El simple gesto de reemplazar la sal por un sustituto bajo en sodio y rico en potasio podría evitar millones de muertes en todo el mundo, según un estudio

poner sal en las comidas
  • Reemplazar la sal de mesa por un "sustituto de la sal" bajo en sodio y rico en potasio reduce significativamente las tasas de accidente cerebrovascular, ataque cardíaco y muerte prematura.
  • Así lo muestran los resultados de uno de los estudios de intervención dietética más grandes realizados, que involucró a más de 20.000 personas durante casi 5 años.
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Es un gesto habitual de las cocinas. Poner un poco de sal para potenciar el sabor de un plato.

Pero todo el mundo sabe que pasarse con el salero conlleva serios riesgos. El exceso de sal está relacionado con el aumento de la hipertensión y por tanto con problemas cardiovasculares.

Bueno más bien,  el exceso de sodio, mineral que tu cuerpo absorbe principalmente de la sal.

Al mismo tiempo, una ingesta insuficiente de potasio también puede tener un efecto negativo sobre la presión arterial.

Esto se debe a que cuando la cantidad de potasio es baja, el cuerpo tiende a acumularlo. El problema es que con ello también almacena sodio, lo que a su vez puede conllevar un aumento en la presión arterial haciendo que el corazón trabaje más y derivando en serias enfermedades.

Se estima que cada año se podría evitar 2,5 millones de fallecimientos si el consumo de sal a nivel mundial se redujera al nivel recomendado. Menos de 5 gramos (algo menos que una cucharilla de té) de sal por día, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Un problema que podría ayudar a resolver un gesto tan sencillo como remplazar la sal de mesa por un sustituto bajo en sodio y rico en potasio, de acuerdo a un reciente estudio.

Usar un sustituto de sal redujo el riesgo de accidente cerebrovascular en un 14%

Liderado por el epidemiólogo clínico Bruce Neal del Instituto George para la Salud Global en Australia, el ensayo analizó durante casi 5 años a más de 20.000 personas de unas 600 aldeas chinas.

La edad media de los participantes fue de 65,4 años, el 49,5% eran mujeres, el 72,6% tenía antecedentes de accidente cerebrovascular y el 88,4% antecedentes de hipertensión.

Durante el transcurso de la investigación, la mitad de los participantes recibió un sustituto de sal, (bajo en sodio y rico en potasio), para cubrir los requisitos tanto de conservación de alimentos como para cocinarlos (aproximadamente 20 gramos por persona al día). Mientras, el grupo de control continuó usando sal para su alimentación como siempre había hecho.

Tras casi 5 años, las tasas de accidente cerebrovascular, eventos cardiovasculares importantes y muerte por cualquier causa fueron más bajas con el sustituto de reemplazo que con la sal, mostraron los hallazgos, publicados recientemente en The New England Journal of Medicine.

Durante un seguimiento se registraron más de 3.000 accidentes cerebrovasculares, más de 4.000 fallecimientos, y más de 5.000 eventos cardiovasculares graves.

Para el grupo que usó el sustituto de la sal, el riesgo de accidente cerebrovascular se redujo en un 14%, los eventos cardiovasculares totales (accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos combinados) en un 13% y de muerte prematura en un 12%.

Los investigadores apuntan que sus resultados confirman estudios previos en China, que sugirieron que las sustituciones de sal a nivel nacional podrían salvar la vida de unas 400.000 personas cada año— simplemente previniendo muertes prematuras relacionadas con los efectos en la salud del consumo excesivo de sodio—.

"Casi todo el mundo come más sal de la que debería. Si se cambiara la sal por un sustituto de la sal a nivel global, se evitarían varios millones de muertes prematuras cada año", explica Neal en un comunicado.

No obstante, cabe tener en cuenta que la alimentación de estas zonas rurales chinas varía significativamente a la seguida por muchas personas en Occidente — con una tendencia mayor al consumo de procesados—.

Si bien el sodio se encuentra de manera natural en ciertos alimentos como la leche, o la carne, es significativo su contenido en ultraprocesados y condimentos.  Tener en cuenta esto es importante también para evitar excederse en su ingesta. 

Otros gestos sencillos que pueden ayudar a tomar menos sal es primar una dieta basada en alimentos frescos y consultar siempre en la etiqueta el contenido de sal que incorpora cada producto, escogiendoel que menos cantidad incorpore.

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