Debacles, trasvases y claves: así se configurarán los nuevos bloques en los 12 parlamentos que nacerán de las elecciones autonómicas del 28M
PSOE
- Las encuestas vaticinan cambios en los parlamentos de las 12 comunidades que celebrarán elecciones autonómicas el 28 de mayo.
- La izquierda tratará de defender sus gobiernos de coalición en la Comunidad Valenciana, Aragón, Baleares, Canarias o Navarra, mientras el PP hará lo propio en bastiones como Madrid o Murcia.
- La anticipada debacle de Ciudadanos y el papel de Podemos permiten imaginar cómo serán las negociaciones tras los comicios.
La campaña electoral de las elecciones autonómicas y locales ya ha comenzado y hay mucho en juego.
El poder se reparte en 12 comunidades autónomas, con unos comicios que estarán marcados por las elecciones generales de finales de año. Por este motivo, los líderes nacionales de los partidos se están implicando en todas las arenas, con especial interés en algunas plazas.
Las réplicas del Gobierno de coalición nacional en comunidades como Valencia, Aragón, Baleares, Canarias, La Rioja o Navarra están en el punto de mira, ya que sus resultados se leerán en clave nacional y podrían marcar los meses siguientes hasta las generales.
Otro de los territorios enmarcados en el contexto de la política nacional será Madrid, donde Isabel Díaz Ayuso busca confirmar su liderazgo como oposición a Pedro Sánchez.
La contestación en las urnas con una mayoría absoluta de la madrileña en una campaña dirigida contra el presidente del Gobierno dejaría a Sánchez en una posición difícil en la capital, mientras que en otras comunidades, la tensión contra el Ejecutivo central no alcanza los mismos niveles.
Estos son algunos de los motivos por los que hay tanta expectación por cómo se dirimirán las fuerzas políticas que pendulan en el eje izquierda-derecha. La política de bloques y de pactos se ha instaurado en todas las comunidades, con mayorías absolutas residuales que darán paso a coaliciones de gobierno por bloques.
Con la probable desaparición de Ciudadanos en la mayoría de gobiernos autonómicos, el bloque de la derecha queda dividida entre el PP y Vox, que coge fuerzas en la mayoría de parlamentos.
Por el otro lado, una izquierda fragmentada en los diferentes territorios se enfrenta a la probable pérdida de representación de Unidas Podemos (los morados e IU irán juntos en 10 de las 12 comunidades), que cae en casi todos los territorios, según la media de encuestas elaborada por RTVE.
Teniendo en cuenta que lo que se recopila a continuación es la intención de voto y que los ciudadanos tienden a elegir su papeleta en el último momento, como afirman los expertos, los resultados podrían variar según se desarrolle la campaña electoral.
Comprueba cuáles fueron las mayorías tras las elecciones autonómicas de 2019 —2021 en el caso de la Comunidad de Madrid— con los siguientes gráficos y descubre cómo podrían variar tras el cierre de urnas, en función de a dónde vayan muchas de las papeletas.
En Aragón, la irrupción de Aragón Existe será clave
En Aragón, como en otras muchas comunidades autónomas, la duda es si Ciudadanos mantendrá representación o desaparecerá. Los naranjas tienen ahora 12 diputados, que, sumados a los 16 del PP y los 3 de Vox, no fueron suficientes para hacer frente a la heterogénea suma gobernante, que va desde la izquierda hasta el centroderecha: PSOE (24), Podemos (5), Chunta Aragonesista –CHA– (3), Partido Aragonés –PAR– (3) y el apoyo para la investidura, aunque sin entrar en el Gobierno, de Izquierda Unida (1).
En esta comunidad hay otros 2 elementos distorsionantes: la más que posible desaparición del PAR (en pleno proceso de autodestrucción) y la irrupción de Aragón Existe.
