¿Quiénes son los gigantes de la vivienda en España? CaixaBank, Testa o Lazora aumentan su peso y ya tienen casi 100.000 pisos de alquiler

Desde su llegada al Gobierno de coalición, Unidas Podemos colgó una diana con una imagen de los llamados fondos buitre. Según la formación morada, estas empresas eran responsables de la subida astronómica de los alquileres en ciudades como Madrid o Barcelona.

Con la aprobación de la nueva ley de vivienda, la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, se felicitó de al fin pararle los pies a estos fondos. En aquellas comunidades o ayuntamientos en las que se declaren zonas tensionadas, los grandes propietarios tendrán que ajustar el precio del alquiler por debajo de un umbral fijado por la administración.

Es verdad que los grandes fondos han aumentado sus compras y construcción de pisos para ponerlos en alquiler. Pero la bolsa de viviendas en su poder es exigua si se la compara con el parque de viviendas total en España. 

De las más de 2,4 millones de viviendas que hay en alquiler en España, el 95,6% está en manos de particulares y pequeñas sociedades. Una imagen que da una idea de la escasa profesionalización del mercado de alquiler en España y del margen de presión de precios que tienen los grandes fondos, menor del que muchos piensan.

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Hace unos años, CBRE calculaba que un 3% de los pisos en alquiler estaban en manos de grandes empresas. Hoy, el porcentaje ha aumentado al 4,4%, según un informe de la consultora Atlas Real Estate Analytics.

"Supone un ligero incremento sobre el 4,2% estimado en 2021, como consecuencia de una fuerte actividad inversora a lo largo del año", apuntan desde Atlas Real Estate.

CaixaBank, Testa, Lazora, Ares, AXA... En total, 14 empresas, más la Sareb, gestionan casi 100.000 inmuebles. CaixaBank cuenta con 25.000 viviendas, seguida de Testa Home, propiedad de Blackstone, con otros 20.000 inmuebles.

En tercera posición está la Sareb, el llamado banco malo, encargado de gestionar los inmuebles de los bancos rescatados. Sareb tiene 14.583 pisos, entre activos en alquiler y otros que destinará como alquiler social según un acuerdo al que llegó con el Gobierno.

Lazora, promotora de pisos en alquiler creada por la gestora Azora tiene otros 9.000 activos, y el fondo Ares 7.000 inmuebles.

De estas cerca de 100.000 viviendas en alquiler (98.639, para ser exactos), un 57% están en Madrid y sólo un 11,5% se encuentran en el área metropolitana de Barcelona, calculan desde la consultora. 

La razón de que Madrid concentre más de la mitad de estas viviendas (56.224, en total), es simple: es la capital de España y uno de los mercados más dinámicos para alquilar vivienda, por la alta movilidad de trabajadores, estudiantes o turistas. 

En cambio, en Barcelona los grandes fondos sólo tendrían 11.343 pisos. El recelo de los inversores ante las políticas del Ayuntamiento de Barcelona ha podido frenar la inversión en el residencial en alquiler en la Ciudad Condal, y explicarían la brecha entre Madrid y Barcelona. Desde la Asociación de Propietarios de Viviendas en Alquiler (Asval) han advertido de que políticas como el control de precios en Barcelona provocarían una huida de inversores.

¿Quién controla el mercado en grandes capitales?

Si ponemos la lupa en grandes capitales, de hecho, la postal cambia un poco, aunque la balanza continúa inclinada en favor de los pequeños propietarios. 

En Madrid, el 41% de los pisos en alquiler está en manos de empresas, frente a un 58% de viviendas gestionadas por personas físicas. En Barcelona, más de lo mismo: el 44% de los pisos los poseen empresas y un 53% pequeños propietarios, según Atlas Real Estate.

La presencia de empresas es todavía menor en otras grandes capitales. En Valencia, sólo un 27% del mercado lo controlan las empresas, frente a un 73% de los inmuebles propiedad de personas físicas. En Sevilla, las empresas tienen un 45% del mercado, frente a un 51% los pequeños propietarios.