Reforma laboral: estos son los nuevos contratos formativos con los que el Gobierno pretende reducir la temporalidad del empleo

Trabajador en la fábrica de Sear
  • La reforma laboral aprobada por el Gobierno el pasado 23 de diciembre recoge una relevante modificación en los contratos formativos.
  • El objetivo es conseguir que estos contratos tengan una mayor definición y causalidad, reduciendo así su elevada temporalidad.
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El Gobierno aprobó la reforma laboral el pasado 23 de diciembre, cumpliendo así el objetivo de conseguir ponerla en marcha antes de que termine el año.

El acuerdo ha llegado después de 9 meses de negociaciones entre Gobierno, sindicatos y patronal; finalmente se ha alcanzado el consenso de todas las partes.

Esta nueva norma modifica varios aspectos del Estatuto de los Trabajadores, especialmente aquellos que afectan a la duración de los contratos y a la negociación colectiva.

El objetivo es limitar los contratos temporales e impulsar los indefinidos, pues España es el país líder en Europa en lo que se refiere a la temporalidad en el trabajo.

Los datos hablan por sí solos: la tasa de trabajadores temporales en España es del 24,7%, mientras que la media europea se sitúa en el 13,6%.

Para ello, la reforma laboral propone que el contrato por excelencia sea el indefinido, y además modifica los contratos formativos para que algunas empresas no abusen de su utilización.

La anterior reforma laboral, aprobada en 2012 por el Gobierno de Mariano Rajoy, contemplaba que los contratos formativos pudiesen firmarlos trabajadores de entre 16 y 25 años que no tuviesen una cualificación concreta.

Esto cambia y se estipulan 2 contratos con condiciones algo más definidas: el de formación dual y el de práctica profesional.

Contrato de formación dual

La edad máxima para celebrar este tipo de contratos será de 30 años, y además el trabajador va a tener que disponer de un tutor que le guíe durante toda esta etapa.

De este modo, la reforma laboral quiere impulsar que los trabajadores que se acogen a este tipo de contrato adquieran los conocimientos necesarios para su formación y posterior carrera.

La duración será de un mínimo de 3 meses y de un máximo de 2 años, impidiendo así que estos trabajadores puedan estar durante un tiempo largo en dicha situación.

Contrato de obtención de práctica profesional

Este contrato va a depender del nivel de estudios que posea el trabajador, así que tendrá diferencias según la cualificación sea mayor o menor.

En cualquier caso, el contrato para la adquisición de la práctica profesional va a tener una duración mínima de 6 meses y una máxima de 12; ningún trabajador podrá estar más de un año en esta situación.

La reforma laboral también va a concretar qué actividades, puestos de trabajo o grupos profesionales tienen derecho a ofrecer este tipo de contrato.

El contrato de obtención de práctica profesional siempre se va a suscribir dentro de los 3 primeros años de formación, exceptuando a los trabajadores con discapacidad, que tendrán un margen de 5 años.

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