¿Cuándo pueden heredar los nietos? Estos son los casos que estipula la ley

Cuando una persona fallece, lo normal es que la herencia se reparta entre los hijos y el cónyuge, si es que los hay.

Pero en el caso de fallecimiento de una persona mayor que ha tenido hijos y nietos siempre surge la misma duda: ¿pueden heredar también los nietos?

Esta situación puede quedar totalmente clara si hay testamento, ya que el causante de la herencia puede indicar a qué descendientes van a parar sus bienes.

Es decir, además de la herencia legítima, que corresponde a hijos y a la persona que queda viuda, existe la opción de poner en el testamento que ciertos bienes se repartan entre los nietos.

Diferencias entre recibir un legado y una herencia: aspectos legales que debes conocer en cada caso

Sin embargo, es posible que no haya testamento, y que por lo tanto sea la ley la que estipule a quién corresponden los bienes en herencia.

En estos casos, los herederos legales siempre son los hijos y los padres. El siguiente en la línea es el cónyuge. Después vienen los hermanos, y acto seguido los sobrinos.

Además, se da una situación en la que los nietos heredarían parte de los bienes. 

A continuación, se detalla cuándo pueden heredar los nietos tras el fallecimiento de sus abuelos.

Casos en los que pueden heredar los nietos

Los herederos siempre son aquellos que mantenían un vínculo familiar más directo con el fallecido, por lo que resulta complicado que los nietos lleguen hasta este punto.

Para que los nietos se conviertan en herederos directos de sus abuelos, es necesario que los padres hayan fallecido, según explican desde Abogados y Herencias.

Es decir, cuando una persona fallece antes que su ascendiente, los herederos de dicha persona pasan a sustituirle.

Lo que hubiesen recibido los padres en caso de estar vivos, pasará de manera directa a los nietos. Así lo establece la ley. Se trata de una circunstancia que no se puede cambiar, salvo que se desherede a los nietos previamente.

Los nietos sólo pueden recibir la parte que correspondía a su progenitor. En caso de que haya varios nietos, la herencia se repartirá de forma equitativa entre todos.

Este derecho se contempla en línea recta descendente. Es decir, abuelos, hijos y nietos. No se puede hacer al revés o en recta ascendente.

Debido a este motivo, en caso de fallecimiento del progenitor, los nietos tienen más derechos hereditarios que la línea ascendente.

Por último, el abuelo que quiera favorecer a sus nietos en la herencia debe utilizar el tercio de libre disposición. En ningún caso se les puede dejar la legítima. 

Para asegurar que esta voluntad se cumple será necesario aplicar los cambios ante notario.