Primeros resultados alentadores de ALTO-100, un nuevo fármaco para la depresión

En 2019, el doctor Amit Etkin decidió abandonar la Universidad de Stanford para buscar una nueva forma de tratar trastornos psiquiátricos como la depresión y el trastorno de estrés postraumático (TEPT)A.

Mientras que la mayoría de los tratamientos para estos problemas de salud mental se desarrollaron para tratar a amplias franjas de personas, Etkin cree que hay una manera más eficiente de curar a los pacientes. 

Su propósito parte de la medicina de precisión, y busca desarrollar fármacos que ayuden a grupos de pacientes con subtipos de una enfermedad psiquiátrica.

En 2019 fundó Alto Neuroscience, una empresa privada de biotecnología que utiliza mediciones biológicas —llamadas biomarcadores— para desarrollar fármacos para enfermedades mentales como la depresión y el TEPT. Los biomarcadores se han puesto de moda recientemente como una forma para que las empresas desarrollen tratamientos a medida para la depresión y otras afecciones.

"El modo en que desarrollamos los fármacos y los aplicamos en la clínica no presupone nada sobre el paciente", destaca Etkin.

Según este doctor, los resultados de los ensayos clínicos de Alto son "los primeros de una serie de estudios y esfuerzos" para cambiar este enfoque. 

El pasado martes, la startup anunció que uno de sus medicamentos, ALTO-100, muestra signos prometedores de que podía ayudar a las personas con trastorno depresivo mayor. Los resultados se dieron a conocer en un comunicado de prensa y procedían de un ensayo intermedio en el que no se comparó ALTO-100 con un placebo, por lo que aún queda trabajo por hacer.

En el ensayo, Alto separó a los pacientes en grupos con mala y buena cognición, basándose en una prueba desarrollada por la empresa, anota Etkin.

La hipótesis de la compañía es que ALTO-100 ayudaría más al grupo con mala cognición, y eso es lo que ocurrió en el ensayo. Los síntomas de depresión de estos pacientes mejoraron más que los del otro grupo que recibió el fármaco.

El ensayo también probó el ALTO-100 en personas con TEPT, aunque la empresa todavía no ha comunicado los resultados.

En declaraciones a Business Insider. Rebecca Strawbridge, profesora del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia del King's College de Londres, afirma que los resultados siguen siendo inciertos porque el estudio era pequeño y no tenía un placebo.

En su opinión, el estudio parece "mostrar resultados alentadores para avanzar hacia un enfoque terapéutico más personalizado de la depresión, en el sentido de que las personas que habían sido señaladas como más propensas a responder sí respondieron mejor a la intervención".

La startup informa de que este mes también ha iniciado un estudio más amplio de ALTO-100, que incluirá un placebo. Los resultados de dicho ensayo clínico verán la luz en el primer trimestre de 2024, lo que significa que convertir ALTO-100 en un medicamento aprobado está todavía, en el mejor de los casos, a bastantes años de distancia.

Además, Alto tiene previsto realizar varios ensayos intermedios con diversos medicamentos en 2024.

"Ese será realmente el año de nuestros resultados en psiquiatría de precisión", pronostica para Business Insider.