Reducir la carne y los lácteos de tu dieta puede alargar tu vida más de una década, según un estudio

Getty Images
- Eres lo que comes, y hacer algunos cambios en tu dieta puede alargar considerablemente tu esperanza de vida.
- Un estudio publicado esta semana en la revista PLOS Medicine revela que reducir la carne roja, procesados y lácteos, y aumentar los frutos secos, verduras, legumbres o granos integrales podría estirar tu vida 13 años más.
- Siguiendo una dieta óptima a partir de los 20 años, una mujer podría vivir 10 años más y un hombre, 13.
- Comienza el día bien informado con la selección de noticias de Business Insider España: suscríbete gratis aquí.
Las elecciones saludables a la hora de confeccionar tu menú diario influyen mucho en la prevención de enfermedades, en tu bienestar y salud mental, y también en tu esperanza de vida.
Según una nueva investigación publicada en PLOS Medicine, realizar algunos cambios en tu alimentación puede alargar con creces tu longevidad. Si adoptas esta perspectiva saludable cuando eres joven, podrías incluso añadir 13 años a tu vida.
La dieta occidental típica tiende al exceso de carnes rojas y alimentos procesados, mientras que la mediterránea cuenta con todas las claves para alargar la esperanza de vida: la grasa saludable del aceite de oliva y los frutos secos, granos integrales, frutas y una gran variedad de hortalizas frescas.
Las conclusiones se extraen del estudio Global Burden of Disease, una base de datos que rastrea 286 causas de muerte, 369 enfermedades y lesiones, y 87 factores de riesgo en 204 países y territorios de todo el mundo para modelar el efecto de los cambios en la dieta.
Centrándose en metaanálisis recientes del efecto de comer varias cantidades de tipos de alimentos particulares, combinaron los hallazgos con datos sobre la mortalidad global y lo que la gente come actualmente. Así, se estimaron las consecuencias de un cambio permanente en la dieta.
El modelo alimenticio se ha transformado en una herramienta online pública llamada calculadora Food4HealthyLife, y a la que puedes acceder pulsando aquí.
Una década adicional de vida gracias a la dieta

Vitalii Pavlyshynets/Unsplash
Si se comienza a poner en práctica una dieta óptima a partir de la veintena, una mujer podría incrementar su esperanza de vida en 10 años y un hombre, en 13.
Sin embargo, nunca es tarde para empezar: una mujer que comienza a los 60, podría sumar 8 años extra a su vida, 9 en el caso de los hombres.
Una dieta principalmente basada en plantas podría incluso funcionar para personas de 80 años, ganando alrededor de 3,5 años con la modificación de los hábitos alimenticios. Según la investigación, los alimentos que más contribuyen a alargar la esperanza de vida son las legumbres, los granos integrales y los frutos secos.
Al combinar los carbohidratos complejos con proteínas de calidad, grasas sanas, vitaminas, minerales y antioxidantes, existe un menor riesgo de enfermedades crónicas. Numerosos estudios previos han subrayado el vínculo existente de las carnes rojas, embutidos y procesados con cáncer de intestino y enfermedades coronarias.
Para sustituir la carne puede optar tanto por el pescado —cuyo consumo recomendado es de 2 o 3 raciones por semana— o por fuentes de proteína vegetal como soja, frutos secos, garbanzos, alubias, tofu, quinoa o verduras ricas en proteínas como el brócoli.

Our World in Data
“La extensión estimada de la vida se debe principalmente a una reducción en el riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y cáncer”, dice a New Sciencist Lars Fadnes, de la Universidad de Bergen en Noruega.
Además, las dietas basadas en plantas evitan la crueldad animal y son más beneficiosas para el medio ambiente, ya que tienen una huella de carbono sustancialmente menor en comparación con la dieta omnívora.
"Las extensiones estimadas se basan en promedios y no deben tomarse como pronósticos individualizados", apunta Fadnes. "Hay muchas incertidumbres, incluidos los efectos de los huevos, la carne blanca y los aceites, sin mencionar otros factores de riesgo y el estilo de vida".
Existen otros factores a considerar, como el metabolismo de las personas, la forma de procesar los alimentos o las futuras mejoras en los tratamientos médicos.
Otros artículos interesantes:
Descubre más sobre Andrea Núñez-Torrón Stock autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en BusinessInsider.