¿Quieres que te suban el sueldo? Esto es lo que no debes hacer

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Dicen que el dinero no da la felicidad, pero siempre es mejor llorar en un Ferrari. Por esa razón es esencial saber cómo negociar tu sueldo cuando entras en una empresa nueva.

Para motivarte te diremos que, en el caso de que no lo hagas, las estadísticas demuestran que, a lo largo de nuestra vida, podríamos perder entre 1 y 1,5 millones de euros. Sorprendente, ¿verdad?

Al no ser una cosa especialmente sencilla lo más normal es que pidamos consejo a algún amigo, familiar o experto para que nos ayude a poner en práctica nuestras dotes de negociación.

Sin embargo, algunos de los consejos más comunes pueden hacer que fracasemos en nuestro intento.

Por eso, hoy te mostramos qué es lo que nunca debes hacer para negociar tu sueldo.

1. Pregunta a compañeros de otras empresas y averigua cuánto cobran

Compañeras de trabajo

En el mejor de los casos, las respuestas que te den nunca serán del todo reales. De hecho, nunca sabrás si tus compañeros de profesión son del todo honestos o si estás comparando sueldos bajo el mismo baremo (títulos, máster, responsabilidades...).

La manera más precisa de saber qué es lo que se paga en un puesto similar al que te ofrecen es echar un vistazo a la guía salarial de Hays.

2. Está bien volver a negociar tu sueldo después de aceptar una primera oferta

negociar salario

Las negociaciones se acaban cunado has llegado a un acuerdo. Es cierto que podrás reunirte con tus jefes más adelante una vez estés dentro de la empresa, pero no justo después de haber aceptado una cifra.

En su lugar piensa en renegociar tu salario cuando hayas cerrado un cliente importante o después de haber trabajado en tu misma posición durante uno o dos años.

3. Tienes que hablar sobre tu historia salarial si te preguntan

Curriculum Vitae

No, no tienes que hablar con el reclutador sobre tu historia salarial, aunque te pregunte específicamente por ello. De hecho, en muchos países es ilegal que te pidan esa información.

4. No negocies, coge lo que te ofrezcan

Apretón de manos

Optes al puesto que optes, siempre debes negociar (aunque te ponga nervioso). Sin embargo, eso no es una excusa para no luchar por tu sueldo, por pequeño que sea.

Esto te ayudará a coger práctica para un futuro.

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