Ryanair pierde 273 millones de euros entre abril y junio, un 47% más que hace un año, pese a una recuperación significativa del tráfico

La aerolínea de bajo coste Ryanair ha presentado este lunes los resultados de su primer trimestre fiscal que concluyó en junio.

La irlandesa perdió entre abril y junio 273 millones de euros, en comparación con los 185 millones que perdió durante el mismo periodo de 2020. 

Aunque el tráfico se recuperó significativamente en comparación con el primer trimestre del año y pasó de 0,5 millones a 8,1 millones de pasajeros (con un factor de ocupación del 73%), la cancelación del tráfico de Semana Santa y el retraso en la relajación de las restricciones gubernamentales a los viajes en toda la Unión Europea en mayo y junio requirieron una importante estimulación de los precios, señala en el comunicado la compañía que dirige Michael O’Leary. 

En cuanto a sus ingresos, la aerolínea ha asegurado que aumentaron casi un 200%, hasta los 371 millones de euros en el primer trimestre –frente a los 125 millones de hace un año–, debido a la mayor facturación de servicios complementarios como el embarque prioritario o la reserva de asientos, que generaron aproximadamente 22 euros por pasajero.

Los costes de explotación aumentaron un 116%, hasta los 675 millones de euros, impulsados principalmente por los costes variables, como el combustible, las tasas de aeropuerto y manipulación y las tasas de ruta. Las necesidades de combustible del Grupo están cubiertas en algo menos del 60% para el ejercicio 22, a 565 dólares por tonelada métrica.

En este primer trimestre fiscal, Ryanair redujo la deuda neta hasta los 1.660 millones de euros (a final de marzo era de 2.280 millones de euros). 

Estas son las principales cifras de los resultados del primer trimestre fiscal:

• Pérdidas: 273 millones de euros, en comparación con los 185 millones que perdió durante el mismo periodo de 2020 .
• Ingresos: 371 millones de euros, un 196% más que los 125 millones de euros que obtuvo entre abril y junio de 2020.
• Deuda neta: 1.660 millones de euros.
• Liquidez: 4.000 millones de euros.

Buenas previsiones tras su año más difícil

Ryanair registró en su pasado ejercicio fiscal 2020-2021 (cerrado el 31 de marzo de 2021) unas pérdidas netas de 815 millones de euros, frente al beneficio neto de 1.002 millones obtenido en el ejercicio anterior. 

Pese a admitir que fue el año “más difícil” en sus 35 años de historia, y los primeros números rojos de la compañía desde 2009, la aerolínea ve señales claras de “una fuerte recuperación".

La compañía considera que este año fiscal sigue siendo un reto por la incertidumbre que provocan las constantes restricciones a los viajes. Pese a ello, el levantamiento de ciertas medidas, especialmente para las personas vacunadas, han llevado al Grupo a ver cómo las reservas del segundo trimestre fiscal se recuperan con fuerza (aunque con tarifas bajas). 

"La puesta en marcha el 1 de julio de los Certificados Digitales Covid de la UE y la supresión de la cuarentena para las llegadas al Reino Unido vacunadas a partir de mediados de julio han provocado un aumento de las reservas en las últimas semanas. Los precios siguen estando por debajo de los niveles anteriores al COVID-19 y los clientes de Ryanair seguirán disfrutando de un gran valor al viajar este verano mientras nos centramos en recuperar el tráfico, el empleo y el turismo en nuestra red europea", señalan en el comunicado. 

"Si, como se prevé actualmente, la mayor parte de la población adulta de Europa está totalmente vacunada para septiembre, creemos que podemos esperar una fuerte recuperación del transporte aéreo para la segunda mitad del año fiscal, como ocurre actualmente en el transporte aéreo nacional de Estados Unidos", aseguran.

Ryanair espera que el resultado para el ejercicio 2021-2022 se sitúe entre una pequeña pérdida y el punto de equilibrio, lo que dependerá de la continuación del despliegue de las vacunas este verano y de que no se produzcan cambios adversos en las variantes del COVID-19, aseguran.

Ryanair dará un hachazo a los vuelos de invierno en España si suben las tasas aeroportuarias

Durante el primer trimestre, la aerolínea ha seguido trabajando con sus socios aeroportuarios en toda Europa y ha negociado costes aeroportuarios más bajos, incentivos de recuperación y la ampliación de muchos acuerdos de crecimiento de aeropuertos de bajo coste. 

Ryanair afronta para este verano de 2021 el mayor despliegue de vuelos domésticos de su historia, y no solo pretende recuperar la normalidad anterior a la pandemia, sino que su ambicioso propósito para 2026 es llegar de forma orgánica a los 200 millones de pasajeros en todo el mundo. 

Sin embargo, de cara a la próxima temporada de invierno, Ryanair podría cambiar su programación y reducir los vuelos en España. 

La razón para motivar este cambio sería la subida del más del 5% en las tasas aeroportuarias que propone Aena para los próximos 5 años, en lugar del de la rebaja del 2% que ha dictaminado la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en su informe no vinculante. Si el incremento entra finalmente en vigor, la aerolínea irlandesa amenaza con reducir las cifras de vuelos. 

Los códigos de aeropuertos más extraños del mundo

La compañía aseguraba a principios de este mes que no tiene sentido hacer esfuerzos por reducir las tarifas mientras se afrontan unas tasas excesivamente caras. Las tasas son uno de los elementos que más influencia tienen en el coste de los billetes de avión, especialmente en los de corta distancia. 

Si finalmente el gestor aeroportuario sube las tasas, revisarán el impacto que tendrá en su negocio y sopesarán moverse a otro país.