializado de BMW Bimmerfest, y la compañía confirmó esta decisión en un correo electrónico a Insider.

"La escasez global de chips continúa y afecta a los fabricantes de automóviles en todo el mundo. Estamos gestionando activamente la situación y estamos en estrecho contacto con nuestros proveedores", declaró un portavoz de BMW.

Como compensación, aquellos clientes que compren uno de los modelos de BMW sin pantalla táctil recibirán un crédito de 500 dólares (430 euros). No obstante, pueden utilizar el sistema de infoentretenimiento usando perillas y botones o control por voz.

La falta de chips de computadora obedece a un cóctel de factores que incluye los parones en la producción por el coronavirus y a una elevada demanda de teléfonos inteligentes y otros dispositivos de electrónica de consumo durante la pandemia.

La escasez de semiconductores ha obligado a los fabricantes de automóviles a recortar la producción y limitar las características tecnológicas de los vehículos que pueden fabricar.

Los automóviles nuevos pueden requerir más de 1.000 chips cada uno, y la escasez de suministros significa que algunas empresas han optado por guardar los que tienen para componentes críticos en lugar de funciones no esenciales.

Por su parte, General Motors está descartando temporalmente Super Cruise, una función que permite la conducción con manos libres en algunas carreteras, desde su SUV insignia Escalade, según informóMotor1 en septiembre. 

La compañía también pospuso el lanzamiento completo de la tecnología para los modelos Sedan CT4 y CT5 hasta 2022. A principios de 2021, GM comenzó a construir algunos camiones sin su función Active Fuel Management que mejora el ahorro de combustible, confirmó un portavoz a Insider.

Mitsubishi también está limitando la disponibilidad de monitoreo de punto ciego y algunas pantallas en el tablero, dijo la compañía a Consumer Reports. El fabricante de automóviles francés Peugeot reemplazó este año los indicadores digitales en uno de sus modelos por velocímetros analógicos de la vieja escuela.

Incluso ahora que el impacto de la pandemia comienza a reducirse en gran parte del mundo, los fabricantes de automóviles todavía no están fuera de peligro. 

De hecho, muchos expertos de la industria, como el CEO de Intel, pronostican que la escasez de chips se alargará hasta por lo menos hasta 2023. Otros dispositivos electrónicos elegantes podrían ser los próximos en recortar su presencia.