Según el promedio de encuestas elaborado por RTVE, de los 12 diputados que tiene Ciudadanos sólo mantendría uno, mientras que el PAR perdería los 3. Es decir, el centro-derecha se dejaría 14 por el camino. ¿Quién los recoge? El PP (que subiría 9, hasta los 25) y Vox (que pasaría de 3 a 6). Los otros 2 (hasta 14) se irían para Aragón Existe.
Pero a esta formación le dan 5 diputados las encuestas, que salen (además de los 2 del centro-derecha) del PSOE (que baja de 24 a 23 y de Podemos: de 5 a 3). CHA e IU se mantendrían con 3 y uno respectivamente.
Con estos hipotéticos resultados, y teniendo en cuenta que la mayoría absoluta en Aragón está en 34 escaños, el bloque de izquierdas sumaría 30 y el de la derecha 32. La llave estaría en manos de Aragón Existe, ¿de qué lado caerá la balanza?
A Barbón en Asturias ya no le valdrá la abstención de Podemos
Si se cumplen las encuestas, Adrián Barbón (PSOE), actual presidente de Asturias, va a necesitar negociar más que hace 4 años.
Entonces, consiguió ser investido con los 20 votos de su partido y los 2 de IU. No llegó a la mayoría absoluta (23), pero el sistema asturiano favorece la gobernabilidad, y en el acto de investidura no se puede votar en contra, sólo a favor o abstención. Excepto IU, todos los demás (incluido Podemos) se abstuvieron.
Pero los sondeos indican que en los próximos comicios los socialistas podrían perder un sillón (19), mientras a IU no le ayuda ir con Más País, puesto que se queda en 2. 21 en total.
En el bloque del centroderecha, la suma es la misma: PP (que pasa de 10 a 16), Vox (de 2 a 4) y Foro Asturias (de 2 a 1). También 21. Ciudadanos pierde sus 5 escaños que se quedan en la derecha.
La pelota estaría en el tejado de Podemos (que está viviendo una colosal crisis en Asturias). Los morados pasarían de 4 a 3 diputados, pero, a diferencia de lo sucedido en 2019, cuando el bloque liderado por el PSOE estaba por encima del que encabezaba el PP, no le valdrá con una abstención. Para desbloquear la situación tendrá que dar su apoyo explícito al Gobierno socialista.
Las líneas rojas de un partido regionalista marcarán la gobernabilidad en Baleares
Como en el caso de Aragón, según el promedio de encuestas de RTVE, en Baleares todo estaría en un puñado de votos.
Actualmente, el Gobierno está presidido por Francine Armengol, del PSIB —Partido Socialista de las Islas Baleares—, que tiene 19 escaños. Le acompañan Unidas Podemos (6 diputados) y Més per Mallorca (4). A ellos sumó el apoyo de los 2 de Més per Menorca y el del único diputado de Gent per Formentera (GxF). 32 en total, por encima de los 30 que marca la mayoría absoluta.
Pero las cosas pueden cambiar. Las encuestas (excepto el último CIS) barruntan que el PSIB perdería 2 asientos y se quedaría en 17, Unidas Podemos (es una de las 10 comunidades en las que ha habido unidad) bajaría de 6 a 4 y Més per Mallorca se mantendría en 4. Entre los 3 sumarían 25 diputados.
Necesitaría de nuevo Armengol los apoyos de Més per Menorca (sube uno para sacar 3) y GxF, que mantendría su escaño. La adición entonces daría 29.
Por la derecha, de nuevo el trasvase de votos de Ciudadanos no mira para nada a la izquierda. Los naranjas pierden sus 5 diputados, mientras que el PP gana 6 (de 16 a 22) y Vox 3 (de 3 a 6). 28 entre los 2.
La clave estaría en la mano del Proposta per les Illes (PI), un partido regionalista que pasaría de 3 a 2 diputados (también se van a la derecha) y que ya ha admitido en varias ocasiones que un pacto con Vox es una “línea roja”.
