Coacción

Un jefe amenaza a una empleada
  • El delito de coacción se comete cuando una persona impide a otra que haga algo que la ley permite, habitualmente utilizando la violencia.
  • Estas son las características del delito de coacción y las penas impuestas.
  • Si quieres entender cómo funciona la economía, la tecnología, el mundo empresarial y descubrir el significado de la mayoría de conceptos que escuchas cada día, no te pierdas nuestra sección Qué es.
  1. ¿Qué es un delito de coacción?
  2. Características de la coacción
  3. Tipos de coacción
  4. Casos en los que la coacción es legal
  5. Penas en los delitos de coacción
  6. Ejemplos: casos prácticos para entenderlo mejor

¿Qué es un delito de coacción?

La coacción es un delito que se produce cuando una persona utiliza la violencia para evitar que otra cometa una acción legal.

También sería delito de coacción cuando se obliga a otra persona a hacer algo que no quiere o que está prohibido, siempre usando métodos intimidantes o violentos.

Las coacciones se regulan en el artículo 172 del Código Penal. Tienen unas características concretas para que se consideren como tal, y también hay diferentes tipos de coacción.

Características de la coacción

Para que un hecho se considere coacción debe cumplir con una serie de requisitos.

Estas son las características principales de la coacción:

  • Impedimento de realizar una conducta que está permitida por la ley.
  • Debe existir una acción intimidante o violenta, aunque no necesariamente física.
  • La víctima debe considerarse amenazada por un mal factible.
  • También se considera coacción cuando una persona obliga a otra a hacer algo que no quiere.
  • La víctima no está prestando su consentimiento para llevar a cabo la acción a la que le obligan.

Tipos de coacción

No existe un solo tipo de coacción. Hay diferentes modalidades a tener en cuenta para comprender mejor este hecho delictivo.

Estos son los tipos de coacción más habituales:

  • Tipo agravado de coacción: se trata de uno de los más graves, pues la coacción impide realizar un derecho fundamental de la víctima. Este sólo se aplica si no existe un tipo más concreto.
  • Coacción leve: se considera leve cuando la violencia utilizada es menor o la gravedad de la acción no es tanta como en el tipo agravado, aunque resulta complicado de delimitar. 
  • Coacción en la violencia de género: cuando una persona realiza la coacción hacia su esposa, su mujer, su pareja o aquella que la haya sido anteriormente.
  • Tipos específicos de coacción: existen diferentes coacciones en este grupo, ya que se recogen aquellas que pueden delimitarse en algo concreto, como la coacción a un menor de edad o en una persona debido a su profesión.
  • Acoso: el acoso se considera coacción cuando hay vigilancia sobre la víctima, uso de sus datos personales o perjudica a su libertad de cualquier forma.

Casos en los que la coacción es legal

La coacción en la mayoría de situaciones es ilegal y supone un delito. Sin embargo, hay casos en los que está amparada por la ley.

Estas son las coacciones legales:

  • La que realiza la policía en casos justificados.
  • La de los padres a sus hijos.
  • Una persona con graves problemas mentales que es internada en contra de su voluntad.
  • Tratamientos médicos que se aplican de forma obligatoria.

Esto no significa que aquellos que realizan la coacción puedan sobrepasarse. Por ejemplo, un padre no puede utilizar la violencia sobre sus hijos. 

Penas en los delitos de coacción

Uno de los aspectos más importantes del delito de coacción es conocer las penas que se imponen.

Esto depende de tipo de coacción que se ha cometido:

  • Tipo agravado de coacción: la pena de cárcel es de 2 años, con una multa económica de hasta 24 meses.
  • Coacción leve: la pena de multa es de uno a 3 meses, sin que exista pena de cárcel.
  • Coacción en la violencia de género: penas de prisión de 6 meses a un año, además de trabajos en beneficio de la comunidad de hasta 80 días.
  • Tipos específicos de coacción: dependerá del caso, pero pueden ser de hasta 2 años de cárcel.
  • Acoso: la pena de prisión es de 3 meses a 2 años, mientras que la multa es de 6 a 24 meses.

Todos estos castigos pueden agravarse si el delincuente portaba armas, realizó los hechos en presencia de un menor de edad o la coacción se enmarcaba dentro de la violencia de género.

Ejemplos: casos prácticos para entenderlo mejor

Comprender en qué consiste el delito de coacción puede ser complicado, de ahí que resulte necesario ilustrar con un ejemplo.

Este es un caso típico de delito de coacción:

  • Una mujer empieza una relación de pareja con un hombre. Al principio no hay problemas, pero poco a poco el hombre se va mostrando más celoso.
  • Llega un momento en el que el hombre intenta convencer a la mujer para que no salga por la noche con sus amigas, tratando de persuadirla.
  • La mujer no hace caso y continúa saliendo con su grupo de amigas. El hombre reacciona mediante una amenaza: si vuelve a salir con ellas le pegará una paliza, e incluso le muestra un cuchillo para asustarla.
  • La mujer se queda en casa y decide no hacer uso de su libertad para salir. El hombre finalmente no cumple sus amenazas, pero ella acaba denunciando tras ser aconsejada por sus amistades.
  • El caso llega a manos de un juez, que rápidamente considera que se trata de un delito de coacción enmarcado en la violencia de género, utilizando además un arma blanca para amenazar.
  • No ha existido una acción física violenta hacia la mujer, pero sí que ha habido amenazas e intimidaciones para que no ejerza sus derechos, por lo que se trata de un delito de coacción.
  • La condena sería en principio de un año de cárcel, pero se añade el agravante de la violencia de género y el de portar un arma, por lo que el juez puede imponer una condena superior a 2 años.
  • El hombre no tiene antecedentes penales, pero como ha recibido una condena superior a 2 años tendrá que entrar en prisión.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.