El autobombo de Sam Altman con Scarlett Johansson plantea una duda preocupante sobre OpenAI: ¿De qué va toda esta gente?
Jason Merritt/Getty; Kevin Dietsch/Getty; Business Insider
- Scarlett Johansson dice que la voz de la nueva versión del chatbot de OpenAI es "inquietantemente parecida" a la suya.
- Entre esto y el escándalo del pasado noviembre, cuando Sam Altman fue expulsado de su propia compañía, parece una situación abocada al desastre... ¿Estas son las personas que se supone que van a hacer realidad el futuro?
La pelea entre OpenAI y Scarlett Johansson no solo es un desastre a nivel de relaciones públicas (y de los gordos). También revela una actitud preocupante con respecto a la relación entre la inteligencia artificial y la propiedad intelectual de las personas (incluida su propia voz).
Sobre todo, demuestra que en las altas esferas de la empresa dirigida por Sam Altman se está actuando con muy, muy mal criterio.
Supongamos que ScarJo hubiese accedido a ponerle voz a "Sky" para la nueva versión de ChatGPT en lugar de que la compañía de IA contratase a otra persona para que interpretase esta coqueta voz femenina. En ese caso, la voz no solo recordaría vagamente a la de la película Her, de Spike Jonze, sino que sería literalmente una imitación exacta de la cinta, con Johansson en el papel protagonista.
Pero... párate un segundo e imagina lo verdaderamente estúpida que sería esa idea desde el principio.
En primer lugar, conseguir que una de las actrices mejor pagadas de Hollywood promocione uno de tus productos es caro. Y conseguir que repita un papel de 2013... ¿Para qué, exactamente? ¿Solo para una broma? Tampoco hay tanta gente que haya visto Her (y resulta especialmente preocupante que los líderes tecnológicos se hayan olvidado de lo que ocurre al final de la película).
Por otra parte, hay que tener en cuenta que un asistente de voz no tiene por qué ser necesariamente una voz femenina estadounidense, sexy y coqueta. Sí, existen otras opciones de voz, pero OpenAI eligió a Sky para mostrar esta función durante la presentación de GPT-4o, su nuevo modelo de inteligencia artificial.
Valdría con haberle dado un par de vueltas. Sería gracioso para un anuncio de la Super Bowl, pero no para convertirse en el producto estrella que, además, tú mismo llevas tiempo diciendo que va a cambiar el mundo.
Lo que ha ocurrido en realidad, por supuesto, ha sido mucho peor. Cuando el CEO de OpenAI le pidió a Scarlett Johansson que prestase su voz para ChatGPT el pasado mes de septiembre, durante la huelga del sindicato de actores en Estados Unidos (SAG), esta se negó, tal y como ha informado la CNN.
Mientras tanto, OpenAI contrató a una actriz de doblaje que, según ha defendido posteriormente la empresa, no pretendía imitar la voz de la protagonista de Her. Sin embargo, todo el mundo se dio cuenta inmediatamente de que la voz de Sky, de ChatGPT, les recordaba a ScarJo.
Y entonces Altman, en uno de los mayores gestos de autobombo de la —breve— historia de la IA generativa, tuiteó "her" durante la demostración de su nuevo producto la semana pasada. ¿Acaso no parece que OpenAI quisiese recordar al personaje de Johansson en la película de Spike Jonze?
La startup de inteligencia artificial ha asegurado a través de un comunicado que la voz de Sky no pretendía imitar la de Johansson. El director ejecutivo de OpenAI ha afirmado en una declaración a Reuters que la actriz utilizada para Sky fue elegida antes de ponerse en contacto con Johansson para pedirle que utilizase su voz.
"Por respeto a Johansson, hemos dejado de utilizar la voz de Sky en nuestros productos", ha expresado Altman. "Pedimos disculpas a la Sra. Johansson por no habernos comunicado mejor".
Ahora, tanto el CEO de OpenAI como la propia desarrolladora de ChatGPT parecen haberse metido con una celebridad inmensamente popular, mundialmente reconocida por su papel de superheroína en la popularísima franquicia Marvel, con un marido cuyo trabajo consiste en burlarse de las cosas que salen en las noticias cada semana y con un amplio historial de juicios contra grandes compañías.
Por supuesto, también parecen haber tocado una fibra sensible, porque ahora hay un rostro conocido y popular ligado a algo que al público en general ya de por sí le ha puesto bastante nervioso: "¿Va a robarnos la IA nuestros contenidos y a reemplazarnos?".
A través de sus publicaciones en X (la red social anteriormente conocida como Twitter), Altman parece haberse metido en el mayor desastre de relaciones públicas del sector tecnológico desde el caso "Facebook Beacon", algo completamente evitable. Además, el equipo de OpenAI utilizó una voz que imitaba a la de Scarlett Johansson, también algo completamente evitable
Casi te hace preguntarte: ¿de verdad creemos que estas personas son tan listas y tienen tan buen juicio como para estar a cargo de esta tecnología que puede cambiar nuestras vidas?
La semana pasada, varios empleados de alto rango de la desarrolladora de ChatGPT, entre ellos Ilya Sutskever (cofundador de la startup y miembro del consejo de administración), abandonaron la empresa.
Todo esto seis meses después del despido del CEO de OpenAI a finales de noviembre (y de su posterior regreso a la semana siguiente). Los detalles de lo que ocurrió en ese momento finalmente resultaron tener que ver, no con una espectacular lucha por el control de una inteligencia artificial todopoderosa, sino con los chismes habituales de un lugar de trabajo y con un supuesto caso de acoso.
Aun así, todo lo que ha ocurrido es suficiente para hacer que incluso el más optimista de los aceleracionistas efectivos se pare y se pregunte: ¿de qué va toda esta gente? Si la IA es tan poderosa y va a cambiar el mundo como la desarrolladora de ChatGPT dice que hará, ¿no se supone que debemos estar ligeramente preocupados de que la gente a cargo siga tropezando con la misma piedra?
Conoce cómo trabajamos en BusinessInsider.
Etiquetas: Trending, Inteligencia artificial, Películas, ChatGPT, OpenAI