El altavoz inteligente Sony SRS-RA5000 es el complemento perfecto para los que busquen la excelencia en el sonido, aunque su precio no es apto para todo el mundo

Cuando Sony lanza al mercado un nuevo producto centrado en el sonido es normal que sus principales competidores echen a temblar.

Y no es para menos. Ya cambio la industria con la presentación del walkman o el discman hace ya bastantes años y siguen siendo absoluta referencia en productos tan redondos como el WH-1000XM4 o los recientes WF-1000XM4, que tengo claro que son los mejores auriculares del año. 

Ahora no llegan con una revolución a la altura, sino con la evolución lógica de sus altavoces inteligentes para el hogar. 

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Durante las últimas semanas he tenido entre manos el altavoz inteligente Sony SRS-5000, un dispositivo que se diferencia con sus principales competidores por ofrecer sonido 360 Reality Audio y un diseño impactante y muy diferente a lo visto habitualmente en el mercado. 

Eso sí, como podrás imaginarte es un producto premium que igual no está al alcance de todos los bolsillos: cuesta 550 euros. 

Ahora bien, si eres un apasionado del sonido, estás en busca y captura de un sonido sobresaliente y quieres darle un toque diferenciador a la decoración del salón de tu casa, hay motivos suficientes para el desembolso.

Diseño único y muy característico que igual se te hace un poco complicado buscarle un sitio por su enorme tamaño. 

Lo primero a destacar es que el altavoz inteligente Sony SRS-5000 está pensado para colocarse en medio de una estancia y que, gracias a la configuración de sus altavoces, logre llenar de sonido la sala. 

Esto no quiere decir que no puedas ponerlo en una esquina del salón o en una zona diferente, pero es cierto que el sonido no rinde del mismo modo.

En este sentido, una de cal y una de arena. Si pones el altavoz en el medio de una habitación, tendrás un sonido a la altura, pero como necesita estar conectado a la corriente, tendrás el cable de carga por el suelo. Si optas por colocarlo en una esquina para que no se vea el cable, perderás algo de la potencia del sonido, aunque sigue ofreciendo un sonido muy logrado.

Esta última es la que he acabado utilizando por temas de espacio y es que el altavoz es gigantesco, aunque viendo el sonido que sale de su interior, totalmente comprensible. 

Para que te hagas una idea, mide casi 33 centímetros de alto por 23 de ancho y su curiosa estética hace que sea más complicado buscarle un sitio. 

En este sentido, Sony ha optado por los característicos colores que le da a sus productos de sonido, negro y cobre y la verdad es que le sientan muy bien. 

En la parte superior, en color cobre, descansan 3 altavoces que proyectan el sonido hacia arriba, la parte central con una rejilla en negro muy bonita se alojan otros 3 altavoces para propagar la música en horizontal y en su interior hay ubicado un woofer para darle salida a los graves más profundos y detallados. 

La parte inferior tiene la conexión para el cable de carga y en la superior aparecen varios indicativos LED para indicarte la fuente de donde proviene el sonido: bluetooth, conexión para auriculares —minipunto fabuloso— o por wifi.

Cerrando el diseño, cuenta con varios controles táctiles. En un lado descansan los controles para subir o bajar el volumen o el clásico botón de play/pause. En el otro, se aloja el encendido, la fuente de donde proviene el audio y un botón extra para cambiar entre modos de sonido diferentes. 

La ubicación me ha parecido extraña, ya que requiere que tengas que mover la cabeza de un lado a otro para situarlos y en este sentido hubiese preferido que todos se alojasen en un solo lateral o bien en la zona superior para una mejor visualización. De todas formas, su comportamiento es más que correcto y responden a la perfección. 

Un sonido espectacular marca de la casa que me ha dejado alucinado.

Tenía muy claro que Sony no me iba a defraudar en este punto. 

Viendo lo que han conseguido en otros dispositivos con la calidad de sonido sabía lo que me iba a encontrar: un sonido sobresaliente, con una pegada fantástica y que te va a dejar disfrutar de tus géneros favoritos a un nivel espectacular. 

Además, gracias al botón que tiene en el lateral para jugar con los diferentes modos de sonido —y que también puedes configurar desde la aplicación Music Center de Sony (iOS, Android)— puedes encontrar el que más te gusta. 

En definitiva: un sonido muy equilibrado que brilla en los graves y que inunda la estancia con un montón de matices muy detallados. 

Pero donde está la joya de la corona es en el modo 360 Reality Audio. 

Eso sí, una advertencia: no todas las canciones tienen esta opción y que necesitas servicios como Tidal o Amazon Music HD —de pago, lógicamente— para disfrutar con esta calidad de sonido. 

La diferencia con el modo normal es muy palpable y lo cierto es que es un absoluto regalo para los melómanos más empedernidos. 

Buena conectividad y con Google Assistant o Alexa para pedirles lo que quieras. 

En cuanto a la configuración, podrás realizarla de manera muy simple a través de la app Music Center de Sony a la que se le suma la app Home de Google. Además, desde el móvil también podrás conectarlo por bluetooth sin necesidad de ninguna aplicación extra, aunque es cierto que el sonido es un poco peor que por conexión wifi. 

El único punto negativo es que no son compatibles con el estándar AirPlay 2 de Apple, por lo que para configurarlos por wifi necesitarás la app de Google Home. De todas formas, es un punto negativo muy residual, ya que solo requiere de una aplicación externa para poder disfrutarlo al máximo. 

Lo más interesante es que el SRS-RA5000 es compatible con el sistema multiroom para que una canción pueda sonar en varias habitaciones en donde haya altavoces compatibles con Google Home y es posible conectarlos por Bluetooth con televisores Sony Bravia para disfrutar de un pequeño cine en casa. 

Para redondear, el altavoz cuenta con Google Assistant o Alexa para que puedas preguntarles lo que quieras o incluso manejar la música por la voz. 

El altavoz Sony SRS-RA5000 es un producto redondo, aunque tiene un público objetivo muy concreto por su elevado precio: los melómanos más empedernidos.

¿Los recomiendo? Sin lugar a dudas, pero solo para aquellos que quieran la excelencia en el sonido.

Existen infinidad de altavoces que ofrecen las mismas prestaciones que este altavoz de Sony por un precio mucho más comedido como el Citation 200 de Harman Kardon, que además es inalámbrico, y puedes comprar por 349 euros o incluso el Google Nest Audio que cuesta solo 99 euros.

Sin embargo, ninguno arroja un sonido tan potente, equilibrado y brillante como el nuevo altavoz inteligente de Sony, así que si quieres lo máximo en calidad de audio, no te lo pienses: te va a enamorar por completo.