He montado en la atracción más exclusiva de Disneyland y merece la pena cada segundo: es como estar dentro de una película de Star Wars

Hace una semana, Electronic Arts invitó a un puñado de medios y creadores de contenido españoles al exclusivo evento de preview de Star Wars Jedi: Survivor, en Los Ángeles. 

Entre ellos estaba Hobby Consolas, así que pude viajar hasta el otro lado del charco para probar este nuevo y esperadísimo videojuego de Star Wars que llegará a PS5, Xbox Series X|S y PC el 28 de abril. Si quieres, puedes leer las impresiones en HobbyConsolas mientras esperas a que llegue a las tiendas españolas.

Además de la sesión de juego, la compañía desarrolladora me invitó a pasar un día en Disneyland, el parque de atracciones que se encuentra en la ciudad de Anaheim, California. 

Uno de los mayores atractivos del parque es sin lugar a dudas Galaxy's Edge, una zona dedicada a Star Wars que recrea con todo lujo de detalles un asentamiento del borde exterior. Al pasear por sus calles, es habitual toparse con personajes como Rey, Chewbacca, Kylo Ren o Din Djarin (más conocido como "El Mandaloriano") y el pequeño Grogu.

Galaxy's Edge también acoge una cantina, numerosas tiendas y puestos de comida con precios prohibitivos (al pagar, los vendedores están obligados a decir el precio en "créditos" en lugar de dólares) e incluso una réplica del legendario Halcón Milenario de Han Solo.

Pero desde enero de 2020, la mayor atracción de Galaxy's Edge es Rise of the Resistance. Se trata de un recorrido a pie y en vagoneta, en interiores y exteriores, que tiene prácticamente de todo: persecuciones vertiginosas, caídas al vacío, modelos animatrónicos e incluso actuaciones en directo, todo ello acompañado por la maravillosa banda sonora de John Williams.

Como imaginarás, también se trata de la atracción de Disneyland más solicitada, lo que supone colas de hasta una o 2 horas. Electronic Arts me facilitó la entrada a Disneyland junto al servicio Disney Genie+, lo que nos daba la posibilidad de acceder a las colas rápidas de las atracciones...

Sin embargo, Rise of the Resistance no forma parte de este servicio: para poder acceder a la cola rápida de esta exclusiva atracción, es necesario pagar un extra de 25 dólares. Y, aun así, hay que ser rápido a la hora de reservarlo, pues lo normal es que las plazas de cola rápida se agoten a las pocas horas de abrir el parque (algo que, en efecto, sucedió).

Por suerte logré reservar una plaza y pude acceder a Rise of the Resistance sin tener que hacer apenas cola. Y tras montar, tengo que admitir que, incluso aunque haya que esperar dos horas, la atracción merece muchísimo la pena.

El recorrido comienza con un "briefing" cortesía del simpático droide BB-8 y un convincente holograma de Rey, con la interpretación de la actriz Daisy Ridley. Mi misión como nuevo recluta de la Resistencia es contactar con la general Leia Organa en el planeta Pacara.

Tras esto, salí al hangar exterior para montar en el transporte que me llevará a mi destino (de camino podrás ver una réplica del característico X-Wing de color negro de Poe Dameron). Al subir te recomiendan que te agarres a los asideros y pronto descubres el por qué: el transporte es atacado por un destructor estelar de la Primera Orden y fui capturado.

Aquí tuvo lugar mi parte favorita de la atracción: tras ser atrapado por el rayo tractor, las puertas del transporte se abrieron y un oficial de carne y hueso de la Primera Orden entró para anunciar que había sido capturado y guiarme hasta mi celda en el interior del destructor estelar. 

Al salir, descubrí con sorpresa que, en efecto, estaba dentro del destructor estelar (recuerda que esta misma puerta daba, minutos antes, al exterior). Una treintena de stormtroopers colocados con precisión militar me daban la bienvenida al gigantesco hangar. No pude evitar soltar un grito ahogado al verme ahí; es un momento sencillamente increíble.

Tras encerrarnos en una celda, Kylo Ren y el General Hux (interpretados por Adam Driver y Domhnall Gleeson, respectivamente) me dan la bienvenida mediante un vídeo en el que discuten sobremi interrogatorio. Por suerte, después de que los villanos se marchen, empiezo a escuchar voces tras las paredes y alguien abre un agujero en la celda, permitiéndome escapar.

Aquí empieza la verdadera atracción, montándome en un transporte de la Primera Orden (una vagoneta para hasta ocho personas) operado por una unidad R5. El trayecto no es especialmente movidito, así que es recomendable incluso para la gente que suele rechazar las montañas rusas más tradicionales.

La gracia, como todo en Rise of the Resistance, es que se trata de una huida al más puro estilo Star Wars: los disparos de bláster nos acompañan durante todo el recorrido, nos topamos con un droide sonda, con un par de caminantes AT-AT (otro de mis momentos favoritos de la atracción) e incluso vemos a Kylo Ren utilizando la Fuerza y su sable láser para intentar atraparme (sin éxito).

Finalmente, logré alcanzar las cápsulas de escape y me dejan caer al vacío (sin previo aviso), tras lo que tiene lugar un accidentado aterrizaje con el que concluye la atracción.

Puede que montar en Rise of the Resistance requiera sufrir una cola de más de una hora (y bajo un sol de justicia) o pasar por caja, pero no existe nada igual; es lo más parecido a estar dentro de una película de Star Wars.