La sangría en los socios de Ángel Víctor Torres acercan el gobierno canario al centroderecha
Si lo que indica el promedio de sondeos se cumpliera, habría cambio de Gobierno en Canarias. Si la razón la lleva el CIS, el socialista Ángel Víctor Torres seguiría al frente.
Actualmente, gracias al conocido como Pacto de Las Flores, el mando lo tiene el PSOE, que hizo valer sus 25 escaños, los 5 de Nueva Canarias (NC), 4 de Unidas Podemos y 3 de la Agrupación Socialista Gomera (ASG). 37 apoyos (la mayoría absoluta está en 36) para formar un Gobierno cuatripartito.
Las encuestas indican que el PSOE podría mantener los 25, pero la caída de sus socios acercaría el Gobierno al centroderecha: NC pasaría de 5 a 3, Unidas Podemos (también ha habido qúorum) de 4 a 3 y ASG se mantendría. En total: 34.
En el otro lado del arco político, el PP pasaría de 11 a 18, Coalición Canaria (CC) de 20 a 17, Ciudadanos (que tenía 2) perdería su presentación y entraría Vox con un escaño. Justo los 36 que marcan la mayoría absoluta.
En este escenario, ningún partido de la izquierda gana representación, por lo tanto, todos los trasvases de votos se producen hacia la derecha , o bien dentro del propio bloque de la derecha o con un cambio de bloques. En cualquier caso, está claro que los votos de Ciudadanos se van a la derecha y a la extrema derecha.
La ambición cántabra de Revilla: al PRC no le valdrá sólo con el PSOE
El televisivo Miguel Ángel Revilla (Partido Regionalista de Cantabria, PRC) podría repetir como presidente. Sería su quinta legislatura al mando, puesto que ha ocupado el cargo desde 2003, exceptuando la de 2011 a 2015, cuando el sillón fue para Ignacio Diego (PP).
Ahora, el PRC (14 diputados) gobierna en coalición con el PSOE (7). 21 escaños en un Parlamento cuya mayoría absoluta se sitúa en 18. Las encuestas dicen que la suma de estas 2 formaciones se quedaría el 28 de mayo en 17 escaños: 10 del PRC (que perdería 4) y los 7 que mantendrían los socialistas.
Para llegar a la mayoría, Revilla necesitaría pactar también con Unidas Podemos, que entraría en la Cámara con 2 escaños.
La suma en la derecha se queda aún más lejos: el PP, que tiene ahora 9, pasaría a 13; Vox, de 2 a 3, y Ciudadanos perdería sus 2 representantes (que se quedan, como siempre, en el mismo bloque). 16 en total.
Habría, por tanto, 2 opciones: la suma de PRC, PSOE y Unidas Podemos y la poco probable adición entre el PP y el PRC. No es una cuestión ideológica, de hecho, Revilla ya ha gobernado con los populares, sin embargo, tiene un obstáculo de peso: el PP sería el partido más votado y, por ende, sería prácticamente imposible que se prestara a cederle a Revilla la Presidencia.
Habida cuenta de que, tal y como ha apuntado el actual presidente, es la última vez que se presenta, cuesta verle en la Vicepresidencia o saliendo de la política por la puerta de atrás.
García-Page aspira a repetir su mayoría absoluta en Castilla-La Mancha
En un marco general de parlamentos tremendamente fragmentados, el de Castilla-La Mancha es una excepción. Actualmente, sólo hay 3 partidos: PSOE (19 escaños), PP (10) y Ciudadanos (4). Es decir, que el socialista Emiliano García-Page logró la mayoría absoluta (establecida en 17 escaños) en 2019. Tras una legislatura en la que ha escenificado sus diferencias con Podemos, su apuesta es por repetir esa mayoría. No lo tendrá fácil.
El promedio de sondeos le da una pérdida de 3 diputados (se quedaría en 16), mientras que el PP subiría 4 (14) y aparecería Vox con 3. Ciudadanos dejaría sus apoyos en la derecha y los morados seguirían sin entrar.
