Ramón Aragonés, CEO de NH Hotel Group: "Si no se controla la inflación, vamos a tener un problema"

El levantamiento de las restricciones a partir del segundo trimestre del año, sobre todo en los países europeos, permitió a las cadenas hoteleras españolas acelerar la recuperación e impulsar sus números y su actividad mes a mes. 

NH Hotel Group presentó el mes pasado sus cuentas del tercer trimestre de 2021 que reflejan una reducción interanual de las pérdidas del 61,1%, hasta 29,7 millones de euros.

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Entre julio y septiembre, NH ingresó 273,5 millones de euros, un 84,2% por encima del mismo periodo de 2020 y un 78% más que los 153,6 millones de euros obtenidos en el segundo trimestre de 2021.

La cadena hotelera controlada por el grupo tailandés Minor pudo alcanzar el pasado julio "el punto de inflexión", tras muchos meses sin poder visibilizar cuándo comenzaría la recuperación. 

"Lo que hicimos fue adecuar la estructura de costes a la evolución del negocio y proteger la caja, que era lo importante", señala Ramón Aragonés, CEO de NH Hotel Group, en una entrevista con Business Insider España.

El férreo control de costes impuesto por la compañía ha limitado a 28 millones de euros la inversión en mejoras (capex) de establecimientos durante los 9 primeros meses del año, política que se mantendrá en los próximos trimestres.

La electricidad, un sobrecoste difícil de asumir

En cuanto al coste de la luz, que semana tras semana bate récords históricos y pasa factura al consumidor final y a las empresas, Aragonés señala que es un sobrecoste que será "difícil de asumir". 

Un gran impacto en sus cuentas pese a que habían negociado los precios en la subasta para 2 años, con lo que tenían prácticamente el 80% del suministro eléctrico cubierto.

"Esto impacta directamente a mi actividad, pero me impacta también a través de mis proveedores de servicios de todo tipo, porque a ellos se les incrementan los costes y lógicamente lo repercuten en los servicios que me prestan a mí. Todo me sale más caro, absolutamente todo", afirma el empresario.

Según Aragonés, los proveedores les están repercutiendo entre un 5% y un 20% de sobrecostes: "En temas como los materiales de construcción, cualquier presupuesto que hicieras hace 6 meses no vale para nada, porque todo se ha encarecido. Es terrorífico. Si no se controla la inflación, vamos a tener un problema. Aunque puede ser coyuntural y se puede ir reconduciendo, de momento no está pasando".

Aragonés afirma que esto acaba afectado a los niveles de rentabilidad de las compañías: "Los precios de nuestros hoteles van en función de la demanda y el cliente tampoco es estúpido, tiene muy claro lo que quiere pagar".

A través de los buscadores, puede ver si el precio que se le está pidiendo es acorde con el mercado o no, apunta. "Hoy en día somos terriblemente transparentes. Por tanto, todo esto no va a ayudar a la rentabilidad del sector", añade.

El gasto en personal cae en el acumulado del año

El coste de personal es, no obstante, la principal fuente de gasto de la compañía, que destinó a esta partida 215 millones de euros entre enero y septiembre, periodo en el que facturó 489 millones.

En los primeros 9 meses del año, los gastos de personal cayeron un 14,1%. Sin embargo, si se compara el tercer trimestre de 2021 con el mismo periodo del año pasado, crecieron un 29,4%.

El descenso en 2021 se explica, principalmente, a los ajustes temporales de empleo (ERTE) realizados, así como por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) acordado con los sindicatos el pasado marzo y que afectó a 187 personas de servicios centrales.

"Quedan algunos empleados en ERTE, pero cada vez menos, por los niveles de actividad", señala Aragonés.

Preguntado por el tamaño de la plantilla, afirma que no puede dar cifras concretas porque "el número fluctúa", ya que parte del negocio, como la restauración y las camareras de piso, está externalizado. 

En 2019, la compañía contaba con 3.600 trabajadores en España, según las cuentas depositadas en el Registro Mercantil.

Aunque la externalización en colectivos como el de las camareras de piso ha generado polémica en los últimos años, Aragonés asegura a Business Insider España que, para ellos, no se trata de una cuestión de ahorro.

"Lo hacemos por temas de eficiencia, lo que nos permite poder adaptarnos a las necesidades del hotel. No somos un negocio de actividad estable, sino variable", apunta. "Nos interesa mucho poder adaptar los niveles de ocupación a los costes operativos y a la productividad. Creo que es un modelo que funciona bien y con el que estamos contentos", subraya.

"El marco laboral debe permitirnos tener trabajadores temporales"

Aunque considera que los ERTE fueron una buena medida por parte del Gobierno –"a todos les interesaba que hubiera esa flexibilidad"–, las tornas cambian cuando se trata de la reforma laboral. 

"Siempre digo que no toques lo que va bien. Entonces, ¿para qué vamos a tocar la reforma laboral que ha creado puestos de trabajo, que en nuestro sector es absolutamente imprescindible y que nos permite variabilizar los costes?", señala.

Preguntado por qué espera que pase a partir de ahora, sabiendo que sí va a tocarse, Aragonés apela al sentido común.

"Hay cosas mejorables, sin duda, pero sobre todo nos tiene que permitir a las empresas del sector poder tener trabajadores temporales, porque el negocio es discontinuo. Si el negocio es discontinuo y tienes trabajadores no temporales, no hay negocio. Creo que esto lo entiende todo el mundo. Pero vamos a ver cómo termina", explica. 

Pese a ello, asegura, eso no tiene que ir contra ningún derecho: "Puede ser perfectamente compatible si se hace bien, pero lo que no puedes pretender es dinamizarlo todo y luego estar atado de pies y manos por una legislación que no te deja moverte".