El fundador de Flywire, la primera startup de origen español que consiguió cotizar en el Nasdaq, ha fundado un colegio y está creando un barrio sostenible en Valencia

Flywire, la compañía de procesamiento de pagos nacida en Valencia, es una de las startups que ha hecho historia en el ecosistema español, al convertirse en uno de los primeros unicornios —como se denomina a las empresas que superan los 1.000 millones de dólares valoración, unos 860 millones de euros al cambio actual— y posteriormente ser la primera en salir a cotizar al Nasdaq estadounidense el pasado mes de mayo.

La compañía fundada por Iker Marcaide sigue congregando un gran apetito inversor que la ha llevado a superar los 5.000 millones de dólares (unos 4.300 millones de euros, al cambio actual), pero la persona que la puso en marcha, inicialmente con el nombre de PeerTransfer y el objetivo de solucionar los problemas de cambio de divisas que él mismo sufrió como estudiante internacional, dejó el proyecto hace años.

Lejos de los focos, Marcaide no ha dejado de emprender. Actualmente dirige Zubi Labs, una compañía que agrupa una aceleradora de proyectos de negocio o venture builder y un fondo de inversión de proyectos con impacto social, Zubi Capital, y está inmerso en el desarrollo de un proyecto que va mucho más allá de lo tecnológico: un barrio sostenible en la localidad valenciana de Paterna.

Flywire, la primera startup de origen español que cotiza en el Nasdaq, cumple 100 días en bolsa: así se ha fraguado su éxito, según su CEO

"Busco problemas e intento resolverlos. Perdía dinero por hacer muchos pagos y por eso fundé la compañía (Flywire); estaba buscando un colegio para mis niños en Valencia y descubrí que no me gustaba ninguno, así que decidí crear uno que ahora tiene 300 niños; y luego pensé que el entorno podía ayudar a mejorar la experiencia en el colegio", relató Marcaide este jueves en el South Summit.

Encuadrado en una mesa redonda sobre la tecnología aplicada al sector inmobiliario, Marcaide explicó el proyecto del Barrio La Pinada, un proyecto de barrio sostenible a las afueras de Paterna con 30 hectáreas, 1.000 hogares y más de 2.000 árboles que pretende fomentar el medio ambiente, el comercio de cercanía, la reutilización del agua, la energía renovable o la economía circular.

"Estamos construyendo un distrito como una startup, cocreando un distrito con miles de personas. La gente es la que crea las ciudades, no los edificios. Es una especie de gran piloto a nivel de distrito, que esperamos sea el primero de muchos", relató el emprendedor.

El proyecto tiene actualmente unos 400 futuros vecinos que se han implicado en la creación del barrio, con la compra de los terrenos, la adecuación de la zona, la creación del espacio de ocio familiar Fun Places y del laboratorio de innovación La Pinada Lab, un espacio que es la primera construcción del terreno y en el que realizan eventos y talleres.

La compañía de Marcaide, Zubi Labs, es la responsable del colegio Imagine Montessori School, la inmobiliara Trebe, la empresa de purificación de agua Medita, el buscador de experiencias familiares Trobatea, la empresa de software para energía solar Solaris Offgrid, la empresa de proyectos de sostenibilidad Mosaik o la herramienta Onerz para calcular la huella de carbono de la actividad de una familia o empresa.

"Todas estas cosas nos ayudan a hacer realidad nuestro proyecto, que será el primero de muchos de diferentes tamaños", comentó Marcaide, que reconoció que ya han recibido interés de propietarios de otros suelos para desarrollar proyectos similares.