Por qué es tan importante la pieza de plástico que viene en medio de las pizzas que compras

Pizza con un guardapizza

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  • Lo habrás visto cuando has pedido o llevado una pizza: dentro de la caja, en el centro de la pizza, hay una especie de mesita de plástico con 3 patas. ¿Por qué está ahí?
  • Esta pieza de plástico no está como adorno, no sirve para separar los trozos de pizza y no es un objeto para jugar a las cocinillas. Su función es sencilla, pero más importante de lo que pensabas, y tienes mucho que agradecerle.
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Es una de esas noches en que estás en casa y no te apetece cocinar, o una reunión con amigos o compañeros de trabajo para la que queréis pedir comida. Coges el móvil, encargas varias pizzas y esperas. Cuando llegan, te lanzas a por ellas, abres la caja y ahí está tu pizza... junto a una pieza de plástico que no sabes qué pinta allí.

Muchas personas la habrán apartado sin pararse a pensar para qué la han puesto, o a lo mejor la han utilizado para ayudarse a cortar los triángulos. Sin embargo, hay una explicación de por qué hay una especie de mesita de plástico en el centro de la pizza, muy pequeña y con 3 patas.

Esta pieza de plástico no está como adorno, no sirve para separar los trozos de pizza y no es un objeto para jugar a las cocinillas. 

Su función es tan sencilla e importante como la de ejercer de 'muralla' entre la caja y la pizza: así, la mesita de plástico 'protege' a la pizza y evita que se quede pegada a la caja cuando esta se cierra, de forma que la pizza te llega en las mejores condiciones posibles a pesar del movimiento.

¿Cómo se llama el plástico que le ponen a la pizza?

Una vez que ya se sabe para qué sirve el objeto de plástico con el que vienen las pizzas, el siguiente paso es conocer cómo se llama. Como se verá a continuación, se habla de nombres como separador entre la pizza y el envase (abreviado a SEPI), guardapizzas o pizza saver.

Sin embargo, las formas de llamar a esta pieza de plástico que separa la pizza de la caja son variadas y dependen de criterios como el geográfico. El año pasado, la RAE ya lanzó su consulta y puso varias opciones delante: 'guardapizza', mesita, cosito, trípode...

Como informa la Academia, no parece que exista un nombre 'oficial' y de consenso universal para este objeto, aunque "lo que hay son distintas denominaciones posibles y válidas", apunta.

Eso sí, aclara que uno de los nombres utilizados, "coso" (varios usuarios de Argentina comparten que allí se le llama "el coso/cosito de la pizza"), se considera "poco específico, pues, en principio, se usa para cualquier objeto al que no se denomina por su nombre concreto".

Entre las distintas alternativas, apunta a "guardapizza" como una de las válidas: "Se puede llamar asíporque sirve para guardar (en el sentido de 'preservar algo del daño que le puede sobrevenir') la 'pizza'", admite.

¿Quién creó el separador de pizza?

La historia del guardapizzas no lleva a Italia, sino a Estados Unidos, donde parece que Carmela Vitale lo inventó en 1983 en Long Island, Nueva York. Ella lo denominó package saver (algo así como 'guardaenvase', o 'protector del envase') y obtuvo la patente el 12 de febrero de 1985.

Sin embargo, este invento quedó liberado en 1993, debido a que se dejó de pagar la patente, y a partir de ahí surgió la fabricación de estas piezas de plástico o guardapizzas, informa 20 Minutos.

En la patente, el invento se describe como un "dispositivo de plástico moldeado resistente a la temperatura para su uso en cajas o paquetes, como las cajas de pizza, en las que hay una tendencia a que las grandes porciones de la cubierta se hundan hacia abajo para dañar la pizza blanda u otros productos envasados". 

"Para su uso, el protector se coloca cerca del centro del paquete para apoyar a la cubierta de la caja en la protección del contenido", añade.

Imagen de la patente del guardapizza.
Imagen de la patente del guardapizza.

Google Patents

Así, esta pequeña pieza de plástico ha conseguido salvar tu pizza y evitar que el queso y otros ingredientes queden pegados a la caja en muchas ocasiones. Su precio es de apenas unos céntimos de euro, pero su valor es considerable, más aún en vista de la cantidad de pizzas que se consumen en el mundo.

Según los cálculos de Eater, en Estados Unidos se venden aproximadamente 3.000 millones de pizzas al año. "Incluso suponiendo que solo se entregue la mitad de esa cantidad y que solo 2/3 de ellas tengan un salvapizza, estamos hablando de 1.000 millones de pizzas al año con un guardapizza", estima.

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