Sin embargo, el último CIS ofrece una fotografía diferente. Al PSOE le da entre 16 y 22, al PP entre 9 y 11 y a Vox entre 2 y 4. En este caso, incluso en la horquilla más amplia, el bloque de la derecha no tendría ninguna opción y a García-Page le saldría bien su apuesta de mayoría absoluta u oposición.
Una derecha más movilizada quiere conquistar el bastión valenciano
La Comunidad Valenciana es una de las plazas más importantes en la que los bloques se miden fuerzas. Por un lado, PSOE y Compromís y Unides Podem-EU intentarán mantener el 'Pacto del Botanic' frente a una derecha que sumaría 16 escaños más, según la media de encuestas.
El empate casi técnico que auguran los sondeos en la comunidad presidida por Ximo Puig tiene en tensión al Gobierno de Coalición de Pedro Sánchez, ya que la lectura en clave nacional de una derrota de la suma de los partidos progresistas se entendería como un plebiscito al propio Ejecutivo nacional formado por PSOE y Unidas Podemos.
De momento, la mayoría de encuestas dejan como vencedor al bloque de la derecha, que sumarían 51 votos y obtendría mayoría absoluta si llegasen a un acuerdo de gobierno. Por su parte, el bloque de la izquierda sumaría 48 votos tras la caída de 2 y 3 puntos de Compromís y Unidas podemos, respectivamente.
El PP sería la lista más votada con 35 diputados (con 16 más que en 2019), seguida de la del PSOE, que ganaría un escaño más llegando a los 28. Vox quedaría como tercera fuerza política pasando de 10 a 16 diputados, mientras que Compromís se quedaría en 15 y Unidas Podemos en 5, sumando una bajada de 5 candidatos conjuntamente.
Con la vista puesta en el movimiento de los votos, la inclinación de la balanza hacia la derecha podría estar motivada por un trasvase en los bloques: en 2019 PP, Vox y Ciudadanos sumaban 47 escaños y PSOE, Compromís y UP ascendían a los 52, según la media de los sondeos.
Otra explicación de estos posibles resultados sería la movilización por parte de los líderes de la derecha de las personas que se abstuvieron en los comicios pasados (un 24,2% de los votantes).
Fernández Vara se enfrenta al fin de las mayorías absolutas en Extremadura
En Extremadura podría acabarse el ya residual fenómeno de las mayorías absolutas, aunque todo apunta a que seguiría gobernando el bloque de la izquierda.
El actual presidente y candidato del PSOE al 28M, Guillermo Fernández Vara, aspira a revalidar su tercer mandato consecutivo desde 2015, pero no será posible sin sumar a Unidas Podemos.
El resultado dejaría a los principales partidos, el socialista y el popular, dependientes de Vox y Podemos, para poder gobernar. La formación del PSOE obtendría 30 escaños y se quedaría solo a 3 de obtener la mayoría absoluta, perdiendo 4 de sus escaños, cuyos votos podrían virar hacia el bloque de la derecha.
Ciudadanos perdería sus 7 diputados y volvería a ser absorbido por el Partido Popular, que pasaría de los 20 escaños en 2019 a los 25, según el promedio de las encuestas. Vox quedaría tercera fuerza política con 6 nuevos escaños y Unidas Podemos mantendría los 4 que tiene en la actualidad.
Ayuso consolidaría su mayoría absoluta en un parlamento en el que Ciudadanos ya desapareció
El 28 de mayo veremos si el fenómeno Ayuso, que se vivió en las pasadas elecciones de 2021 y que la llevó a rozar la mayoría absoluta tras dejar atrás el Gobierno de coalición con Ciudadanos, se revalida.
La media de encuestas apuntan que será así. De hecho, la candidata del PP aumentaría los escaños de su grupo, alcanzando la mayoría absoluta de 68 diputados. La asamblea de Madrid sería, por tanto, la única comunidad que podría formar gobierno en solitario, sin depender de ninguna otra formación.
Esta situación excluiría a Vox de influir en la política de la capital y a Más País de la posibilidad de formar coalición con PSOE y Unidas Podemos.
El partido de Mónica García, Más Madrid, sería la segunda lista más votada con 25 escaños, obteniendo uno más que en las pasadas elecciones. Le seguiría PSOE con 23 diputados (uno menos que en 2019), Vox con 12 (también con uno menos) y por último, Unidas Podemos con 7 (con 3 asientos menos).
Ciudadanos desapareció por primera vez de los parlamentos autonómicos en 4 de mayo del 2021. Ayuso utilizó la fallida moción de censura de los naranjas en Murcia para provocar unos comicios que la proyectaron como la única candidata viable para dar estabilidad al Gobierno de la Comunidad, además de ser el referente de la oposición a Pedro Sánchez.
En este caso, el PP absorbería votos tanto a su izquierda como a su derecha, consiguiendo el apoyo mayoritario de los madrileños y consolidando su liderazgo.
La extinción de Ciudadanos en Murcia forzará a López Miras a entenderse con Vox
La expectación por lo que pase en Murcia tampoco se queda corta. Este territorio es uno de los bastiones en los que el PP lleva gobernando casi 30 años y que ahora tendrá que defender llegando a acuerdos con Vox.
Fernando López Miras, líder del PP murciano, sobrevivió en 2021 a una moción de censura impulsada por sus propios aliados: Ciudadanos quiso reprobar al Ejecutivo para formar una nueva alianza con el PSOE. El transfuguismo que se vivió tras la moción llevó a que 3 de los 6 diputados de Cs abandonaran su partido y formaran parte del gobierno de Miras, quien también sumó a varios tránsfugas de Vox.
En este contexto, la media de encuestas apuntan a que el PP volvería a ser la lista más votada, pasando de los 16 a los 20 diputados. Le seguiría PSOE con 15 (perdiendo 2 escaños) y Vox sumaría 3 más de los que consiguió las pasadas elecciones, pasando de 4 a 7.
Por su parte, Podemos sumaría un escaño más, quedando con 3 y Ciudadanos desaparecería en Murcia, cuyos votos podrían ser asumidos por PP y Vox.
Navarra Suma pierde fuelle, pero las negociaciones de María Chivite serán igual o más complicadas que en 2019
Las elecciones en la Comunidad Foral de Navarra estarán marcadas de nuevo por la fragmentación política.
En los pasados comicios, UPN, PP y Cs formaron la coalición de Navarra Suma y fue la lista más votada, aunque no les valió de mucho porque el PSOE consiguió liderar una coalición con Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra, con el apoyo indirecto de EH Bildu.
Ahora, el bloque de la izquierda quiere mostrarse fuerte mientras las alianzas de Navarra Suma se diluyen por las tensiones entre PP y UPN. Contigo Navarra sería el paraguas de la agrupación de izquierdas integrada por Podemos, Izquierda-Ezkerra, Batzarre, Alianza Verde y Equo entre otros, excluyendo al PSOE.
La media de encuestas augura una difícil negociación para la formación de gobierno, donde Geroa Bai, la coalición integrada por PNV, Geroa Socialverdes, Atarrabia Taldea y Zabaltzen; y EH Bildu serían la llave que diese paso a la constitución del Ejecutivo navarro.
En el bloque de la izquierda la suma de los escaños daría 29, 3 más de los que necesitan para la mayoría absoluta, pero el PSOE volvería a necesitar pactar con EH Bildu, que sumaría un escaño más (de los 7 actuales a los 8).
Sin embargo, tanto PSOE como Geroa Bai pierden un escaño cada uno (de los 11 a los 10 y de los 9 a los 8, respectivamente), coincidiendo con el aumento también de un punto de EH Bildu, que pasa de 7 a 8 y de Unidas Podemos, que sube de los 2 a los 3.
Por la derecha, UPN sería el partido más votado con 15 escaños, presentándose por separado a los 4 que sacaría el PP y a los 2 que obtendría por primera vez Vox en el parlamento autonómico. Ciudadanos no obtendría representación: sus votos se dividirían entre UPN, Vox y la abstención, que se mantendría en un 4,3% junto a un 1% de voto en blanco, según la última encuesta del CIS.
La llave en La Rioja la tendrá el Partido Regionalista
En las elecciones de 2019, el Gobierno de La Rioja cambió de manos después de 24 años de mandato del PP, con un acuerdo in extremis entre el PSOE y Unidas Podemos.
Ahora, los populares tendrían la oportunidad de reconquistar uno de sus bastiones, según la media de las encuestas elaboradas por RTVE. El PP obtendría 15 escaños, 3 más que en las pasadas elecciones, asumiendo votos de Ciudadanos, que se quedaría sin representación también en esta comunidad.
Vox obtendría representación por primera vez en el parlamento riojano con 2 diputados y la suma de las derechas sería 17, la necesaria para alcanzar la mayoría absoluta.
Por otra parte, el PSOE perdería 2 escaños, pasando de los 15 a los 13 y Unidas Podemos también bajaría de 2 a 1. Para revalidar el Gobierno de Coalición, los principales partidos de la izquierda dependerán del Partido Regionalista (PR+) en coalición con la España Vaciada y otras 2 formaciones más, en el caso de que superen la barrera del 5% de los votos para sacar representación.
La suma de sus escaños quedaría en 16, por lo que todo dependerá de la aparición del PR+ y de que se alcancen los acuerdos necesarios entre los partidos del mismo bloque.
Unas elecciones absolutamente abiertas
Si algo caracteriza a estas elecciones autonómicas es la incertidumbre. En ninguna comunidad se atisba un resultado claro. La fragmentación, habitual en los Parlamentos desde 2015, seguirá obligando a las distintas formaciones a sentarse y escucharse para llegar a acuerdos.
La noche electoral se prevé frenética en prácticamente todos los lugares, aunque hay algunos que centrarán más interés. Madrid, por supuesto, será uno de ellos, con la ya habitual guerra a la izquierda del PSOE y la posibilidad real de que Isabel Díaz Ayuso obtenga la mayoría absoluta.
Otra batalla se librará en Valencia. El 'Pacto del Botanic' se tambalea y el PP sueña con recuperar un trono que perdió en 2015 (tras 20 de años al frente), y que en las 2 últimas legislaturas se había convertido en un bastión socialista. Es de los lugares en los que estas elecciones exceden de lo autonómico.
En Navarra, todo apunta a que EH Bildu jugará un papel preminente a la hora de pactar, con todo lo que ello conlleva. Y en Aragón, Baleares y Canarias, 3 partidos regionalistas tendrán la llave de Gobierno (Aragón Existe, Proposta per les Illes y Agrupación Socialista Gomera, respectivamente).
Precisamente Aragón, junto con Extremadura y Castilla-La Mancha serán otros 3 focos de atención. Allí, los 3 barones socialistas más críticos con Sánchez, es decir, Lambán, Fernández Vara y García-Page, caminan sobre terrenos inestables. La pelota podría caer a cualquiera de los 2 lados de la red.
La deseada participación de Yolanda Díaz por parte de Unidas Podemos podría tener un efecto positivo en los partidos a la izquierda del PSOE. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo ha intentado equilibrar su apoyo entre los diferentes partidos que pretende aunar bajo las siglas de Sumar.
En Valencia, la política estará presente en los actos de Héctor Illueca, candidato a la Generalitat Valenciana de Unides Podem y en los de Joan Ribó (Compromís) actual alcalde de Valencia. También hará lo propio en Madrid con candidatos de Más Madrid, Podemos e Izquierda Unida.
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Descubre más sobre Miriam Pérez, Óscar F. Civieta, autores/as de este artículo.
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